Capítulo 6

654 52 3
                                    

Tony no sabe que hacer, pero ¿qué se supone que debería hacer?
Tuvo sexo con Stephen y al otro día lo abandona, ¿a qué se supone que estaba jugando? ¿Porqué ese repentino interés? Sólo lo confundía.
-No puedo atenderlo, es tarde y estoy cansado. Debiste decirle que no estaba o que ya dormía.
-Dijo que es un viejo amigo, que lo conocías y si está aquí es porque le urge verte.
- Ya que, dile que pase.
Mientras Strange bajaba al taller, Tony se preguntaba que podían hablar entre ellos, habían pasado años, cosas, ya no  eran los mismos jovencitos y lo más importante ya no eran amigos, además Stephen dijo que huyó eso no era verdad,al principio sí, pero él venció ese miedo, o tal vez si tenían cosas pendientes.
-Te ves tan apuesto con tu pose de pensamiento, enserio que los años te favorecen,Tony estás mejor que hace 5 años. Tu secretaria me dijo la clave de acceso.
-Esa mujer no comprende el significado de confidencial, en fin, ¿porqué estás aquí? ¿ No se supone que yo debería llamarte?
-¿Lo ibas a hacer?
-Tal vez si, tal vez no, ¿qué es lo que quieres? ¿Porqué remover el pasado?
- Qué fácil es para el señor olvidar el pasado, te dicen que te aman, lo ilusionas y lo botas, exactamente, ¿qué estuvo mal conmigo? ¿fuí un experimento para ti Anthony? ¿ O necesitabas a alguien que estuviera a tu altura?
Tony se quedó sin palabras,estaba claro que Stephen le guardaba rencor, eso no era lo que había sucedido, todo este tiempo... ambos se sentían abandonados, traicionados.
- Tuve miedo, tal vez si huí, pero cuando acepté mis sentimientos y te busqué, ya no estabas, te fuiste suponiendo... cosas, yo también las supuse. Pero vamos, ¡mírate! si te hubieses quedado no serías lo que hoy eres, lograste tus metas y...
-Las hubiese logrado a tu lado también, cuando no te ví a lado pensé que ya nada me detenía, mi padre consiguió una beca para mí, si tu me aceptabas me quedaría pero creí que...
- Tal vez nuestro destino es este. Bueno aclaradas las cosas, seamos amigos, retomemos nuestra amistad, ya sabes que aquí tienes una mano para lo que necesites.
- No Tony, yo no puedo ser tu amigo, te amo, incluso más que hace cinco años, tú también me amas, y voy a luchar por esto.
Tony no tuvo tiempo de contestar, Stephen se lanzó a él y lo besó, era un beso lleno de amor, de ternura, de pasión,  si Tony creía que ya lo había olvidado se equivocó porque disfrutó el beso, vaya que lo disfrutó.

Quedaron de verse al día siguiente para almorzar, cualquiera que pasaba por el lugar diría que eran dos viejos amigos poniéndose al día después de años de no verse, pero si ponían más atención se notaban las miradas y la coquetería entre ellos. Tony lo pensó y mucho, pero no podía ir por la vida escapando de sus sentimientos después de todo la vida misma los volvía a unir, una vez más se presentaba la oportunidad de ser feliz, no todos aman y son correspondidos, la gente hablaría si, después de todo era un Stark pero vamos, él quería ser feliz, no él sería feliz.
Pasaron dos meses llenos de bonitos recuerdos, cenas, conversaciones y Tony no podía ser más feliz, tenía miedo de dar el siguiente paso pero deseaba tanto estar íntimamente con su doctor así que decidió organizar una cena en el departamento que había adquirido para tener privacidad pues aunque ambos se amaban aún no hacían pública su relación, porque era más que obvio que eran más que amigos, y es que los amigos no se besan con tanta pasión,  los amigos no se desean, los amigos no compran un departamento ni duermen juntos.
Se dieron las diez de la noche, Stephen llegó con una caja de regalo para él, amaba a Tony y hoy le diría que formalizarán su relación entre ellos, que establecieran que eran novios, ya el tiempo dirá que viene después.
Cuando entró al lugar, la mesa ya estaba puesta, y Tony estaba vestido para la ocasión, le extrañó el comportamiento del genio pero bueno también disfrutó el gesto.
-¿A qué se debe la cena?
- Últimamente hemos estado muy ocupados en nuestro trabajo, la empresa absorbe mi tiempo y el hospital el tuyo, necesitamos un tiempo a solas, un tiempo para nosotros.
- Tienes razón, pero antes de cenar, tengo algo para ti.- Le extendió la caja de regalo, Tony lo tomó y al abrirlo se encontró con un hermoso reloj, digno de un hombre como él y una fotografía que dejaba ver a dos jóvenes, reconoció la foto de inmediato, la habían tomado en una feria, como Tony no las conocía, Stephen lo llevó en su cumpleaños número 20, en ella se veía a dos jóvenes enamorados, llenos de esperanzas.
- Vaya, aún la conservas, te pedí que me la enviarás para yo también tenerla. Es nuestra única foto juntos.
- Si así es, siempre la conservé,era la único que tenía de ti, y lo de la única foto juntos lo podemos solucionar ahora- dijo sacando su celular y pasando su brazo por el hombro de Tony, tomar una nueva fotografía.
-Ahora si la compartes, por favor.
- Claro, la compartiré con mi novio.
- ¿Somos novios?
-Anthony Edward Stark, ¿quieres ser mi novio?
Tony no podía creerlo, así que se puso de pie, se sentó en el regazo de Stephen de después de darle un casto beso, respondió a su propuesta.
- Stephen Vincent Strange, sí acepto ser tu novio, te amo.
- Ahora ponte el reloj, para que siempre recuerdes lo mucho que significas para mí.
Tony tomó el reloj entre sus manos, y al darle la vuelta se dio cuenta de la leyenda que traía grabada al reverso:
"SOLO EL TIEMPO DIRÁ CUÁNTO TE AMO" S.S.

Más allá del tiempo 💚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora