El delantero de fuego <Axel Blaze>

Cap. 22

Los hermanos no paraban de atacar la portería de nuestro equipo, usando todo el rato el Tornado Inverso.

Lo que no sabían es que, aunque ellos escondían fuerza, nosotros también.

Mark usa la Mano Celestial para parar el primero, y deja bastante fuera de juego a los hermanos, ya que Mark no la había utilizado en el encuentro del otro día.

-No somos los únicos que escondimos fuerza -dice el de azul apretando los dientes.

Siguen jugando, y lo único que hacen es atacar, pero ahora Mark ya sabe cómo es su fuerza y sabe pararlos a la perfección.

Cuando intentan llegar a la portería, Jack los para y me interpongo entre ellos y la portería.

-¿Y qué se siente a ser la novia de Axel Blaze, eh? -me pregunta y abro los ojos. ¿La novia de Axel?

-¿Su novia? -pregunto y abro los ojos al darme cuenta.

Claro, si les hago pensar que sí, vendrán a por mí y dejarán un pasillo libre para marcar.

Me río y los miro.

-Es mejor que vosotros, sin duda. Axel es genial, y lo sabéis. ¿Os gusta la respuesta? -pregunto y me río para después mirar a Axel de reojo.

Éste me miraba intrigado, no sabe por qué lo digo.

Le hago señas de que luego se lo explico y asiente un poco perdido.

Y nadie en el campo, excepto Jude, sabe de qué hablo. Y es que este chico lo entiende todo siempre.

-Así que es cierto que sois pareja -dice el rojo y me quitan el balón, pasando por mi lado- ya sabemos su punto débil.

El partido sigue sin ningún cambio, ningún gol para ninguno hasta el final de la primera parte.

Una vez fuimos al banquillo, le dije a Jude que les explicase a los chicos de qué iba esto, pero a mí Axel me llevó aparte.

-¿Me lo explicas? -me preguntó acorralándome entre la parte de detrás del banquillo y su brazo que se encontraba apoyado a la izquierda de mi cabeza.

-Ellos buscan hacerte daño, -digo y asiente- si piensan que estamos juntos irán a por mí y te dejarán el campo despejado -sonrío.

-Pero eso conlleva hacerte daño -dice completamente serio y me encojo de hombros.

-¿Y? -le pregunto al chico sin entender el problema.

-Pues que a mí también -cierra los ojos y mete las manos en los bolsillos.

Obviamente me sonrojé ante sus palabras. ¿Lo dice en serio?

Aparto su brazo y caminó un poco lejos de él.

-Buscamos ganar. Lo vamos a hacer y ya. -le dije al chico dándole la espalda de brazos cruzados.

Los trillizos nos miraban, y al parecer Axel se dio cuenta por lo que hizo.

-No te asustes -me dijo el chico en susurro, me agarró la muñeca para girarme y unir nuestros labios.

Todos nos miraban incrédulos desde el banquillo, y se empezó a formar un revuelo entre ellos.

Voy a tener que dar un par de explicaciones después porque no se enterarán a la primera de que es para aparentar.

-Vale, lo haremos, pero no estoy de acuerdo -dice todavía muy cerca de mí y yo respondo con un leve asentimiento.

-Vale -le dije con una sonrisa y, pillándolo ahora a él desprevenido, planté un leve beso sobre sus labios para después correr hacia el campo.

Empieza la segunda parte, todo va como planeaba.