CAPITULO 10

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SINGTO'S POV

—Eres tú... ¿Verdad? — sostengo su rostro entre mis manos, buscando algo en su mirada —Eres Krist.

Sus ojos grisáceos se mueven de un lado al otro como si tratara de entender lo que digo.

—¿Qué? ¿Krist?

—Si, Krist... ¿Lo eres verdad?

—¿De qué habla? — su rostro refleja miedo, toma mis muñecas tratando de alejar mis manos.

— Eres Krist... Lo eres, tu olor, tus ojos, has cambiado un poco pero eres él.

— Suélteme...— susurra aterrado, con sus ojos llorosos —No, no lo soy.

— Si, si lo eres —lo sacudo un poco.

Gran error, ya que eso lo asusta mucho y comienza a llorar.

«Suéltalo, no lo hagas llorar»

De mala gana quito mis manos de sus rostro pero no puedo alejarme así que tomo sus manos entre las mías.

—Perdón, perdón. No debí asustarte. Perdón.

—No me haga daño —solloza.

—No,claro que no. Yo solo pensé que eras alguien... —me mira — Lo siento.

—Piensas que soy ese chico.

—Si, te pareces mucho... Yo me alteré, es solo —suspiro —. Que lo he buscado y no logro encontrarlo y eso me está consumiendo.

No sé como me derrumbé en sus rodillas a llorar como un chiquillo, es demasiado, en mi interior siento que Kut es Krist. Mi pequeño, la persona que llevo años buscando.

Hasta sus tacto es igual. Me quedo quieto mientras él acaricia mi cabeza dándome tranquilidad, ese sentimiento de paz que hace mucho tiempo no lo tengo.

Nos quedamos así, hasta que logro controlar mis emociones y sentimientos. Levantando mi rostro para encontrarme con su dulce mirada, es igual a la que me daba cuando trataba de consolarme en la niñez.

Recuerdo que me sentía triste al no ser capaz de pasar algún entrenamiento que me ponía mi padre y la frustración me bloqueo. Además de la presión de ser el siguiente al mando pero Krist siempre venía con su dulce mirada y sonrisa para alegrarme. Su presencia era lo único que necesitaba.

Descubrí que él era mi mate apenas nació, su olor fue todo lo que necesité para saber que él era mi destino. Mis padres me apoyaron los padres de Krist también, iba ser una gran unión. Ald Perawat era la mano derecha de mi padre y mi tío de cariño. Todo marcharía bien y cuando Krist cumpliera 18 años nos casariamos.

Todo estaba marchando más que bien, Krist y yo éramos inseparables, yo lo llevaba a todos lados, aún siendo muy jóvenes compartimos  nuestro primer beso, nada malo o más allá, solo un pequeño roce.

Él era un ser de luz e inocencia sin duda sería el mejor compañero de vida, pero nada es como se espera. Todo pasó tan rápido. Yo solo quería salvarlo, nunca fue mi intención perderlo, nunca.

Aún así Emma la madre de Krist, me culpó de la desaparición de su hijo y no sólo ella muchas personas comenzaron con rumores y decir “si no puede cuidar a su mate ¿cómo nos va proteger?” “¿ cómo pudo hacerle eso a su pareja” “no tiene corazón” y muchas cosas que me lastimaron pero sabía que tenían razón, yo no había podido proteger a mi pareja, ¿Cómo iba a estar a cargo de una manada completa?

Estaba solo, mis padres trataron de razonar con los padres de Krist. Ald sabía que no fue mi culpa así que trato de animarme diciendo “Si mi hijo estuviera aquí, Etiz estaría  muerta. Hiciste lo correcto, no te atormentes vamos a encontrarlo” Eso me alegró un poco. Aún así Emma se alejó un poco sin antes agradecer lo hecho por Etiz.

Mis padres y mi tío me ayudaron a salir adelante. Ald me entrenó de sol a sol, debía preparame para mi revelación aunque no era una sorpresa para nadie que sería un alfa, lo que nadie esperaba era que yo no seria un alfa común.

🍁

— ¿Así que no recuerda nada?

—No estoy seguro Tay.

— Entonces ¿cómo estás seguro de que es Krist? —interrumpe mi otro amigo.

—Porque lo siento Off. Él es Krist, mi Krist.

— Singto...puede que exista una pequeña posibilidad de que no lo sea. No te ilusiones tanto.

—Es tarde Tay, no lo ves. Ese chico lleva menos de 24 horas aquí y Singto ya se volvió un completo desastre.

—Lo sé Off pero...

—Escuchen Tay, Off — los miro —Deben verlo y me dirán.

—Piensas prensantarlo como Krist, así como así. ¿Estas loco? Dile Off que esta loco.

—No, Tay. Solo voy a dejar que lo veamos nosotros para saber si es Krist o no.

—Tay tiene razón, Singto. No puedes aparecer un día con un chico  cualquiera y decir que es Krist.

—Es que entiendan todo tiene sentido, estuvo encerrado o prisionero en algún lugar es por eso que llevaba esas cadenas y por eso mismo mis hombres no lo podían encontrar. Hasta su olor es igual, sus ojos, todo. Tienen que verlo.

— Singto si es como dices, hay algo más que desconocemos. No te encadenan porque si, ese chico pudo hacer algo para terminar así. Off y yo hemos ido a esas misiones y déjame decirte que esas cadenas no se las ponen de gratis.

Me quedo mirando el rostro de Tay, se que tiene razón pero me niego a creer que Kri... Kut, sea alguien peligroso.

—Además queda la familia de Krist, Singto. Emma no estará nada feliz de que su hijo halla estado en esas condiciones o que ese chico resulte no ser su hijo. Solo lastimaras a esa familia sin contar a ese chico que puede hacerse la idea de ser parte de aquí.

—Lo es Off pero es Krist. Mañana los espero en mi oficina para que todos lo puedan ver — respiro profundo —Por ahora lo vamos a mantener entre nosotros hasta estar completamente seguros que Kut no es Krist.

Si más salí del comedor llegando a pasos apresurados a la habitación donde se encuentra Kri... Kut.

Solo necesito miralo un rato más para saber que todo estará bien. Mañana ellos me darán la razón de que ese lindo joven es mi Krist, la persona que tanto espere.

🌸

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