—Esto es decepcionante. Nada en ninguna casa.—suspiró Vegetta.
—Pues nos quedan las antiguas minas de Auron.—dijo Rubius. Este había estado evitando que sus compañeros vieran todo lo oscuro que tenía Fargan.
—Venga. A ver qué esconde ese guarro.
No les fue difícil entrar: solo cavaron bajo sus pies y encontraron el túnel principal. Vagaron por los túneles durante horas; pero no podían rendirse.
Entonces, por el rabillo del ojo, Vegetta notó un pasillo mal escondido, mucho más fino que por los que habían estado hasta entonces.
—¿Quién va delante?—preguntó el oso. Los otros se limitaron a mirarlo.
Al final, el oso fue delante; el comisario en medio; y el ladrón detrás.
Después de estar un rato avanzando en completo silencio, Alex habló.
—¿Estamos yendo hacia el cartel o me lo parece a mí?
—Tienes razón. Estamos casi debajo.
—¡Eh! ¡Veo luz!—gritó el del gorro.
Empezaron a correr en esa dirección, esperanzados.
Cuando emergieron se encontraron una sala oscura y pobremente iluminada.
—Así que... ¿Auron es de la Hermandad Oscura?—preguntó Alexby.
—No, no. Se ha colado aquí la rata asquerosa. Esta es la base antigua.—explicó Rubius, mientras quitaba los escáneres de sus hermanos oscuros.
—Callad un momento.—susurró de repente Vegetta—¿Lo escucháis?
Un eco provenía de uno de los pasillos.
—¿Será Luzu?
—Solo hay una forma de saberlo—dijo el ladrón francés, echando a correr.
Hacia el final del pasillo, había restos de pared y techo en el suelo, cerca de una puerta de hierro y un agujero que dejaba ver dentro de la celda.
—¡Luz!—gritó Alexby, emocionado—¡Estás vivo!
Sin duda el secuestrado tenía un aspecto horrible; mejillas hundidas, ojos rojos e hichados, ojeras muy notorias, piel muy pálida y marcas en la cara por donde habían caído las lágrimas. Pero estaba vivo.
—¿Sois... Alexby... Rubius... Y Vegetta, supongo?—la voz de aquel chico era tan ronca que apenas era audible; además, sentía el miedo crecer en él.
—Coño, es verdad que Auron le borró la memoria.—masculló el oso.
—Pero si encontramos hasta la botella, claro que sí.—respondió el comisario.
—No sé qué tramáis enseñándome vuestras caras... pero por favor no me hagáis daño.
—¿Por qué íbamos a hacerte daño? Venimos a salvarte.—dijo Vegetta.
—Auron me dijo cómo nos llevamos. Le estoy esperando.
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ℝ𝕖𝕒𝕔𝕔𝕚𝕠́𝕟 𝕖𝕟 𝕔𝕒𝕕𝕖𝕟𝕒.
Fanfiction-"Me encuentro fatal, ¿puedes venir? -"¿No te acuerdas de nada?" -"Es Lana. Me ha dicho que Luzu ha desaparecido." -"¿Qué? ¿Vienes a mentirme otra vez?" -"¿Lolito...?" ( Spoiler y aclaraciones respecto al AU ) Bienvenid@s a este AU de Karmaland. Má...