El alfa pelirrojo estaba mensajeandose con el beta azabache, ya habían pasado dos semanas desde que se habían reencontrado, y desde ese momento a diario se mandaban mensajes.
Por desgracia el teléfono le fue arrebatado de sus manos, levanto la mirada molesto.
-devuélveme mi celular, Mateo.-
-¿Para que sigas hablando con tu amante?-
-no tengo amantes.-Noa se pudo de pie para poder tomar su celular, pero el Omega lo evito.-dámelo.-el pelinaranja lo esquivo y se fue corriendo.-¡¡Espera!!-el Omega se encerró en el baño, Noa intento abrir la puerta, pero fue en vano.-¡Abre la puerta!-
- solo espera, me desare de él.-
El Omega estaba furioso, "su" alfa ya llevaba días mirando la pantalla del celular y sonriendo como idiota.
-¡¡Mateo deja mi celular!!-siguió insistiendo el alfa, su paciencia comenzaba a desaparecer, llegó al punto en el pateó la puerta.-¡¡Abre la maldita puerta!!-
A los pocos segundo fue abierta. Noa miro al pelinaranja con odio, este no se asustó, solo le extendió su celular.-listo.-
-¿Qué hiciste?-preguntó arrebatandoselo de las manos, pero al querer desbloquearlo noto que no podía.-¿Le cambiaste la contraseña? ¿Qué demonios tienes en la cabeza?-
-no dejaré que mi pareja me esté poniendo los cuernos.-
-estás demente, no tengo amantes.-
-me da igual.-camino y lo ignoró.-date prisa que tengo hambre.-
El alfa estaba molesto, ese Omega ya era insoportable.-vete a la mierda, maldito psicópata.-
El pelirojo salió de esa casa sin nada más que una sudadera.
El Omega corrió tras él-¡Ven acá!-grito molesto y las personas que pasaban los veían curiosos.-¡Te estoy hablando!-
•••
Noa estaba sentado en la misma banca dónde se había reencontrado con Logan, quería verlo, además necesitaba un lugar para dormir.
La lluvia de hizo presente, pero Noa no de movió, termino empapado.
Cuando el reloj marco las ocho, fue cuando distinguió la silueta del adorable beta, al parecer iba con su hija.Se puso de pie y camino hasta ellos, en cuanto el beta lo reconoció, se detuvo.
-no te acerques.-le pidió molesto.
La niña levanto la mirada, una sonrisa se formó en sus labios al ver al alfa pelirrojo.-¡Noa!-
-Elina no.-su padre la detuvo de inmediato.
-¿Qué sucede?-preguntó el alfa desconcertado.
-aléjate de nosotros.-el beta camino ignorando al alfa.
-espera.-comenzó a seguirlo.
El beta distinguió su camioneta, sacó sus lleves y le quitó el seguro con un pequeño control, abrió la puerta trasera y volteo a ver a su hija.-sube cariño.-la niña subió y su padre cerró la puerta.
Antes de que el beta pudiera subir, el alfa le impidió abrir la puerta.-¿Por qué estás molesto?-
-dame permiso.-intentó alejarlo pero era inútil-¡Está lloviendo! Haste a un lado.-
-no hasta que me respondas.-
La lluvia seguía cayendo y parecía cada vez peor, de seguir así, era muy probable que pescados un resfriado.
-te ofrecí mi casa, mi amistad. Pero no sabía que le había abierto las puertas de mi vida a un tipo tan asqueroso como tú.-
¿"Asqueroso"? Fue cuando comenzó a entender lo que estaba pasando.-fue Mateo.-
-¿Que?-
-el Omega del que te platiqué, me quito mi celular y se encerró en el baño, hasta cambio la clave de mi celular.-
Sin duda eso era una posibilidad, pero la lluvia no paraba y no estaba dispuesto a quedarse con la duda.-te daré una oportunidad, vayamos a mi departamento.-
•••
El alfa estaba en aquel departamento ajeno, metido en una tina llena de agua caliente, todo el camino había estado estornudando. Estaba jodido, seguramente al día siguiente tendría un dolor horrible de garganta.
Al terminar de bañarse, se vistió con la pijama que el beta le había ofrecido.
Salió del baño y llegó al comedor, en dónde estaba la pequeña castaña disfrutando de un cereal.
El beta se le acercó y le ofreció una taza con un líquido caliente.-ten, es un té de limón con miel.-
-gracias.-
-terminé.-exclamó la niña dejando su plato en el fregadero.
Su padre le sonrió con ternura.-ve a tu habitación.-
-hasta mañana Noa.-
-descansa.-la niña se fue dejando a los mayores.
El beta saco su celular, lo desbloqueo y se lo entrego al alfa, quien curioso vio el móvil.-esto es lo que recibí hoy.-
"Sabes que, ya lo decidí. Prefiero alejarme de una persona tan estúpida y aburrida como tú. Solo me acerque para poder estar entre tus piernas, pero eres tan difícil. Mejor buscaré a alguien más, eres lindo, pero muy difícil y estúpido."
Al terminar el texto, Noa sintió que la sangre le hervía, estaba dispuesto a matar a ese Omega.
-¿Y bien?-
El alfa soltó un suspiro y le entrego el celular.-ya te lo dije, Mateo me quito mi móvil, se encerró en el baño y te escribió esto. Te pido una disculpa.-
-¿Cómo se que no me mientes?-
El alfa tomo su celular e intento desbloquearlo.-no puedo desbloquear mi celular.-
-confiaré en ti.-respondió el beta, no por el echo de que no pudiera desbloquear el celular, bien podría fingir con un código distinto. Confiaba en él porque en ningún momento el alfa había intentado propasarse.-¿Por qué sigues con él?--costumbre, creo.-
-estar juntos por costumbre es bastante desgastante.-
-estoy tratando de buscar un nuevo departamento.-
-aqui hay departamentos disponibles.-
-es un lugar lindo, pero no podré pagar algo como esto.-
-podría ayudarte.-
-no gracias.-respondio rápidamente, el beta le miro ofendido.-no me lo tomes a mal, pero nunca me ha gustado recibir ayuda financiera.-
-entonces hagamos un trato. Tú cuidas de Elina cuando yo no pueda cuidarla, te pagaré como cualquier otro trabajo, así tú tendrás dinero para pagar el alquiler, y yo tendré ayuda con mi hija.-
Lo pensó un momento, tenía un trabajo bueno, la paga era buena, ese dinero ayudaría con el alquiler y los gastos de imprevisto.-me gusta, acepto.-
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Un Omega Sin Libertad.
FanfictionAunque todo haya cambiado con el tiempo,algunas cosas seguirán igual. Eiji decide tomar el lugar de su pequeña hermana sin saber que podría pasar con él. Aslan jamás conto con eso,y sus planes tomaron un pequeño giro,al conocerse,Eiji reta con la mi...