Tan solo era un niño que extrañaba a su madre y aun que Todoroki no lo entendiese por completo, sabía perfectamente que no podía odiarlo después de todo el pequeño quería que su carta llegara al cielo.
Mientras tanto el simplemente quería ver al a...
Lamento la demora pero con esto de las clases virtuales todo se puso patas arriba en fin espero y les guste....
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
“Y aún que mi mente me repetía que me alejara de ti, mi corazón no podía dejarte ir”
Una ciudad cubierta por la oscuridad y dos cuerpos abrazados a mitad de aquella fría y solitaria lluvia.
Dos corazones rotos deseando volver al pasado, volver amar. Y una mente que no olvida.
Fueron tantas las noches en la que Midoriya Izuku había soñado con ese momento, con sentir sus brazos, cobijar su nariz entre su pecho... compartir el dolor. El dolor de lo único que le hizo feliz.
—Izuku....estoy contigo.
Y entre el frío y los recuerdos, el odio que se hallaba en él regresó ahogando por completo aquel amor.
"Siempre estaré contigo"
—Mentiroso —susurro tratando de alejarse. —No quiero oír eso de ti, no de nuevo.
—Izuku cálmate, por favor.
—Sueltame. —Pronunció en un pequeño susurro, con voz quebrada y débil —Y-yo ya estoy mejor...
Mintió como hizo aquel día que decidió continuar, aquel en que aprendió a finjir no estar roto cuando en realidad lo estaba.
—No lo estas, yo lo lamento tanto. —No lo solto en ningún instante, sus brazos no querían soltarlo pero a la vez tenía miedo de romperlo aún más.
—¡Ya es suficiente! Deja de disculparte. Eso no lo traerá devuelta.... Solo olvida todo... Como ya lo hiciste simplemente continua. —¡Déjame ir! Por favor....
—¡No lo haré! /!Shuelta!
En ese instante la pequeña lucha terminó, en los ojos de Izuku se resbalaban pequeñas lágrimas mientras unos pequeños y delgados bracitos sujetaban el pie de Todoroki como si su vida dependiera de ello.
—No lashtimes a Izu-nissan — gritaba el pequeño Sho algo asustado.
Ambos adultos quedaron perplejos ante el actuar del pequeño, Sho parecía temblar tal ves por el frío o temor, no estaban seguros.
