CAPÍTULO DIECISIETE

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La luz natural entró por mi ventana después de que mi madre hubiera abierto las persianas y retirado las cortinas.

-¡Venga arriba cariño! Tu amiga y su familia nos espera.

Viviana lucía una gran sonrisa, una que hacía años que no veía.

<<¿Qué es lo que la había puesto tan contenta? >>

Me encogí de hombros mentalmente y me desperecé lo antes posible.

Salí de mi cama y tras dar un beso de buenos días a mi madre abrí mi armario, busqué algo cómodo y fui a darme una ducha antes de desayunar.

-Joel recuerda que a las 12 tenéis que estar los tres allí vestidos y todo. ¡No tardes en despertar a los pequeños o no comerán después!-Dijo mi madre una vez listas para ir a ayudar a la familia Scott.

-¡Sí mamá! Tranquila que seremos puntuales.

-Eso espero hijo.-Le dio un beso en la mejilla a modo de despedida mientras que yo le hice el  típico gesto con la mano.

(***)

-¡Felicidadeeeees!-Grité despertando a la loca de Vega.

-Cinco min...-Empezó a decir antes de reaccionar.-Espera...¡Hoy es mi cumpleaños!-Abrió bien los ojos.-¿Lana? ¡LANA!-Se lanzó a mis brazos.

-¡Felices veintiuno, pequeñaja!-La estrujé y llené de besos.

-¡Muchas gracias nena!-Me sonrió.-¿Qué me vas a regalar?

-¡Una cachaba! Estás muy mayor ya, ¿eh?-Reí.

-¡Oye!-Me lanzó un cojín.

-Sí oigo, no como tú.

Me asesinó con la mirada antes de ver mis "pintas".

-¡No, así no puedes estar en mi cumpleaños!
-Tranquila...Sabes que esto me lo he puesto para preparar la decoración pero lo que me pondré para la fiesta lo traje ayer, ¿recuerdas?

-¡Es verdad! Está en la habitación de invitados junto a mi vestido.-Sonrió.-¡Va a ser una fiesta genial!

-Desde luego.-Sonreí.

-¿Vamos a desayunar y luego ayudamos con los preparativos?

-No hace falta que bajemos.-Señalé la bandeja que había en su escritorio.

-¡Me has traído el desayuno! ¡Eres la mejooor!-Me abrazó de nuevo.

-Lo sé.-Tiré mi pelo hacia atrás haciendo un gesto de chulería.

Las dos reímos y empezamos a zampar los bollos de chocolate, tostadas y el zumo que le había preparado unos minutos antes de despertarla.

Una vez que se puso ropa cómoda bajamos al jardín y ayudamos con todos los preparativos.

Después de una hora y media fuimos a ponernos guapas pues a las 12.30 ya iban a llegar los familiares y amigos de Vega, aunque mis hermanos iban a llegar media hora antes como bien recordó mi madre a mi mellizo antes de marcharnos de casa.

Al final yo me puse un mono del mismo color que el vestido de mi mejor amiga tras que ella insistiera en ir a juego.

Justo cuando terminamos de maquillarnos Roy llegó junto a su familia, incluidos Connor que lucía tan bello con su camisa blanca y esos vaqueros negros.

Mientras felicitaban a mi mejor amiga no pude evitar fijarme en como Miranda me fulminaba con los ojos cuando le sonreía a Connor.

En ese momento me recordó las miraditas de aquella noche de fiesta y volvió aquella pregunta que me hice ese día. 

<<¿A caso a Miranda le gustaba mi jardinero?>>

Intenté no darle muchas vueltas pues él a mí no me gustaba, no tenía porque importarme si la hermana de Roy estaba detrás de él.

Sin embargo sentía algo extraño en mi cuerpo.

Los saludé a todos una vez tiraron de las orejas a la cumpleañera y me disculpé para ir a ver si mi madre necesitaba ayuda.

Pero una mano me detuvo, era Connor que me miraba con una gran sonrisa.

-¿A caso estás huyendo de mí?

-¿Qué? Yo...no.-Dije metiendo mi pelo detrás de la oreja.-Solo iba...a ayudar a mi madre.

-¿A tu madre? ¿A beberse el agua?-Dijo mirando en su dirección.

Me encogí de hombros sin decir nada.

-¿Estás bien conmigo? A penas hemos hablado mucho estas semanas...

-Sí, solo que he estado ocupada preparándome para la beca de baile.

-¿Beca de baile? ¿Y eso? No me lo habías contado.

-Es que aún no lo sabe casi nadie, solo Vega.-Me encogí de hombros.-Bueno y mi amigo Eliot que fue quien me lo propuso.

-¿Eliot?-Me pareció notar cierto tono de celos en su voz.

-Sí, fuimos compañeros en el grado de infantil, él trabaja dando clases en una academia y hace poco me contó que podría optar por una beca si quisiera.

-¡Eso es genial!-Me sonrió.

Aunque no sé si la sonrisa era del todo cierta.

-¡Sí! Ojalá me la dieran porque yo no podría permitirme pagar ese pastizal que cuesta cada curso.

-Seguro que lo conseguirás.

-Eso espero.-Sonreí.

(***)

Una vez que todos los invitados llegaron la fiesta comenzó.

En un escenario improvisado donde se situaba una pantalla blanca y un proyector empezaron a salir imágenes de Vega desde bebé hasta ahora mientras de fondo sonaban ciertas canciones que habían marcado la vida de mi amiga.

Ella lloraba de la emoción y cuando el vídeo comenzó nos abrazó uno por uno a sus padres, su novio y a mí, al resto les lanzó besos imaginarios pues eran bastantes invitados como para ir uno por uno otra vez.

A continuación ella nos agradeció el haber asistido a su cumpleaños y dio comienzo a la comida que sus padres habían encargado a un servicio de catering.

Nos sentamos todos en dos mesas blancas alargadas que estaban en el centro del jardín; en una se sentaron todos los familiares junto a Vega y en otra nos sentamos los amigos.

Yo estaba situada entre Axel y Hera mientras que en frente tenía a mi madre, que estaba a la derecha de Joel y a su otro lado estaba situado Gus, el padre de Roy, quien no paraba de hacerla reír lo cual pasé por alto al principio, pero con el tiempo me empezó a extrañar.

Cuando todos terminamos de comer empezó la hora del karaoke.

Aproveché aquel momento para preguntarle algo a mi mellizo.

-¿Has notado tú también lo feliz que lleva todo el día?

-No solo hoy, sino que desde el lunes lleva así.

-¿Desde el lunes?

Intenté recordar aquel día y si pasó algo especial para que se sintiera así pero no encontraba nada.

-¿Y has visto lo bien que se llevaba con ese señor que estaba a su lado?-Comentó Joel.

-¡Pensé que me estaba volviendo loca! 

-¿Se conocían de algo antes de que empezara a trabajar en el cobertizo?

-Sí, de cuando me llevaba a los cumpleaños de Roy cuando era pequeña, pero creo que no han vuelto a tener contacto desde que dejé de asistir.

-Entonces, ¿cómo es que estaban así?

-No lo sé...


EL SECRETO DE MI JARDÍNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora