VEMOS LA MISMA LUNA

Perfecta...

LIAM:

Un maldito ruido me saca de mis sueños, gruño y tomo toscamente el celular de mi mesa de noche, lo primero que veo es una notificación que no deja de sonar, la alarma. Apago el molesto ruido y veo a Cam sonriendo a mi cámara, con su uniforme de animadora, que gran manera de despertar. Es mi nuevo fondo de pantalla.

Me estiro y poso mis pies sobre la alfombra, son más de las 9 de la mañana, la verdad es algo temprano para mí, pero para ser honesto quería estar presente en algunas decoraciones finales en mi casa, papá llegará hoy a las ocho de la noche con mi hermano Steve, y hace muchos años no paso la nochebuena con ellos, normalmente la paso con mamá y mis hermanos menores, pero ahora están en NY con una amiga de mamá, no quise ir, uno porque estoy llevándome mejor con papá y otro porque quiero ver a Camila aunque sea un momento.

Voy al baño a lavarme los dientes y la cara, cuando termino me seco rápidamente y tomo mi celular para bajar a buscar algo de desayunar.

Llego a la cocina y veo a Elle cortando apio, tiene algunas verduras más en la encimera.

-Elle, buen día- Digo mientras me acerco a la nevera y saco el zumo de naranja, es mi favorito.

-Buenos días Liam- Pasa todas las verduras a la licuadora- En un momento preparo tu desayuno. ¿Fruta?

-Estaría bien, gracias- Observo como le coloca la tapa al electrodoméstico y pregunto- ¿Para qué es eso?

Elle me mira divertida y sonríe- Es para...

-Para mí- Me quedo atónito al oír la voz de mi hermano.

- ¿Qué? - No entiendo lo que acabo de oír, volteo rápidamente y veo a mi hermano sonriendo -Se supone que  llegarías a las ocho con papá.

Mi hermano menor suelta una carcajada y se acerca hacia mí, me rodea con los brazos y nos estrechamos en un cálido abrazo. No lo veo desde la noche de la fiesta de los padres de Camila, ni si quiera me despedí, lo único que hice fue ir a embriagarme y drogarme al verla con Pablo, y a la mañana siguiente mi hermano ya se había ido con mamá.

-Decidí llegar antes y ver tu cara- Mi hermano tiene casi dieciséis años, pero es muy independiente, como yo.

-Chicos necesito licuar esto- Dice Elle interrumpiendo- ¿Les parece que van a la terraza y les llevo el desayuno en unos minutos?

-No te veo hace mucho Elle, y eres como nuestra hermana, desayuna con nosotros allá afuera.

-Me parece una gran idea, te ayudaremos a hacer el desayuno- Digo mientras me acerco a la estantería a sacar dos delantales. Lanzo uno hacia mi hermano que lo atrapa en el aire.

-Están locos, pero de acuerdo- Dice y me da un tazón de frutas.

-Lávalas bien- Le queda dar órdenes.

-Si señora- Digo y hago un saludo militar.

-Y tu- Dice señalando a mi hermano- Saca tazas, vasos, platos y cubiertos.

Ella licua el jugo de apio de mi hermano mientras el se encarga de colocar vasos en la encimera. Yo termino de lavar las manzanas, fresas, y uvas.

- ¿Y ahora qué? - Pregunta mi hermano mientras coloca los platos junto a los demás cubiertos, supongo que ha acabado. Coloco las frutas en el tazón donde habían estado antes.

-Ahora coloca todo en esta bandeja- Dice Elle pasándole dicho objeto- En orden, cuidado se caen- Gruñe.

-Que miedo- Respondo bromeando y Steve ríe.