Todo se sumió en silencio cuando la señora a la que llamaban Nanna se fue. Me guió hasta la habitación en la que me habían dejado al principio y salió por la puerta en silencio. Aproveché la situación para concentrarme en lo que debía hacer a partir de ahora...
Me quedé de pie en medio de la sala contemplando la gran cama que había ante mí justo delante de la puerta de entrada. Sabía que tarde o temprano ese Masayoshi llegaría no con muy buenas intenciones y como si mis pensamientos le llamaran, oí como el mecanismo de la puerta era forzado para abrir...
No me moví de donde estaba, ni siquiera giré el rostro para mirar quien era, porque no necesitaba saberlo. El olor característico a alcohol me llegaba a la nariz provocando nauseas, y su respirar pesado debido a la embriaguez le delataba...
MASAYOSHI: Veo que estabas esperando por mi como te ordené... Me gusta que cumplan mis órdenes, por eso yo soy el líder... Sabes?, eres una joven muy afortunada, ahora que estas aquí, yo cuidaré de ti... (Soltó de manera empalagosa)
Se acercó lentamente hacia mi hasta quedar en mi espalda. Pude notar como tomaba mi cabello y se lo llevaba a la nariz, aspirando el aroma dulce que segregaba debido a los aceites aromáticos...
MASAYOSHI: Nanna ha hecho un buen trabajo contigo... No se esmeraba tanto cuando se trataba de su hija...
Soltó como un susurro. En ese momento caí en la cuenta de que Nanna no estaba aquí por voluntad propia, seguramente el malnacido tendría a su hija cautiva...
Seguí en silencio, no quería oír más de la boca de este hombre. Noté como una de sus manos se afianzaba en mi cadera mientras con su mano rodaba mi cabello a un lado y apoyaba su mentón en mi hombro, cerca de mi cuello... Sentir su respiración tan cerca era repulsivo, mi estómago daba vueltas y mis puños se apretaban inconscientemente por la rabia que crecía en mí...
MASAYOSHI: Eres muy callada cerezo... Dime es cierto que eres pura?, si es así no te preocupes... Seré benevolente contigo, te prometo que solo sentirás un gran placer... Tanto que después no querrás que me aleje de ti... (Susurró en mi oído)
En ese momento sin preverlo me empujo en la cama y cayó sobre mí afianzando ahora su agarre en mis muñecas las cuales permanecían por encima de mi cabeza. Me tenía inmovilizada o eso creía el... Le miré a los ojos con desafío y cuando noté que acercaba su rostro al mío. Rápidamente aparte la cara hacia un lado, evitando que pudiera llegar a mis labios. Sentí su macabra risa y como se acercaba a mi cuello ya desprotegido lanzando besos y lamidas de manera frenética.
Mi cuerpo temblaba de la repulsión tan grande... No podía dejar que hiciera conmigo lo que quisiera. En ese momento comencé a sentir el Chakra de Itachi cerca y sentí alivio de poder salir de aquí.
Me moví debajo, él al notar mi forcejeo dejo de atacar mi cuello y me miró a los ojos. Estoy segura de que pudo notar el cambio en mi mirada, en la cual se reflejaba todo el odio que sentía por él y las ansias de matarle... Siguió absorto en mí, hasta que sentí más cerca el chakra de Itachi, deduciendo así que era el momento. Una sonrisa igual de tétrica que la suya cruzo por mis labios mientras le aguantaba la mirada, y su rostro se descomponía con asombro... Hice uso de mi fuerza sobrehumana para girar encima de la cama y caer encima de él, que aún sostenía mis muñecas en alto. Sentada sobre su regazo me acerqué lentamente a su cuello y muy cerca de su oreja susurré...
SAKURA: Vas a morir por todo lo que has hecho... Todos vais a morir...
Note como apretaba su agarre sobre mí, intentando que continuara presa. Pero comencé a hacer fuerza con mis piernas hacia dentro, las cuales estaban rodeando su cintura. Continué apretando poco a poco hasta que notaba sus huesos. Su cara se iba descomponiendo según iba notando el dolor. No podía apartar la sonrisa de mi rostro al verle sufrir, me hacía sentir poderosa tenerlo bajo mi sometido. EL GRAN REY!! . Era una batalla de miradas intentando aguantar en la misma posición, el seguía apretando mis muñecas creyendo que me provocaba dolor, lo cual era cierto pero era tanta la adrenalina que sentía que ni lo notaba, aun teniendo las magulladuras que habían dejado las cuerdas.
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El dolor de un secreto
RomanceSakura guarda un gran secreto debido a una situación, que sin ser buscada se le presentó antes del inicio de la Guerra. Una decisión de la que no había vuelta atrás y que para ella significaría un gran cambio en su vida... Esta historia está contada...