Miraba desde lo más alto la cantidad de gente que se reunía. Su estómago se revolvía de pensar la razón por la que estaba allí.
Giró su rostro hacia su lado derecho. Una mujer de pelo rosa, mirada gentil y aura imponente. Le sonrió y sintió como su corazón se calmaba. Ella siempre lograba eso en la gente. A su izquierda, un hombre de pelo gris, fuerte, cálido, con un semblante tranquilo. También le sonrió y su cuerpo se relajó , por que a su lado se sentía seguro.
Así eran ellos. Dos personas que juntos eran capaces de transformar su mundo. Tomó sus manos y sintió como el calor se transmitía por sus poros. Aunque sabía que no siempre fue así. Que tuvieron altos y bajos, que sufrieron, que se equivocaron, que lo intentaron, que erraron. Por que él lo sintió desde el primer momento.
Pero desde que abrió los ojos y se encontró con esa mirada jade entre tanta luz, supo que ella lo protegería. Por que cuando sus fuertes brazos lo cargaron después de su primer llanto, supo que no se había equivocado en elegirlos a ellos. Por que cuando lo llamó por primera vez "papá" y él abrazó a su madre llorando y agradeciendo lo feliz que era, supo lo que significaba ser una familia. Por que cuando él enfermó y su madre se desveló cuidándolo, supo que no existía un amor más sacrificial, fuerte e infinito que el que ellos le profesaban. Por que cuando no podían ser más felices, siguieron creciendo, y ya no era solo él. Ahora llegaba una niña a compartir su amor.
Y los miraba con orgullo, por que a su corta edad, Sakumo conocía una historia detrás, que ya no pesaba, que ya no dolía. Y se admiraba rotundamente de ellos, como shinobis, como pareja, como padres. Como dos seres que dan vida.
Ninguna misión fue tan compleja como la que decidieron tomar juntos. Tener un hijo en esas circunstancias fue difícil, pero no imposible. Y lo lograron, por él, por ellos.
Ahora entendía que a pesar de todo, Sakura y Kakashi, mamá y papá, estaban ahí, sonriendo, juntos, superando obstáculos, creciendo juntos, aprendiendo uno del otro y sujetando su mano para darle la seguridad que tanto amaba sentir. Y aunque quizás muchas veces no entienda la vida, sabe que ellos van a estar allí, enseñándole a vivirla.
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Kakashi se colocó su capa blanca con la inscripción Rokudaime Hokage en la espalda, haciéndose paso hacia la ceremonia de su nombramiento, acompañado de su familia. Como siempre lo esperó, como siempre lo soñó. Por que desde que la conocía, la vida lo recompensaba como merecía.
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Hace dos días, se cumplieron tres años desde que publiqué el primer capítulo de esta historia. Volví a leerla, leí también cada uno de sus comentarios, y no puedo sentirme más agradecida de todo el amor que recibí. Por eso quise escribir este pequeño spin off desde la mirada de Sakumo. Son las 4 de la mañana así que quizás no sea tan profundo como el resto de la historia. Aún así, espero lo disfruten❤️
