parte 11

359 24 8
                                    

Peter POV.

La presencia de Gwen Stacy de la Tierra-61 en mi mundo me confunde y, al mismo tiempo, me intriga. Tengo que admitir que, aunque me preocupa la idea de salvar su dimensión y acabar con esta tortura mental constante, no quiero dejar de luchar junto a Spider-Ghost. Después de todo, hay que tener agallas para haber destrozado a Venom en cuestión de minutos.

Gwen Stacy, la mujer a quien amé, y la superhéroe que conozco ahora ni siquiera son parecidas, pero ambas vienen del mismo lugar. Una de ellas se culpa por lo que ocurrió hace años, y la otra ya no puede lamentarse. Son la misma Stacy que conocí, pero vivieron situaciones completamente distintas, lo que las hace diferentes. Odiar a una es como odiar a la otra, ¿o acaso estas vivencias distintas las convierten en personas diferentes?

—¿Muchacho? —me dijo el señor Stark, mirándome al rostro—. ¿Entendiste lo que te dije?

—Eh... ¡Oh! Lo siento —reaccioné de golpe, mirando a mi alrededor—. Básicamente, el reloj está listo y solo tenemos dos oportunidades para viajar entre dimensiones. Si fallamos una vez, significa que uno de los dos no podrá volver a su hogar. Tenemos que vencer a sus enemigos en menos de 10 minutos o el reloj se descargará, y no podremos regresar. ¿Me equivoco?

—En algo —dijo Gwen—. Solo tenemos un reloj. Si tú vuelves a tu hogar, el reloj se quedará en esta dimensión, y yo no podré viajar a ningún otro lugar. Estoy de acuerdo con eso, siempre y cuando salves mi dimensión; de lo contrario, el reloj se queda conmigo, ¿entendido?

—Vaya, estoy en problemas, ¿eh?

—Señor Stark, ¿nos acompañará? —pregunté.

—Claro, una araña sola no hace telaraña —respondió.

—Sr. Stark, por favor no haga esos chistes; no le quedan bien a su edad —le dije, bastante cortante.

—Está bien, Stacy. Te ayudaré, pero no vuelvas a interferir en los asuntos de mi dimensión. Si lo haces, considérate una enemiga de este lugar.

—Bueno, no es el primer extraterrestre, ser intergaláctico, dios, superhumano en guerra o viajero del tiempo al que le decimos eso y nos desobedece —comentó Stark.

—Saben a lo que me refiero —dije sin profundizar demasiado—. Supongo que nos iremos mañana.

—Mis trajes necesitan recargarse, así que tienes razón. Por eso eres mi favorito —dijo Stark.

Vi como su hija, Morgan, se detuvo en seco en las escaleras y comenzó a llorar. Parecía ofendida por lo de "mi favorito". Se fue corriendo y subió de nuevo a su cuarto.

—¡M-Morgan, espera! —gritó el señor Stark, siguiéndola lo más rápido que sus piernas le permitían.

—Iremos mañana, Stacy. Espero verte en ese lugar —dije, calmado pero resignado.

—Oye... —me dijo Gwen—. ¿Realmente me odias tanto, Parker?

—¿Odiarte? —pregunté, confundido.

—Las miradas que me das, la forma en que actúas y cómo me recuerdas constantemente que no pertenezco aquí... Entiendo que te hayas enojado porque oculté que no soy de este lugar, pero ¿me odias tanto como para actuar así?

—No es eso, yo... —me quedé en blanco, incapaz de encontrar las palabras adecuadas—. Cada vez que te veo... la veo a ella.

Ugh, tenía que decirlo en algún momento. He estado dándole vueltas a estas cosas, y eso permitió que Venom regresara en su momento. Tengo que sacarlo, aunque me duela.

—La extraño tanto —dije, y sentí cómo el nudo en la garganta se hacía más fuerte mientras las lágrimas finalmente corrían por mis mejillas. Me aferré al pecho, llorando frente a ella. Aunque Spider-Man no se permite esto, tengo que soltarlo—. Lamento tanto lo que hice. Si tan solo hubiera saltado... Lo siento tanto. Incluso ahora, al verte, actúo como si me debieras algo.

Caí de rodillas al suelo, derrumbado en cuerpo y alma. En aquel momento, me sentí destruido y solo quería huir y olvidar todo. Por un segundo, pensé que podría conocer a esta Gwen, que quizás podría volver a sonreír, y lo arruiné de esta manera.

—¡Siento no ser ella! —gritó Gwen, y noté que las lágrimas también escurrían por sus mejillas, reflejando su frustración—. Solo quería ver a mi Peter otra vez. Pensé que, si te tenía de nuevo aunque fuera un momento, no importaría si tenía que regresar a mi dimensión. Siento haberte mentido sobre eso.

Me levanté lentamente, tratando de tomar aire, y vi su traje manchado con sus lágrimas.

—Sé que fue egoísta, y sé que me odias por eso. ¡Lo siento! —Gwen gritaba mientras su rostro se enrojecía y las lágrimas caían de sus ojos cerrados con fuerza—. Yo... pensé que te tendría de vuelta.

—Lo siento —dije, abrazándola fuertemente, apoyando su cabeza en mi pecho—. También sé que fue una estupidez, y sé que tal vez no era buena idea estar juntos. No debí tratarte así, cuando el equivocado era yo. Ahora entiendo que no eres como ella.

He sido un completo idiota, esperando que todo se arreglara mágicamente. Desde el principio, obligué a esta chica a quedarse a mi lado, aprovechándome de su dolor para llenar el vacío que dejó la Gwen que amé. Sé que ella se fue y que no va a volver. ¡Han pasado dos años, por el amor de Dios, y sigo actuando igual!

Aun sintiéndome débil, mis brazos temblaban mientras sostenía el abrazo de mi contraria. Acaricié suavemente su cabello dorado, y lágrimas de arrepentimiento seguían cayendo de mis ojos. Necesito disculparme con MJ, lo digo en serio.

N/A

Eventualmente tendrán capítulos de este fanfic, arriba la esperanza abuelita

Tu, Siempre Fuiste Tu - Spider-man x Spider-GwenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora