𝑯𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒆𝒍 𝑭𝒊𝒏 | ℭ𝔞𝔯𝔩 𝔊𝔯𝔦𝔪𝔢𝔰

Oscuro

Mientras los demás estaban ocupados, yo permanecía en silencio, observando.

—Hola, soy Carol —dijo Carol, sonriendo—. ¿Por qué no te unes a los demás?

Asentí ligeramente.

Carol se fue, y yo seguí sentada.

De repente, escuché pasos detrás de mí.

—Hola —dijo una voz.

Me di la vuelta y vi a Carl

—Hola —respondí, seria.

— eres muy valiente —dijo Carl.

—No lo sé —dije, encogiéndome de hombros.

Carl se sentó a mi lado.

—¿Cuántos años tienes? —preguntó.

— diecisiete  ¿Y tú? —respondí.

—Igual —dijo

Carl me contó cómo fue que limpiaron la prisión y yo solo asentía

—Hershel ya la curó —dijo Daryl, serio, y se marchó.

- debo irme — dije antes de levantarme

Rick le hizo preguntas y luego me vio a mí.

—¿Sabes cómo llegar? —preguntó el primer hombre que apareció

—Sí —dije.

—Bien, iremos —dijo

—¿Cuántos caminantes has matado? —preguntó.

—Demasiados. Ya perdí la cuenta

—¿Cuántas personas has matado?

Me quedé en silencio.

—Uno —dije, seria.

—¿Por qué? —preguntó Rick.

—Lo habían mordido.

Rick asintió.

Michonne quería irse, pero nadie le permitió levantarse.

—Nos tenemos que ir de este lugar —dijo Michonne.

—Son buenas personas —dije.

—Eso pensaste de ellos, ¿o niegas que ellos...? —comenzó.

—Callate, tú no sabes nada —dije, y me acosté, dándole la espalda.

Tal vez ella tenía razón y no debía confiar en ellos.

Nos levantamos, y Rick nos propuso un plan.

—Si queremos entrar en Woodbury, debe ser de noche, ya que las personas guardan cuarentena después del atardecer —dije.

—Nos iremos en una hora —dijo Daryl.

Se acercaron Carl y otra persona,

- Soy Óscar - se presentó

- Papá yo también quiero ir - dijo Carl

- No Carl es muy arriesgado

- no es que tengas muchas opciones hoy en día

Rick volteó a ver a Daryl y suspiro

- bien, vamos - dije

Nos dividimos en grupos

Rick y Michonne, Carl y yo en un auto, Oscar en otro auto y Daryl en su motocicleta, los guiamos hasta Woodbury.

Dejamos los autos en la carretera para no ser detectados.

Nos escondimos en unos arbustos.

—Siganme —dije.

Llegamos a la parte trasera de Woodbury.

—¿Cómo supiste de esto? —preguntó Michonne, seria.

Me encogí de hombros.

En las calles habían personas felices, como si no supieran la mierda que hay afuera.

Llegamos a unas habitaciones de lámina, había mucho frío y humedad, habían varias habitaciones y un corredor,
Escuchamos ruidos y vimos a Merle, Martinez y los amigos de Rick, Glenn y Maggie, agarrados de la mano, solo que ellos invadía con una bolsa en sus cabezas, los querían matar.

Daryl miró a Rick, y él asintió.

Rick lanzó una bomba de humo, y algunos hombres soltaron las armas.

Era nuestra oportunidad.

Daryl y Rick ayudaron a Glenn, que estaba muy golpeado.

Carl y yo ayudamos a Maggie, que parecía asustada.

Empezaron a dispararnos, pero Oscar y Michonne nos cubrieron.

Comencé a disparar con precisión mortal, mi dedo índice apretando el gatillo una y otra vez, asegurándome de que cada bala encontrara su blanco en la cabeza de mis enemigos, silenciando cualquier resistencia en un instante

Habíamos encontrado el lado oscuro de este maravilloso lugar.

Salimos de ese lugar y nos dirigimos a una casa vacía.

—¿Y la chica? —preguntó Maggie, refiriéndose a Michonne.

—Venía detrás de nosotros —dijo Rick, serio.

—Voy a buscarla —preguntó Oscar.

—No —dije, seria.

Glenn temblaba de frío.

—Toma —dije, dándole mi camisa a Maggie.

Ella dudó, pero la aceptó.

Se dio la vuelta y se puso mi playera azul.

Carl me miraba fijamente, y luego su mirada se dirigió a mis pechos.

Una corriente eléctrica subió por mi cuerpo.

—Mis ojos están arriba, imbécil —dije, seria.