El dolor de un secreto

25-CAPITULO: LA MISIÓN

No supe en que momento había caído en los brazos de Morfeo. Sentí una leve caricia en uno de mis brazos mientras abría mis ojos poco a poco.  Sentía mis ojos arder, como si hubieran seguido soltando lagrimas mientras dormía...Parpadee un par de veces y me di cuenta de que aún era de noche... En ese momento caí en que hoy era el día en el que llevaríamos a cabo el rescate de esas mujeres y habíamos quedado en reunirnos de madrugada para explicar las pautas del plan... 

Me incorporé poco a poco hasta quedarme sentada y pude ver a Itachi, que se mantenía erguido a mi lado sin apartar su mirada de mi. Debía de tener un aspecto horrible, pero era algo que no me importaba.

ITACHI: Debes arreglarte... Ya todos están aquí.

Podía ver algo de preocupación en su mirada, aunque su rostro como siempre no reflejaba nada. Sabía  que no solo yo le había tomado aprecio a el, sino que era algo reciproco, aunque él no lo demostrara.Nos habíamos complementado muy bien el uno con el otro como compañeros y sentía que él se había convertido para mi en un pilar imprescindible, habíamos pasado por tanto juntos.... Y eso me reconfortaba  y me daba fuerzas de seguir a pesar de toda la tristeza con la que cargaba ahora mismo. De manera silenciosa tome su mano, mientras le miraba a los ojos y de nuevo sentía que en los míos se acumulaban las lagrimas...

SAKURA: Gracias Itachi.... Me preparare ahora mismo (dije casi en un susurro)

En silencio me levante y le di la espalda dispuesta a prepararme , mientras notaba como su mirada seguía puesta en mi espalda, como si estuviera procesando lo que le había dicho.Le sentí suspirar y oí como salia de la habitación y cerraba la puerta tras él...  Comencé a vestirme con un kimono que había preparado para la ocasión. Era negro y blanco, sencillo, como el que podría llevar una campesina . Mi pelo estaba suelto y me adecenté un poco el rostro, el cual seguía rojo de tantas lagrimas.  Me puse mis botas ninjas altas hasta debajo de mis rodillas y debajo del kimono llevaba mi muslera, donde levaba algunos kunais y mis guantes atados. 

Salí de mi habitación en silencio y camine por los pasillos hasta el salón. Mientras pensaba en lo que haría cuando viera a Kaito, no sabía como debía actuar. Lo que había hecho era una total falta de respeto, el dejarle allí solo, sin ninguna explicación a mi comportamiento. Me sentía miserable, pero no era momento de pensar eso, sino de armarme de valor para la misión...

Entre al salón y encontré  todos sentados cerca de la mesa alumbrados por la luz de las velas, excluyendo a mi abuela y Natsumi a las cuales no pensábamos involucrar en esta operación. De hecho me negaba a que mi abuelo fuera con los demás, aunque sabía que podía defenderse, no quería que le ocurriera nada pero bueno, tampoco podía impedírselo. Algunos de los lideres estaban hablando entre sí hasta que notaron mi presencia, como si mi aura oscura los envolviera a todos y provocará tensión en el lugar. Me miraban en silencio y yo a ellos, aunque mi contacto visual saltaba de uno a otro, en  cuanto llegue a Kaito, el no me miraba, mantenía su rostro hacia el suelo, lo que provoco una punzada en mi pecho, recordándome lo despreciable que era...

Recobre la compostura y soltando un leve suspiro comencé a hablar...

SAKURA: Hola a todos, gracias por venir.... Os daré los detalles del plan a seguir para esta misión. 

Me sentía nerviosa, no podía cometer ningún error y no podía permitir que me vieran dudar ni débil.... En ese momento sentí el peso de una mano en mi hombro y cuando alcé la vista, pude ver a Itachi que me miraba tranquilo, dándome a entender que estaba conmigo y proporcionándome el valor que me faltaba. Con este empujón tome una bocanada de aire tomando el valor para empezar a hablar ante todos

SAKURA: Bien... Escuchad todos con atención. No debe haber errores en esta operación, no podemos permitírnoslo ya que hay muchas vidas en juego.(Me quede en silencio mientras me percataba de que todos estaban atentos y comencé a hablar...). Cuando salga el sol, Kazumo me llevará con su contacto a su punto de reunión, avisándole de que tiene una mujer para entregarles. Iré atada y con los ojos cubiertos para mantener la coartada. En todo momento Itachi nos seguirá con sigilo desde la distancia, para  poder reconocer al contacto. Una vez que eso ocurra, será  él el que me lleve a su guarida y dejaremos a Kazumo atrás ya que así actúan normalmente. Itachi le llevará hasta un equipo , que conformareis algunos de vosotros para retener a Kazumo aquí, hasta que termine todo. Itachi y yo hemos ideado una forma de seguimiento para que podáis saber donde me lleva el sujeto en todo momento. En cuanto lleguemos a la guarida e Itachi de la orden os aproximareis al lugar hasta que yo os de una señal. Itachi sabe cual será la señal, por lo que en cuanto os de aviso seguiréis sus instrucciones para actuar...