trece

5.3K 410 35
                                    

Caminaba por hacia la entrada con Santiago

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Caminaba por hacia la entrada con Santiago. Antonia había apresurado el paso apenas nos bajamos del auto. Así que estamos solo los dos, hasta que vimos a Lucrecia, quien nos sonrió y caminamos los tres juntos. Samuel pasa por nuestro lado en bicicleta sin siquiera mirarnos.

Pero entonces vemos cómo frena rápidamente frente a un rubio, que termina siendo Guzmán y se le acerca bruscamente. Alzo mis cejas al ver esa actitud de Samuel.

–Bicicleto. —Guzmán se burla.

–Escucha, deja en paz a mi familia.

–Un poco irónico viniendo de ti, ¿no? —Lucrecia iba a acercarse, pero Santiago la frena— ¿Te importa que tenga un problema con el asesino de mi hermana?

Samuel empuja a Guzmán antes de decir:

–Fue tu amigo Polo, gilipollas. —Me quedo helada al escucharle decirle, esa era nuestra teoría pero tampoco podríamos estar al cien por ciento seguros.

–¿Qué coño dices, desgraciado? —Guzmán agarra a Samuel del saco y lo acorrala contra la baranda del puente.

–Fue Polo. ¡Escúchame!

–¡Llevo un puto mal día de la polla, y voy a echarte por aquí!

–¡Escúchame! Quiso recuperar el reloj de Carla. Christian lo supo y lo iba a contar todo. ¿O crees que lo suyo fue un accidente?

Santiago corre hacia ellos cuando ve a Guzmán inclinar aún más a Samuel. Lucrecia mira a un profesor que iba pasando y lo detiene.

–Profesor, se están peleando.

Cuando estamos todos adentro. Azucena nos detiene en el pasillo antes de entrar al salón. Santiago de apoya en la pared a un lado de Lucrecia y yo me quedo de pie a un lado de él.

–Sois reincidentes, y esto no lo voy a volver a consentir.

–¡Yo no he hecho nada! Ha sido él. Ha venido él a por mi. —Guzmán reclama.

–¿Eso es verdad?

–Claro, Guzmán jamás hace nada. Es un puto santo. —Hablo yo sarcástica.

–Fue Guzmán quien atacó a Samuel. —Lucrecia habla mientras se cruza de brazos.

–Joder, ¿se habéis puesto de acuerdo?

–No te hagas... —Responde Lu— Últimamente no te reconozco. Estás muy violento. Deben ser las malas compañías.

–No te vas a ir de rositas. —Azucena le habla a Samuel— También voy a hablar con tu madre. Guzmán, estas expulsado. Dos días.

–Pero ¿Qué dices? ¡Si estamos de exámenes! ¿Cómo me vas a expulsar?

–Tres días. Acompáñame, por favor.

𝐓𝐎𝐆𝐄𝐓𝐇𝐄𝐑; ᴇ́ʟɪᴛᴇ ɪɪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora