★★ [ Capítulo 25 ] ★★

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Aclarando dudas
Parte 1



Entendía todo por lo que estaba pasando Eiji o eso es lo que trataba de aparentar, quería estar bien con él pero si el chico no lo permite él no puede obligarlo.

¿Qué debería hacer? Una y otra vez esa pregunta llegaba a su cabeza, Kirishima no lo quería a su lado ahora que están por tener un pequeño juntos o es que sólo esta confundido.

Además de que enterarse que el padre de Eijirō esta vivo no fue fácil de asimilar. Suspiro cansado, se dejo caer en la cama mientras su madre llegaba con una maleta.

— ¿Estás seguro? — pregunto ella.

— No, pero si él lo quiere me alejare por unos días, sólo hasta que él aclare sus pensamientos y sentimientos, se que debería quedarme a su lado pero no quiero molestarlo más de lo que ya lo hago — sonrio — ustedes lo cuidaran por mi — su madre asintió.

— Te haré la maleta, además recuerda aun no sabes lo que él quiere, sólo debemos esperar y averiguarlo — Mitsuki acomodaba la ropa de su hijo.

— Lo se... Pero no saber que quiere me tiene tan confundido — rodo en la cama hasta quedar boca abajo — si él quiere que ya no lo moleste no lo haré — se puso de pie y tomo la maleta que su madre le daba.

Ella suspiro y acaricio su cabello para después dejarle un golpe en su cabeza.

— Pequeño idiota — bufo ella sin dejar de sonreír.

— Vieja loca — dijo él mientras la abrazaba.

— Pequeña mierdita — contuvo la risa.

— Vieja bruja — ambos se separaron.

— Mejor dejemoslo allí o te golpeare — amenazo la mujer.

Unas horas después Eiji volvió de su paseo aclarador de malos pensamientos. Miro a Katsuki sentado en el sillón con libro en mano muy concentrado. Se acerco a él y se sento frente a él.

— Katsuki — llamo Eiji, cuando obtuvo su atención continuo hablando — lamento lo que dije es sólo que son tantas cosas que no puedo asimilarlo aun... — cubrió su rostro con sus manos — no se que hacer, todo esta pasando tan rápido que estoy cansado, confundido y enfadado... Sólo quiero estar entre tus brazos pero siento que puedo enfadarte con mis cosas, que te alejes por ser tan molesto y empalagoso contigo — mordió su labio contenido los sollozos que querían escapar.

Bakugō dejo el libro de lado, camino hasta él y tomo las manos que cubrían su rostro, hizo que lo viera a los ojos y procedió a besarlo tan calladamente que era casi imposible que se tratara del mismo rubio gruñón que todos conocían.

— Nunca seras alguna molestia para mi, te quiero, tendremos un bebe y en algún momento nos casaremos y si no quieres pues tendrá que ser por las malas porque deshacerte de mi no es tan fácil — dijo cuando corto él beso.

Ambos se abrazaron y quedaron en esa posición por varios minutos. Ambos jóvenes eran observados por una rubia que estaba al borde de las lágrimas mientras era calmada por su esposo.

— Vamos a dormir mañana hablamos sobre todo esto — el rubio se puso de pie y ayudo a su pareja a hacer lo mismo.

Llegaron a la habitación y se prepararon para dormir consiguiéndolo rápidamente. Ya después aclararían todo.




Continuara




Cortito porque si...

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