Tu mirada en mi [Libro 1] ✔️

C A P I T U L O 16

Cerré mis ojos con fuerza.

El destino me odia.

No me había dado cuenta de que Jimin todavía tenía su mano en mi mejilla. Le sonreí de lado y él la quitó. Giré la cabeza lentamente para mirar a Tae y cruzamos miradas. Yo la aparté rápido volviendo a mirar a Jimin.

—¿Que hacen?— Preguntó Tae con su voz grave.

—Eeeemmm. Viendo 50 sombras.— Contestó Jimin sin dejar de mirarme con el ceño fruncido. Luego cambió la expresión y miró a Tae.— ¿Quieres verla con nosotros?— Dijo en un tono picarón.

—Si a T/N no le molesta.— Se encogió de hombros.

Abrí mi boca para decir algo pero mi celular comenzó a sonar. Me disculpé con los chicos y salí del cuarto de Jimin para contestar la llamada.

—Hola mamá.

—T/N, regrésate a Puerto Rico ahora.

—Fruncí el ceño.— ¿Que? ¿Por que?

—Solo regrésate.

—No hasta que me digas.— Dije bajando las escaleras.— ¿Que pasó?

—Se acerca Diciembre y en Corea va a nevar. No quiero que algo malo te pase así que regrésate ahora mismo.

—Mamá, faltan más de 3 meses para que llegue Diciembre.

—No me importa ¡Regrésate ahora mismo, T/N! Vamos. Olvídate de los chicos y ven con tu familia.

Y esa fue la gota que colmó el vaso.

De por si, mi cabeza explotaba por todo lo que traía. Las entrevistas, las reuniones con los bailarines, las reuniones con los chicos, las coreografías con los chicos. Tengo que ponerme al día porque estoy empezando desde 0 aquí en Corea y también está.....

Tae

Si, Tae.

Mi mamá es una excelente madre, pero es demasiado sobre protectora. Entiendo que tenga miedo a perderme por lo qué pasó con mi hermano. Pero me ha cerrado tantas puertas a cosas que he querido hacer y no he podido por ella. Sinceramente ya estoy cansada de eso.

Y me lo dijo en el peor momento porque no estoy de humor.

—¡Estas siendo demasiado injusta conmigo! ¿Cuando será el día en que podré hacer las cosas por mi misma? ¡Siempre que quiero hacer una cosa tú no me dejas porque "me puede pasar algo"!

—T/N tienes que entender que....

—¡No puedo entender nada! ¡NADA! Ya soy mayor de edad y puedo hacer lo que yo quiera corriendo el riesgo de que me pase o no algo.

—T/N, soy tú madre.

—Y yo tú hija. Tienes que dejarme volar sola ¡Sola! Y no me voy a mover de Corea.

—¡T/N, tienes que regresarte ahora mismo. ¡Joder hazme caso!

Esta vez ella hazlo la voz. Y yo no me quedé atrás. Si uno de los peores errores que uno puede cometer conmigo es gritarme cuando estoy molesta porque no les irá nada bien.

—¡Entiende tú que yo no me voy a mover de aquí! ¡Aquí están los chicos y....

—¡NO ME IMPORTAN ESOS CHICOS, ME IMPORTAS TÚ!

—¡PUES PARECIERA QUE SÓLO TE IMPORTA QUE ESTÉ AMARRADA A TI! POR QUE A DIFERENCIA TUYA, ELLOS SI ME SABEN ENTENDER, ME APOYAN Y ESTÁN AHÍ CUANDO MAS NECESITO A UNA PERSONA!