Sorim.
Fin de semana. Significaba descanso comúnmente para mi, pero debía terminar un par de trabajos.
Había un block de dibujo grande sobre mi mesa, debía hacer un encargo que pidió el profesor. Estaba sin inspiración y era frustrante, aunque aun hay tiempo para poder trabajarlo.
El día era soleado y muy primaveral. El ambiente a fuera se veía agradable, talvez debía salir un momento para despejar mi mente, o mas bien en llenarla de los mismos pensamientos que he estado teniendo últimamente.
Las calles por las que caminaba estaban con gente de mi edad aproximadamente, creo, también podían ser escolares. Muchos de ellos eran grupos grandes de amigos, riendo y jugando.
A veces ver eso un poco de pena entraba en mi por el hecho de que solo tenía un par de amigos, Mingi y Yunho. Y no me quejo, es grandioso tenerlos, pero también me gustaría tener mas amistades. Hay días en los que siento que mi día es un poco deprimente solo por el hecho de estar sola.
Seguía caminando hasta que vi una banca en una plaza cercana a casa. Caminé hacia ella y no me senté, me acosté ahí para apreciar las nubes que habían. Se sentía relajante hasta que siento mi móvil vibrar. Lo tomo y desbloqueo para revisar.
Desconocido.
¿Hola? Sorim soy yo, Naeun~
18:50
Sé que esto no tiene que ver con nuestro trabajo grupal pero Somin ha insistido.
18:50
¿Naeun, Sorim? Dos ¿Cómo se llamaba la tercera chica?
Te han organizado una cita a ciegas con un chico, mañana a las 17:00 en Hongdae.
18:57
¡Pero lo vas a agradecer! ¡Ni pienses cancelar porque el ya confirmó!
18:57
No podía creer que hayan hecho eso. Estaba asombrada y disgustada con la idea de las citas a ciegas, nunca he tenido una pero no me gustan, estoy en contra de eso. Además ¿en qué momento les he dado la confianza de hacer ese tipo de cosas? Ellas son solo compañeras de universidad, que molestia, el hecho de que hiciéramos un trabajo juntas no nos convierte en amigas así como así.
El día se estaba haciendo un tanto agradable hasta que se me amargó la fiesta con eso.
Me levanto con seguridad, y camino a pasos firmes hacia la tienda de conveniencia a comer algo por mi enojo. Un ramen picante talvez, eso serviría, o ttoekbokki.
Llevaba unos dos o tres minutos llegar allá, cuando entré mi destino había sido definitivamente ir hacia los fideos instantáneos, otro día serán los pasteles de arroz.
Cuando elegí el que quería, lo pagué y lo serví en el mismo lugar. Me senté en las mesas de afuera.
Mientras comía pensaba sobre lo estúpido que es esta situación y todo lo que me ha pasado en los últimos días, es absurdo. Todo ese sentimiento de molestia conmigo hacia una perfecta combinación con el picante del ramen, como si estuviera apaciguado mi sentimiento de enojo.
Lamentablemente los fideos se habían acabado y solo quedaba caldo que lo bebí. Me levanto de la silla y camino hacia el contenedor para botar el envase. Cuando volteo, toco mi pecho inconscientemente por el susto que me había llevado. Una de las chicas con las que trabajaba en lo de la universidad estaba ahí, justamente la "tercera"?
—Que coincidencia, ¿no?
Asiento un poco desconcertada y me hago a un lado para irme y despidiéndome de manera cortés, pero ella me detiene.
—No vayas a faltar a esa cita, podría ser un buen comienzo para ti —ella me guiña un ojo y me sonríe— ¡Nos vemos!
Realmente este mundo es muy raro. Es bastante extraño el hecho de que ocurra este tipo de cosas. Mi vida iba muy tranquila hasta que volví a la universidad.
Estaba por irme, cuando veo a Yunho en una de las mesas en las que estaba yo antes. Me hizo un ademán con la mano para que fuera hacia él.
—¿Y Mingi? —le pregunto mientras me sentaba. El estaba comiendo un snack antes de contestar.
—Creo que está ocupado ¿Quién era esa chica? —me consulta con mucho interés— Parecías incómoda.
—Ah sí... Es que...
Escucho el sonido de la campanilla de la entrada de la tienda sonar y unos pasos que se sentían mas cerca. Por un momento pensé que era un desconocido.
—Yunho tuve que cambiarlo por otro porque el anterior venció.
Escucho esa voz detrás mío que impide que gire a verlo. Miro a Yunho ver a la persona que estaba a mis espaldas y encoge los hombros.
—Ven, siéntate. Te voy a presentar a una amiga, se llama...
—Oh, ya la conozco, tenemos algunas clases juntos. Hola, Sorim —saluda educadamente con su voz suave, mientras se sentaba, yo hago lo mismo de vuelta.
—¡Genial! —sonrie mi amigo— Entonces, sigue contándome quién era ella.
Me siento un poco incómoda de repente por la presencia del chico, pero por otro lado estaba Yunho que esperaba mi historia reciente. Veo discretamente a San, quién ahora estaba en su móvil mientras comía asi que perdí cuidado.
—Es una de las chicas con quién hago un trabajo para un tema, eso —Yunho frunce levemente el ceño, parece incompleto con lo que le contesto.
—Te veías rara, ¿te dijo algo?
Suspiro y pongo los brazos sobre la mesa, rendida.
—Hum... Bueno, el otro día durante la reunión del proyecto, comenzaron a hablar de sus citas y me hicieron preguntas respecto a eso, tu sabes. Y creo que por esa razón hoy me mandaron un mensaje diciendo que tengo una cita a ciegas —contar eso me estaba comenzando a enfurecer de nuevo, mi amigo me escuchaba atentamente—. Y sabes que esas cosas no me gustan, entonces me molesté y vine acá para comer tranquila además para olvidar eso y resulta que me encuentro con una de ellas.
—¿Sabes? Puedes sacar el lado bueno de eso ¡tienes una cita!
Parece que no sabe bien.
Yunho me anima a que vaya porque podría ser una buena oportunidad de conocer a alguien, pero la verdad no estaba interesada. Miro discretamente hacia San, que parecía estar sumergido en su móvil.
—Pequeña Sorim... no calientes tu cerebro como lo haces de costumbre y solo ve por esa cita, a que tu psicóloga diría lo mismo.
La llamaría... pero hace unos días se fue a la isla Jeju de vacaciones.
Encogí mis hombros y Yunho me siguió animando.
Por un momento sentí la mirada fija del chico, pero luego esta se desvanece y la mantiene en su móvil de nuevo.
Me ha resultado incómodo hablar de ese tema con alguien presente que no conozco del todo.
Podría hacerle caso a él y aceptar, pero en mi interior algo no estaba bien. Aunque fuera un tema muy concurrido, simple, a mi me resultaba nuevo y extraño.
....
Gracias por leer ♡♡
