•
Han pasado 2 días desde aquella ves que Iván me pidió la oportunidad para enamorarme,desde ese día no se a enfocado en nada de lo que había mencionado. Ni si quiera me hablaba, muy apenas me dirigía la mirada.-En tanto piensas?.-la voz de Don mayo a mis espaldas me hizo exaltarme.
-Buenas tardes Don mayo.-Sonreí tímida.
-Buenas.-Se incorporó en el sofá.-Y los demás, en donde están?
-Pues mis hermanos afuera en la alberca y mis papá salieron a comprar unas cosas antes de regresar a la Sierra, y pues los demás no se.-Respondi.
-Has hablado con Iván?.-Don Mayo me miraba fijamente, como si quisiera ver mi reacción al mencionar a Iván.
-No. ayer lo vi por última ves con su novia.-respondi en un tono bajo pero audible.
-Los dos se miran bien enamorados.-Dijo Don mayo sonriendo levemente.-Y a mi no me vas a decir que no, porque soy experto sabiendo cuando alguien me miente.
-Pues parece que nos amamos, pero no es a si, apenas nos conocemos.-
-Pues a si no le ve Iván, me dijo que te quería como para su esposa.-Reímos sin pensarlo.
-Puedo confiar en usted?.-Pregunté arqueando mis cejas.
-Estás Hablando con Ismael, tú padrino Mija.-Respondió y solo sonreí.
-Cuando lo vi.—suspiré,y perdí mi mirada.-Se me hizo atractivo, me puse nerviosa al estar con el, cuando supe que tenía novia me sentí enojada conmigo misma, por pensar que podía tener algo con una persona como él, o al menos eso es lo que pienso en este momento.-Don Ismael solo asintió y yo proseguí.-Hace unos días me dijo que le diera esta semana intentaría enamorarme, pero el tiempo se agota. Yo regresaré a Los Ángeles y esto abra quedado en el pasado.-
-Entonces Iván no tiene que hacer que te enamores, tú ya lo estás. Es solo que tanto tú como el, no saben lo que quieren aun. Ten paciencia.-Dijo Don Mayo consolada mente.
-Es que ni siquiera me habla, no entiendo que le pasa.-Dije haciendo una mueca.
-Tal vez no se siente bien después de darse cuenta el pedazo de mujer que tiene con el.-
-A que se refiere.-fruncí mi ceño curiosa.
-Pues Priscilla es una interesada drogadicta, de todo lo peor que puede existir.-Don Ismael hizo una mueca de asco.
-Entonces Vicente tenía razón.-susurre.
-Que??.-
-No nada.-sonreí.-Pues que bueno que Iván se alejó de esa mujer.
-El problema es que la mujer no se quiere alejar.-Rio negando.
-Es típico de "una interesada".
꧁꧂
Triángulo Dorado 📍
Este era mi ultimo día en Culiacán, las vacaciones se me voltearon, nada salió como pensé, lo único bueno es que conocí a muchas personas que a pesar de todo las aprecio, y se que ellos a mi.
Nos encontrábamos cenando mi familia los mayitos y lo Chapitos en un gran comedor mientras platicábamos de cosas sin sentido. Iván ya no estaba con Priscilla, o al menos eso me aseguro Ovidio.
Ya estábamos por terminar cuando Iván llegó de la mano con una muchacha, cuando nuestras miradas se posaron en ellos la soltó y sonrió nervioso.
-Ya para que vienes carnal, ya casi acabamos.-dijo Alfredo señalando su plato casi vacío.
-Perdón, miren ella es una amiga, se llama Izabella.-La muchacha solo saludo, se le notaba lo buchona con ese vestido rojo arriba de las rodillas y un escote de V con maquillaje exagerado, y obvio las pestañas y las uñas postizas.
-Pueden tomar asiento allá.-señaló Don mayo exactamente a un lado de mi, habían dos asientos solos y yo yo solo tragué saliva.
Iván se tensó pero camino hacia los asientos y le ayudó a Isabella a tomar asiento y después el hizo lo mismo, sentándose aún lado de mi. Trato de evitar mi mirada pero no pudo, me dedique a ignorarlo y comer un poco más rápido.
Estaba por terminar, di un sorbo a la limonada de fresa echa por Ovidio la cual la recomiendo. Cuando menos lo pensé, la mano de Iván se posó en mis muslos haciéndome estremecer.
Quite su mano bruscamente y este solo me miro confundido, me levante de mi lugar y sin decir nada camine hacia la habitación. Entre y cerré la puerta de golpe, la sangre me hervía, porque fui tan estupida en creer que el chapito se fijaría en mi, ya hasta anda agarrado de la mano con su "amiga" y a mi ni me dirige la palabra.
꧁꧂
Si,hoy es el día, hoy me voy de la Sierra rumbo a mi casa, en Los Ángeles. Nos encontrábamos mis hermanos y yo subiendo las maletas a un helicóptero que nos translaria hasta L.A mientras que mis padre se despedían de la gente de alto mando como Don Mayo.
Ya nos encontrábamos en nuestros minutos en tierras sinaloenses, cuando vi bajar a Iván de un Lamborghini color blanco, venía vestido con un pantalón blanco, una camisa rosada,un saco azul cielo y unos Pebbled Leather Gancini Driver ,acomodo su reloj mientras se acercaba a mi y al detener enfrente de mi, se quito sus lentes de sol.
-Ya te vas fresita?.-dijo Iván con una sonrisa, como si nada estuviera pasado.
-Pues obvio,que no ves.-dije de mala gana.
-Ni me diste chance de enamorarte.-me tomo de la cintura y me aleje al instante.
-Y tú ni siquiera lo intentaste, en cambio andabas bien agarradito de la Izabella.-reclame.
-Estás celosa.-Arqueó las cejas y yo solo bufé, me iba a girar para retirarme pero me detuvo.-La cague ya se, pero no sabía que hacer. Pero solo piensa que las cosas pasan por algo tal vez no eras para mi.-
-Tal vez.-susurre, lo que dijo le dolió y es que era verdad tal vez no era para mi, pero neta no quería que me dejara ir. No lo conozco ni un mes, pero siento que lo eh amado toda la vida.
-Tal vez y ya te espera otro Wey que si te de lo que mereces güerita.-sonrió, pero sin ese brillo en sus ojos.-No hay que ponernos sentimentales, sabíamos que esto iba a pasar.
-Si, lo mejor es que hagamos como si esto nunca hubiera pasado.-susurre.-Cuídate mucho Iván.-dije para después caminar hacia Ovidio.
-Que paso plebe porque anda awitada?.-Pregunto Ovidio preocupado.
-Por pendejadas.-Sonreí sin sentido, y este se carcajeó.-De todo te ríes tú cabron.
-Es que yo soy alegre.-Sonrió y me tomo del brazo.-Yo te cuido al Iván, no hay pedo.
-Ay Ovidio, mejor déjalo ser, como el dijo por algo pasa las cosas y tal vez el no era para mi y yo no era para el.-
-El te dijo eso?-Frunció el ceño. Y yo solo asentí.-¡Que poeta!
-Chanel ya vámonos.-gritó mi madre abordando el helicóptero.
-Plebe!!.-se acercó Alfredo corriendo.-Nos estamos viendo, tenemos vida podemos irle a echar una visitada.-me abrazo.-Apunte mi número.
-Y el mío también.-Dijo Ovidio, y eso hice.
-Bueno bye.-les dedique una sonrisa.
Subí al helicóptero y me giré para ver por último a Iván y este solo me miraba fijamente, me guiño el ojo y yo solo sonreí.
•••••••
BÉLICO
ESTÁS LEYENDO
"𝒯𝒶𝓁 𝓋𝑒𝓏" •Iván Archivaldo• [TERMINADA]
Action𝐼𝓋𝒶́𝓃 𝒜𝓇𝒸𝒽𝒾𝓋𝒶𝓁𝒹𝑜 para ustedes, en esta vida cuando algo se quiere obtener algo de una persona neciamente. O cuando no hay peor ciego que el que no quiere ver. En este caso es diferente. Cuando alguien ama a alguien es capaz de morir de...