ᴠ ᴇ ɪ ɴ ᴛ ɪ ɴ ᴜ ᴇ ᴠ ᴇ

11 5 0
                                    

─Tenemos una hora, así que puedes probarte lo que te guste ─Le dijo su mamá a Henry mientrss entraban a la tienda de ropa ─Pero  solo dos playeras o camisas y un pantalón.

Henry asintió al igual que sus primos. No habían ido solos, Henry y su madre estaban acompañados por su tía y sus hijos gemelos, eran solo dos años mayores pero sentía muy en el fondo que el no era de el agrado de ese par.

En cuanto las dos mujeres se fueron aparte los tres chicos se adentraron en el departamento de caballeros, aunque Henry (el menor) debía buscar cierta ropa en el departamento de niños todavía.

Henry buscaba entre prendas, viajando por los pasillos y viendo lo que sea que fuera de su agrado. No tenía mucho desde que le habían comprado ropa, quizás siete meses pero lo regular era que cambiara de ropa anualmente cada diciembre, pero ese ciclo de interrumpió cuando se la compraron un mes antes de lo normal y ahora que era junio era también algo raro para las fechas.

Pero eso si la ropa era comprada por sus padres, esta vez era cortesía de su tia Andrea, por lo que de limitaron a 3 prendas también.

En los altavoces de la tienda se escuchaba una tranquila melodía con sonidos orientales, y le prestó más atención a la canción que en lo que tenía en frente. De toda la lírica sobresalía una frase con la que Henry se identificó.

'Es lindo tener un amigo'.

No vio más a sus primos por lo que caminó en la tienda, escogiendo mientras su mente viajaba ha aquella ciudad inglesa. ¿Cómo estaría Lance ahora? Hace dos días que estaba mal y hablaba más abiertamente de sus emociones, ─consecuencias de estar enfermo ─Deducía Henry.

humans aren't real ─Decía el estampado de una de las playeras.

La otra era una camisa con mangas de tres cuartos y de color negra, se veía cómoda y sin duda la tela se sentía así.

A la distancia, entre las exhibiciones del interior de ma tienda podía ver a Lance distraído, cómo si estuviera acompañado de alguien ya que movía los labios.

Parpadeó mientras caminaba hacia el sector de los pantalones y elegía uno.

Ya en los vestidores podía apreciar que sin duda las mangas de la camisa eran más cortas de lo común, no había visto una de ese tipo, le quedaba bien pero era ese detalle que no coincidía, pensaba que era un defecto.

─A mi me gustan las camisas así ─Dijo Lance.

Una de las características de los vestidores es que eran espaciosos, más de lo normal y el otro chico estaba apoyado en una esquina mientras examinaba la vestimenta.

─Descuida no llevo mucho aquí.

─No lo sé, nunca había usado camisas de este tipo y mucho menos las ocupo tan seguido como lo pensarías ─Giró mirándose en el espejo, y ahí estaba su reflejo pero no el de Lance.

Eran obvias las razones.

─Uno le toma gusto, a mi tampoco me convencían al principio.

─Tal vez.

Sin duda, las pocas personas que pasaban por los vestidores y oían hablar al chico sólo si tenían curiosidad, más por qué había alguien ahí o por qué no había respuesta y aún así el chico seguía hablando.

─Bueno, puedes probarte esa playera y yo vuelvo cuando ya estés listo.

Y si sus primos hubieran estado ahí, sin duda habrían querido entrar y una explicación del por qué hablaba solo. Claro aunque no fuera de su incumbencia.

***

Un suspiro antes de morirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora