Quizás, Sólo Quizás ( WendyxMabel )

Comenzando el retiro

La pelirroja llegó a su casa y empacó sus cosas después de haber invitado a los demás y que respondieran positivamente.

Guardó sus cosas y le explicó a su padre lo que había pasado. Él le dijo que si tuvieron un campamento él y sus hermanos, ¿por qué ellos no?
Decidió adelantarse e ir a la cabaña. Los tres días se contaban a partir del día siguiente, por eso, quería aprovechar al máximo el día gratis.
Recibió una notificación de Gideon en el camino. Ya estaba listo y que ya iba en camino al punto de reunión junto con Grenda y Candy, que ella pasara por los gemelos.

La pelirroja con una sonrisa saludó a la familia Pines con la mano y a su novia le saludó con un beso corto y suave en los labios, para después retirarse con ellos.

-¿Listos? -cuestionó la pelirroja llegando al lado del albino y los demás.

-Jaja, claro. -respondió el albino por todos los presentes.

-Bueno, andando. -dijo la pelirroja y sin más, comenzaron a caminar.

Llegaron al principio de la montaña donde habían unas escaleras que daban a una cabaña bastante amplia y grande.
Comenzaron a caminar hasta llegar al lugar del destino donde quedaron asombrados por la belleza que irradiaba éste. La cabaña tenía un diseño moderno, pero el ambiente en el que se encontraban, era moderno-ambientista. Era relajante para todos los presentes.

-¡Pido la habitación de arriba! -exclamó Grenda echándose a correr hacia la cabaña.
-¿¡Qué!? ¡Claro que no! -exclamó la castaña siguiéndola a toda velocidad causando una risa divertida por parte de los presentes.

-Bueno, en la planta baja, hay tres habitaciones. Si hubiera dos se repartirían dos y dos en cada una, pero como hay tres, dos dormirán solos y dos dormirán en la misma habitación. -comenzó la pelirroja viendo a las tres personas en frente de ella- ¿Y bien? ¿Quienes dormirán juntos?

-Am, nosotros podemos dormir juntos, no nos molesta. Las chicas que duerman en habitaciones diferentes para que estén más cómodas. -dijo el castaño sacando su lado caballeroso a la luz.

-No se preocupen, ustedes duerman separados. -comenzó a decir la azabache algo tímida- a nosotras nos gusta dormir juntas, son como pijamadas.

-¿Segura? -cuestionó Dipper algo feliz al escucharlo.

-Claro, siempre todo es más divertido con Mabel y Grenda.

-Am, respecto a eso, creí que lo sabrías pero bueno, Mabel dormirá conmigo. -dijo la pelirroja interrumpiendo la conversación y evitando el contacto visual con la azabache.

-Ah, no, no lo sabía. Me pregunto si tan siquiera ella sabrá. -dijo la azabache un tanto molesta.

-¿Qué insinuas? Ella puede dormir con quien le plazca. -dijo la pelirroja respondiendo igual de molesta.

-Ah, vaya. No lo sabía, es que como siempre es a tí a quien veo opinar, no creí que te importara "lo que le plazca".

-Pues ya vez que sí. Si ella quiere, duerme con ustedes. -dijo la pelirroja tratando de no perder la paciencia- Pero esto ya lo había hablado con ella, dudo mucho que prefiera dormir con ustedes.

-Lo dudas, pero a fin de cuentas es ella la que lo decide.

La pelirroja por fin visualizó los ojos negros de la azabache frunciendo el ceño igual que ella. Había tensión en el ambiente y ninguno de los dos chicos sabía muy bien cómo intervenir, y entonces, como si fuera un milagro, apareció la castaña llena de alegría.

-¡Hola! ¡Le gané a Grenda! -comenzó diciendo la castaña sin haber esperado a su amiga agotada por la carrera- Tenemos el cuarto para nosotras Wendy.

La castaña con alegría tomó la mano de la pelirroja así liberando algo de tensión en ésta.

-De por sí jaja. -respondió la pelirroja con entusiasmo- Oye, ¿no prefieres dormir con Candy y Grenda?

-¿Dormir con Candy y Grenda en vez de contigo? ¿Por qué me tomas Corduroy? Me la pasaré mejor contigo jaja.

-Ah, ¿en serio? -dijo la pelirroja con una sonrisa altanera sobre la azabache mientras que ésta sólo desvió la mirada con rabia- Es bueno saberlo.

-Jaja sí... -dijo el castaño con nerviosismo interrumpiendo la mirada trinfante de la pelirroja sobre la azabache- ¿Qué les parece si nos vamos a instalar?

-¡Sí! ¡Pido el cuarto más grande de la planta baja! -volvió a exclamar Grenda mientras se volvía a ir corriendo al interior de la casa estilo cabaña ocasionando una risa en todos los presentes.

Candy con molestia siguió a Grenda con paso lento, mientras que la castaña y la pelirroja iban de la mano a subir las escaleras del lugar, así quedando únicamente los chicos, quienes comenzaron su ruta hacia el interior.

-¿Todo bien, Wendy? Te noté algo rara ahí abajo. -dijo la castaña una vez que entraron a la habitación principal.

-Claro, sólo... Candy es desesperante, pero como tu amiga, lucho por no arrepentirme de haberla invitado.

-Jajaja, tranquila sólo déjalo fluir, todo estará bien entre las dos en menos de lo que te des cuenta.

-Si tú lo dices...

La castaña se aventó a la cama divertida ocasionando sorpresa y diversión en la pelirroja.

-¡Mira lo grande que es! ¡Es increíble! -exclamó la castaña expandida en toda la cama como una estrella de mar.

-Jaja, supongo que sí. Lo más increíble, para la chica increíble. -dijo la pelirroja para después acostarse al lado y robarle un tierno beso a su chica.

-Gracias... -susurró la castaña sonrojada sin despegar la mirada de la mayor.

-No hay de qué. -susurró la pelirroja para volver a darle otro beso a la castaña esta vez, un poco más prolongado.

Definitivamente serían unos días ajetreados.