Charles se guardó el enojo, bien metido en ese barril sin fondo en un rincón oscuro de su mente. Escuchaba con paciencia las quejas de Stark, admiraba la fuerza que tenía para plantarse frente a su Alfa y gritarle lo que se merecía.
—Mañana voy a salir a comprar algunas cosas que necesito para mis clases—. Dijo en volumen bajo, como siempre que le hablaba a Erik.
—Mañana no, no puedo acompañarte y está mal que un Omega salga solo. Vamos pasado mañana o puedes pedirle las cosas a Alex. ¿Sabes Charles? Estuve hablando con Steven y ahora me doy cuenta del maravilloso Omega que eres, tú no desobedeces. Y también está David que seguramente será tan buen Omega como tú. Sabe obedecer, no está interesado en salir a fiestas. Es un chico excelente.
Charles sólo Asintió, sonriendo apenas ante lo que Erik pensaba eran halagos. Esa noche le dio a Alex una lista, dinero suficiente y la indicación de comprar pintura en aerosol, brochas y pegamento en diferentes tiendas para no levantar sospechas. Su hijo no hizo preguntas, estaba al tanto de lo que su padre planeaba y lo apoyaba.
Después fue a ayudar a David a salir. Le permitió estar fuera toda la noche.
—ME IMPORTA UN CARAJO SI SON OMEGAS O ALFAS. TODOS SON MIS HIJOS. —. La voz de Anthony hizo eco en la casa.
El golpe que Steve le propinó también.
Tobey salió de la habitación en la que se habían refugiado los mayores -los que seguían despiertos a media noche escuchando los gritos de sus padres- dispuesto a detener otra pelea.
—Es mi culpa—. La voz de Harley chocó con el cristal de la ventana y escapó por una rendija en el alfeisar.
—No lo es. Es culpa de papá Steve—. Andrew dejó escapar por la nariz el humo del cigarrillo—. Es un idiota. Ambos lo son—. No explicó a qué se refería.
En una esquina de la habitación, oculto bajo una pila de ropa sucia estaban las latas de pintura en aerosol que los tres hermanos habían salido a conseguir esa tarde.
A las voces furiosas al otro lado de la puerta ahora se sumaba la del hermano mayor. Sonaron pasos, un portazo y luego otro.
Tobey regresó y Harley se preguntó qué pasaría si su padre pudiera salir de ahí.—Perdoname Peter, tengo que morderte. Están empezando a preguntar—. Quentin estaba sentado en la orilla de la cama, dándole la espalda al chico que empezaba a quedarse dormido.
—Entiendo—. Su voz se quebró —. ¿Jack lo sabe?
Beck guardó silencio. Sabía que no eran nada discretos, pero no esperaba que Peter lo supiera tan claramente.
—Se lo dije esta tarde—.De nueva cuenta el silencio—.Yo mismo le voy a explicar a Wade que no ha pasado nada más entre nosotros.
Peter le sonrió a la oscuridad, un par de lágrimas aún se escurrian por sus mejillas.
—Está bien, pero quiero pedirte una cosa más.
Quentin se giró a ver a su esposo a quien no sentía como tal. Por un momento temió que el chico le pidiera consumar ese matrimonio de mentira.
—Necesito pintura y pegamento. Y una coartada para desaparecer la noche del lunes.
Quentin no entendió su petición, pero asintió—. ¿Puedo saber que vas a hacer con eso?
—Vas a saberlo el martes.
—No me siento bien—. Dijo Peter durante la cena, dejando el tenedor junto a su plato.
Logan lo miró de reojo, buscando una razón para creer que estaba mintiendo, pero el chico estaba pálido, tenía grandes ojeras debajo de sus ojos.
—Pensaba... Pensaba que podría ir con mi padre unos días. Él sabe mucho sobre embarazos y va a ayudarme a sentirme mejor ¿puedo?
Logan no parecía muy conforme con la solicitud, pero después de pasar un buen rato dándole razones que involucraban únicamente el perfecto desarrollo del "bebé", el hombre terminó cediendo.
—Sabes lo que tienes que hacer para convencerme, Peter.
Peter sonrió como no lo hacía en varios meses y asintió. A pesar de lo que seguía lo iba a sufrir tanto como siempre, ahora realmente tenía esperanza de salir de toda esa mierda.
—¿Puedo ayudarlos de alguna forma?—. Preguntó Thor, llevando a Loki una taza llena de café.
El peli negro había pasado la tarde repasando el plan que había hecho entre todos los Omegas que quisieron participar, que para su orgullo habían sido la mayoría.
—Puedes llevarnos en el auto y esperar ahí por si tenemos que salir huyendo—. Dijo tomando la taza de café y dando un trago. El plan era cubrir cada quien un par de cuadras en diferentes puntos de la ciudad, él, junto a Parker y Lehnsher habían tomado uno de los puntos más céntricos de la ciudad y por lo tanto más peligrosos por el riesgo de ser descubiertos—. Y si algo sale mal busca a Matt Murdock.
Thor asintió. Hubiera deseado poder ayudar un poco más, pero entendía si Loki prefería que ese espacio, esa protesta fuera solamente de Omegas, aunque no podía evitar sentir que estaba siendo desplazado de una lucha contra un sistema que le había arrancado a su propia lucha.
Se dispuso a retirarse del estudio no muy seguro de cómo estaba sintiéndose.
—Ah, y Thor—. Dijo Loki cuando este ya estaba por salir—. Asegúrate de que nadie olvide el nombre de nuestro hijo—. Dijo Loki lanzandole una lata de pintura en spray.
Thor regresó a darle un beso en la mejilla a su poco cariñoso esposo, y para su sorpresa recibió de vuelta un beso en los labios.
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Omegas contra el mundo
ФанфикLas mujeres han dejado de existir, el género masculino humano ha mutado a crear Alfas y Omegas. Los Omegas viven bajo la opresión de los Alfas, pero cada día están menos dispuestos a seguirlo soportando.