La noche había caído, todos estaban durmiendo a excepción de un grupo, donde el miedo era consumido.
Habitación de Oscar y Martín
2:00 A.M.-¿Sigues despierto? -preguntó Oscar a Martín.
El último mencionado estaba en su cama mirando hacia la pared.
-No puedo dejar de pensar en qué tendremos que luchar a muerte con otro equipo -Martín se tapó más con la sábana, está era un poco delgada pero servía para el frío.
-Uff -suspiró Oscar- Ni que lo digas, yo... -dudó en sí seguir hablando- yo antes de qué llegará aquí no tenía una vida muy feliz ¿sabes? Constantemente me molestaban en mi universidad, me golpeaban, hasta estuve a punto de ser violado por un profesor -se río de si mismo- siempre sentí que en algún momento no lo iba a resistir, qué me iba a dar un golpe mal y podría haber quedado en el hospital, pero a pesar de eso, lo seguí aguantando porque quería sacar una profesión, darle orgullo a mis padres.
Martín se quedó sorprendido a lo que había escuchado, se sentó y lo miró, Oscar tenía ya lágrimas en los ojos.
-Es duro -negó- fue duro -se corrigió- ahora estando aquí me doy cuenta que preferiría haber aguantado cada uno de los golpes a terminar luchando por mi vida aquí -se limpió el rostro con sus manos.
-Me dejas sorprendido, es fuerte lo que me dices, porqué yo no tuve que pasar por esas horribles cosas, siempre viví alrededor de los lujos, quería algo, lo tenía, siempre escribía poemas de lo hermoso que era la vida -hizo una pausa- Cuando fui secuestrado esa idea se esfumó, pero ahora escuchando tú historia solamente me hace sentir cómo un estúpido por mi mentalidad de antes
-Algunos no tenemos la misma suerte que tú tuviste, viviste una vida llena de felicidad, en cambio, lo mío fue llena de miedo -dijo Oscar mientras lo veía.
-No -dijo Martín mientras apretaba sus manos- yo no viví una vida llena de alegría, fue llena de mentiras y cinismo, no supe lo que era la vida real, la verdad de la vida, no digo que uno tenga que sufrir constantemente, pero uno debe sufrir, tener miedo, así se construye la vida
-No lo sé, pero créeme que por lo menos estar aquí fue un descanso de los golpes, conocí a personas nuevas, no digo que me guste estar aquí, pero realmente esto me sirvió también para pensar en que uno es desagradecido con lo que tiene -miró hacia el suelo- nuca visité a mi mamá cuando tenía el tiempo, ahora me arrepiento de eso y capaz en unos días ya no la vea nunca más y no dejó de pensar en qué nunca le pude decir que la amaba qué-
-Basta -lo interrumpió Martín- Si lo harás, saldrás de aquí y le dirás todo lo que la quieres, pasaras más tiempo con ella -dijo firme.
-Per-
-No, tú dijiste que no todos teníamos la misma suerte que yo, pero si tuvimos el mismo final, nos encerraron aquí, siendo yo rico y tú un joven que sufría de bullying, eso quiere decir que somos iguales, pero tú, eres más valiente que yo -se acercó- por eso, tú lograrás juntarte con tú familia nuevamente -le sonrió- si nunca tuviste un amigo, pues aquí tendrás a él primero -le extendió los brazos.
Oscar inmediatamente lo abrazó, nunca había sentido la calidez de un abrazo de amigos, siempre recibía golpes, por lo cuál un abrazo era completamente nuevo para él y por primera vez sintió que podía confiar en alguien.
Al otro día era todo normal, les llevaron el desayuno como era de costumbre, Martín hacía que Oscar no pensara en lo que iba a suceder y que se quedara tranquilo.
Pero en el interior de Martín él estaba igual o hasta peor que Oscar, se tendría que enfrentar a su mejor amiga, él no podría matarla y capaz eso haría que sus compañeros tomen la ventaja y lo maten. Aunque no era él único en pensar así...
Habitación de Issabel, Cristóbal y Denisse
9:30 A.M.-En serio sigo lamentando el hecho de que por mi culpa tengamos que pasar a la batalla final -dijo Issabel enojada consigo misma, estaba decepcionada de su rendimiento en el duelo de hace unos días.
-No pienses en eso Isa -miró Cristóbal a Issabel- No fue tú culpa, debes pensar que gracias a tu esfuerzo saliste viva por lo menos de ahí -la consoló mientras me sobaba la espalda.
-Pues yo no pienso igual -se levantó furiosa denisse de su cama, mientras apretaba sus manos en puños- Me tuve que aguantar esto por tres días pero ya no más -suspiró, pero aún así se sentía enojada- ¿Sabes que ahora tendré que enfrentarme ante mi mejor amigo? Mi amigo de la infancia, él que siempre me consoló cuando estaba mal -las lágrimas salían rápidamente de sus ojos- ¿Que tan difícil era mirar hacia arriba y encontrar la jodida llave? -Se acercó donde Issabel- te diré una cosa, si llega a morir mi amigo, entonces tú le seguirás detrás.
La mirada que le daba Denisse a Issabel era firme, sabía está última qué denisse no estaba mintiendo.
-Denisse basta -se interpuso Cristóbal mientras la alejaba- Se que debes sentirt-
-¡No! -le interrumpió- ¡Tú no sabes nada! así que no digas que en realidad te sientes mal por lo que siento, que debes entenderme, cuando en realidad ni siquiera me conoces -lo empujó e iba a decir algo más pero simplemente negó y se fue a tirar a su cama.
Todo quedó un silencio incómodo, donde sólo se escuchaba los sollozos de denisse por lo bajo.
Cristóbal miró a Issabel y está se levantó mientras que con un asentimiento le dijo a este que estaba bien. Se acercó lentamente donde Denisse y se sentó en un pequeño espacio que había en su cama, denisse estaba viendo hacia la pared, pero sintió perfectamente cuando se hundió la cama de un lado.
-Yo en serio lamento todo, se que no empezamos muy bien, pero quiero que salgamos con vida de esto y probablemente en cualquier momento nosotros o tu amigo vamos a morir -se pasó una mano a la cara un poco ya frustrada por todo- ¿Crees que no me gustaría que todos saliéramos con vida?
Denisse seguía de espalda, issabel se iba a ir al no recibir respuesta pero paro al escucharla hablar.
-Se que no es tú culpa, capaz si yo hubiera estado en ese duelo hubiera muerto ahogada, pero -se sentó en su cama y la miró con los ojos llorosos- quiero pensar que todo esto va a terminar, que cuando duerma y abra los ojos todo esto haya sido una mala pesadilla, pero cada vez que me despierto, veo estas cuatro paredes y se qué no fue un sueño, es la realidad, pero no lo acepto, no lo quiero hacer -se abrazo fuertemente las piernas y siguió llorando- Y-Yo en ve-verdad lamen-to lo que te di-dije -su voz a penas podía entenderse, su llanto cada vez se hacía más doloroso.
Issabel y Cristóbal se acercaron y la abrazaron, mientras está seguía llorando, no era la única que pensaba igual, todos querían lo mismo, no había noche en que no suplicaran por salir de ahí.
Pero el momento delicado se vio interrumpido por Cristóbal.
-Lamento decir esto de improviso, pero debemos prepararnos, capaz mañana sea la competencia y hay que dar lo mejor de nosotros -se separó un poco de ellas.
-¿No habrá una manera de que nadie muera mañana? -preguntó denisse con los ojos llorosos aún.
-No lo sé, pero lo dudo, ese hombre solamente refleja su diversión por la agresión, ya murió carola y mañana alguien más será -dijo Issabel mientras apretaba sus labios con fuerza.
-Pero esos no seremos nosotros -dijo Cristóbal con firmeza en sus palabras.
El mañana era un misterio para todos, pero de algo estaban seguro, mañana alguien se iba a manchar las manos con sangre...
33,68 centímetros cúbicos
ESTÁS LEYENDO
No Turn Back
Mystery / Thriller12 personas, 6 hombres y 6 mujeres, son personas comunes, con una vida simple. Pero, ellos no saben de el riesgo que van a correr, por primera vez tendrán que temerle a la lluvia. Un Sólo personaje qué está detrás de todo esto... Desde ahora, comie...