Amaba las noches lluviosas, ¡pero no las tormentas!, lo único que podía escuchar era el sonido de los relámpagos y truenos, los cuales eran incluso más ruidosos que el sonido de las gotas de agua caer. Observó de nuevo hacia donde se encontraba el reloj, las tres de la mañana, quería dormir. Pero a causa de esos escandalosos truenos y su miedo a las tormentas no la dejaban.
Se aferró fuertemente a su cobijas, tapando su rostro con ellas, cuando un nuevo relámpago cayó haciéndola caer de la cama. Con algo de miedo se quitos las cobijas el cuerpo y rostro, un relámpago junto con un trueno más cayó iluminando completamente su habitación, rápidamente se puso de pie para así salir corriendo de su habitación, sin darle importancia al dolor que había en su trasero por la anterior caída.
Corrió hacia la habitación de su hermano, abrió la puerta el azabache con el ruido menos posible, ahí estaba el mayor durmiendo con tanta tranquilidad. Como si no le importara el hecho de que el cielo se estuviera cayendo en esos momentos. Lo envidiaba demasiado por eso.
Como pudo se acosto a un lado de él, se sintió un poco más tranquila, pero para su mala suerte un relámpago volvió a caer haciendo temblar las ventanas y provocando que (N) soltara un pequeño grito ahogado.
Bastó pocos segundos para que Suna sintiera como algo se aferraba fuertemente a él, abrió apenas un ojo para así toparse con el rostro de miedo de su hermana. Sabía perfectamente el por que estaba ahí, abrazo con cuidado el cuerpo de su hermanita teniendo cuidado de no aplastarla.
—Tranquila, pronto acabará.—habló en un susurro Suna.
—Suna, sabes que odio esto.—respondió ella aferrándose un poco más a él.—Es horrible.
Suna abrió los ojos por completo, la observó por un momento.
—Ya tranquila, no nos va a caer ningún relámpago en la cabeza.—habló Suna suspirando.—Al menos de que no te duermas, si no te duermes nos van a caer varios a la vez.
Agregó con burla, en respuesta a ello recibió un cara de enojo y miedo de parte de ella. (N) desde muy pequeña solía tenerle miedo a las tormentas, por ello cuando solían haber, solía ir a la habitación de sus padres o a la de Suna. En sí a Suna no le molestaba para nada, después de todo se trataba de su única y amada hermana menor, aun que solamente era menor por un año.
—¿Podías contarme un cuento? Como en los viejos tiempos.
—No crees que ya estás un poco grand..—no termino la oración a ver el rostro de enojo de parte de (N), suspiro levemente.—Esta bien, ¿qué quieres que te cuente?.
(N) sonrió con emoción.
—Uhm.. la cenicienta.—respondió ella, Suna sonrió con ternura.
Suna no le quedó de contra, comenzó a contarle aquel cuento a (N), a los minutos (N) se encontraba completamente dormida mientras lo abrazaba con fuerza. Suna sonrió con ternura, trato de acomodarla de tal manera de que durmiera cómoda. La acobijo bien para después dormir.
Debería comenzar a aprender más cuentos si esto seguía así.
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haikyuu ✧ one shots.
De Todo𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 » HAIKYUU!! ¡ disfruta una serie de one shots sobre los personajes favoritos de haikyuu ! @bokubea | 2O2O