★★ [ Capítulo 21 ] ★★

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Consecuencias de una buena experiencia 2

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Consecuencias de una buena experiencia 2





Cuidar a una persona enferma no es nada fácil, pero no estaba solo ya que Katsuki estaba a su lado. La mujer fue consultada por un médico amigo de los padres del rubio.

Kirishima no sabía como agradecerles. Mitsuki se ofreció a cuidar a la Sra. Kirishima para que así Eijirō no faltara más a la escuela, claro esta que no aviso lo que haría, pero luego le notificaría.

Se dirigió a la escuela después de despedirse de su sra. Madre y de Mitsuki. Camino tranquilamente de todos modos llevaba tiempo de sobra. Al llegar se encontro con sus amigos platicando de algo que no alcanzaba a escuchar y a lo lejos ve como su novio golpeaba a alguien de otra clase, días normales como esos eran pocos.

Al llegar a donde estaban los chicos, escucho cuando Denki hablo.

— ¿Ya le entregaste tu tesorito a Mido...? — no acabo la pregunta para cuando ya estaba en el suelo desmayado.

— Eso te pasa por idiota — dijo sonrojado y se fue.

Eijirō miro a su amigo bicolor irse casi hechando humo, suspiro y tomo de las piernas a Denki lo llevo arrastrando. Pero en el camino se encontro con Sero Hanta, el pretendiente de su amigo y ayudo cargándolo.

— ¿Quién le hizo esto a mi esposo, madre de mis diez hijos? — preguntó preocupado.

— ¿Esposo?, ¿Madre? — preguntó Eiji confundido.

— Shh, calla no lo alertes o va a huir — dijo Sero.

— Esta bien — susurro aceptando.

Hanta llevo a Kaminari a la enfermería mientras Eiji se dirigió al salón de clases, estas fueron tranquilas hasta que llego la hora del almuerzo.

Estaban de lo más tranquilo cuando Eijirō termino en el piso sin conocimiento. Katsuki lo llevo a la enfermería de inmediato, la enfermera le pidió que lo dejara descansar.

Bakugō no quiso decirle que podía significar, sólo aviso a sus profesores de las siguientes clases y se quedo a su cuidado. Cuando Eiji desperto, Katsuki estaba a su lado leyendo y le puso su atención cuando se dio cuenta.

— Me preocupaste — dijo el rubio acariciando su cabello — ¿Cómo te sientes? — pregunto sin dejar de acariciarlo.

— Mareado y con sueño — suspiro — Katsuki, ¿Tú crees que yo...? — Eiji mordió su labio nervioso y con sus ojitos llorosos lo miro — aun no quisiera, pero... — guardo silencio.

— Mira Eiji... yo estare a tu lado sea lo que sea, pero para estar seguros debemos realizarte un análisis de sangre... — dijo tranquilo.

— Kat... tengo miedo, ¿Y si mamá me odia? — empezo a sollozar, Bakugō limpio sus ojos con sus dedos.

— No te odiara, por lo poco que eh visto ella te ama, estoy seguro que se sorprenderá pero será feliz, más ahora que esta por recuperarse... — pego su frente con la de su novio.

— Gracias, siempre sabes que decir cuando me dan ataques de inseguridad — repiro profundo para tranquilizarse.

Los minutos pasaron y la enfermera los dejo marchar, pero en vez de ir a casa ambos fueron a una clínica general para que a Eiji le realizaran el examen pertinente. Esperaron algunas horas ya que había muchas personas atendiéndose pero cuando estuvieron sus resultados le fueron entregados.

Una mujer llego hasta donde estaban ellos y los hizo pasar con el doctor, entraron y le entregaron el sobre al hombre. El sujeto lo abrio y leyó el contenido, miro a ambos chicos y sonrio.

— Felicidades — dijo el médico.

Eijirō empezo a llorar, no sabía si era de felicidad o de tristeza. Pero ya lo hecho, hecho estaba y no había marcha atrás.

— Todo estará bien — ánimo Katsuki tomando su mano y acariciándola.

— Pero... — seguía llorando — ¿Qué haré con un bebé a esta edad? — cubrió su rostro sin dejar de llorar.

El doctor los observo, suspiro, le entrego unas cosas al rubio y se despidió de ellos, los chicos salieron del hospital y empezaron a caminar hasta la casa de Bakugō, ya que la sra. Mitsuki decidió llevarse a la sra. Kirishima a su hogar para no batallar tanto en cuidarla.

Cuando llegaron saludaron como si no pasara nada, Eiji fue al cuarto de Katsuki y se dejo caer en la cama, empezo a llorar de nuevo, Bakugō acaricio su espalda para reconfortarlo.

— Eiji... — llamo.

— Dejame solo — pidió Kiri sin verlo.

— Pero... — trato de tocarlo de nuevo.

— Por favor, dejame solo... — se removió, cubrió su cabeza.

Katsuki suspiro y salió de su habitación, bajo a la cocina donde estaban sus padres y les conto todo.

Después de varios golpes, una reprimenda por irresponsable lo felicitaron, pero debían tratar con delicadeza el tema o saldría contraproducente.

En la habitación Eijirō estaba confundido, no sabía que haría ahora después de tremenda noticia. Suspiro y trato de pensar con claridad.

Debía tomar la decisión de si tenerlo o no, llevó su mano al vientre plano y lo acaricio, con su mano libre cubrió sus ojos y empezo a llorar de nuevo.

Lo quería, lo quería, lo quería, es de él y de Katsuki, lo tendría ya que es un pedasito de su amor...






Continuara





¿¿¿
🍃¿El padre de Eijirō aparecerá?
🍂Katsuki que opina sobre lo del bebé
🍃Llegará alguien a tratar de separarlos
🍂Quién es esa que dice conocer al rubio
🍃Todoroki entregara su tesorito
🍂Midorilla morirá a manos de Enji
🍃Sero tendra sus diez hijos
🍂Kaminari sobrevivirá al ataque se Shoto...
???

Superando el DolorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora