Cap. 103

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-No, Nelly, no me digas eso -le digo a la chica en modo de súplica aunque, claro, ya está todo organizado y no puedo hacer nada.

-Sí, Carla, lo siento -me dijo la chica y mis labios formaron un puchero- No te quejes, al menos puedes ver la primera parte.

-En serio, no lo entiendo -dije sentándome en el suelo bufando- ¿por qué han puesto nuestro partido justo después del de Inazuma Japón contra Orfeo? Quería verlo entero.

-La segunda parte la podemos ver la caravana, ¿no, Nelly? -le preguntó Héctor y la gerente asintió agarrando su puente de la nariz.

-Además -dijo rodando los ojos- lo vas a ver de todos modos, no sé de qué te quejas.

-Pues que quería ir a verlo -dije bufando y Héctor ladeó la cabeza.

-Aún así no podrías, lo sabes, ¿no? -me pregunta y lo miro sin entender- hay que entrenar.

-Sí, mamá -dijo levantándome del suelo y limpiándome el chándal- vamos vamos.

-Y recordad, estamos empatados con Os Reis, -nos dijo Nelly una vez empezamos el entrenamiento especial- si ganamos, estaremos a la cabeza; si empatamos, nos quedaremos en el segundo puesto, al igual que si perdemos. El resto de equipos del grupo B ya han jugado y no nos alcanzan.

Los dos esentimos y, tras frenar la rueda miré a la chica.

-¿Y el grupo A? -le pregunto y mira hacia su tablet.

-Está Orfeo a la cabeza por encima de Inazuma Japón y en tercer puesto el Unicorn. Si la selección japonesa empata el partido, tendrían que ver cómo juega el Unicorn para poder ver si de quedan o no. En el caso de peder, sería el Unicorn el que pasaría de fase y si ganan, Inazuma Japón se pondría a la cabeza.

-Y si queremos encontrarnos en la cima -habló ahora Héctor- ellos deben ganar y nosotros también, o empatar y nosotros perder.

-Además de que, ellos, si pasamos de primeros y ellos de segundos, no nos enfrentaríamos en la final, sino antes -dije al darme cuenta.

-El caso -dijo Nelly al ver que nos íbamos por las nubes- es que tenéis que llegar a la final, ¿vale?

Los dos asentimos y continuamos lanzando aquellas ruedas infernales.

[Narrador omnisciente]

Los chicos que se encontraban reunidos en el albergue de la zona de Japón salieron dispuestos a entrenar para el tan ansiado partido que estaba a la vuelta de la esquina.

-¡Chicos, tenemos que estar concentrado! -dijo Mark con una sonrisa desde la portería una vez estuvo listo.

El equipo no tardó en dividirse en dos grupos para empezar un partido de entrenamiento.

Muchos de los chicos habían mejorado muchísimo desde la selección de jugadores: ahora Archer sabe jugar muy bien al fútbol, Hurley ya regatea como un profesional y Scotty ya no escapa del balón.

Darren consiguió parar el tiro de Kevin y sonrió para lanzarlo de nuevo hacia el medio del campo.

Jack le pasó el balón al estratega que lleva ya dos días sin sonreír ni un solo momento.

Los dos chicos con los que hacía el Pingüino Emperador N3, se colocaron a su lado listos para utilizar y entrenar aquella supertécnica.

Pero Jude no dejaba de pensar en aquellas palabras de Ray Dark, "Quiero venganza, quiero destruir la selección nacional"

-¡No se lo permitiré! -gritó el de la capa para correr solo con el balón y tirar a puerta.

Mark consiguió pararlo sin entender qué le pasaba ahora a su amigo.

El delantero de fuego <Axel Blaze>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora