Me bajé de Sasha y la guardé silenciosamente, eran casi las 2:00 am, Carlos ya debe estar dormido, abrí la puerta al lado de la cochera y me quité las botas para no hacer ruido, entré de punticas, todo estaba oscuro. Cuando me adentré la luz se encendió para encontrarme con una figura masculina, me asusté hasta que me di cuenta de que era Carlos.
EL: Hola idiota.... - silencio incómodo. Ok, ya esto me preocupa. -Ehm, yo me voy a dormir. - traté de evadirlo.
CR: ¿Dónde está mi ropa? - Ahh, estoy muerta.
EL: No se de que hablas.
CR: No te hagas la tonta. Sasha, ¿verdad? - no dije nada. - ¿En qué estabas pensando Elena Wildy!? - si me llama por mi nombre es porque en serio estoy en problemas. - ¿En serio estás endemoniada!? No lo hagas creíble, podías engañar a cualquiera que estuviera allí menos a mi! - entonces recordé que él estaba allí y yo no sabía que iría.
EL: ¿Y tú que hacías allí!? No sabía que te dedicabas a apostar en carreras callejeras! - él se sorprendió.
CR: No me cambies de tema! El problema aquí es que tú competiste ilegal en una carrera, vestida de chico y sin experiencia!
EL: El problema sería que tú también apuestas ilegal en una carrera callejera de motos! ¿De allí es de donde sacaste el dinero para comprarme la moto!? - mis ojos se cristalizaron, ¿por qué diablos siento un nudo en la garganta!? Él quedó mudo. - No tienes que hacer eso!! No era de urgencia la moto! Podrías meterte en problemas! μPor qué no me dijiste!? - ninguna de mis preguntas tuvieron respuestas. - ¿Sabes qué!? Puedes quedarte la moto, de ahora en adelante me compraré mis propias cosas ganando dinero como se debe! - me duele demasiado dejar a Sasha, pero no quiero ser la responsable de que mi hermano se meta en problemas. - Si no tienes nada más que decirme, voy a dormir.
Me dirigí a mi colchón y él hizo lo mismo, apagó la luz y se acostó. Pasé la puta noche pensando, es cierto que pude haberme metido en problemas, pero no me arrepiento de nada. Pero me preocupa Carlos, él no es así, al menos no lo conozco así, y si lo es, lo ocultó demasiado bien. No es necesario que haga esas cosas por mi! Es suficiente con lo que podemos conseguir con lo que tenemos. Por eso trabajaré duro para ayudarlo en las cosas que hacen falta. La universidad tendrá que esperar.....
(....)
EL: Hola Nick! Ya estoy lista. - entré al bar, lista para trabajar. Evité a Carlos toda la mañana.
NC: Hey L! Qué ojeras traes! - gracias por recordarlo.
EL: Nah! Ni tanto.
NC: Ok, si tu lo dices. Ponte el delantal, ya casi abrimos. Escúchame con atención!
EL: ¿Sí!?
NC: Nada de demonios aquí en el trabajo ¿Ok? - asentí. - No puedes beber! - asentí, ya me está aburriendo. - Se amable con los clientes aunque algunos sean groseros.
EL: Si! Nick, ¿ya basta Ok? Me portaré bien, necesito ese dinero.
NC: Vale, quisiera decir que confío en ti.... Pero no lo hago! Pero esta vez hazlo bien ¿Ok? - asentí.
(.....)
EL: Esto es pan comido. - dije soltando la bandeja sobre la barra.
NC: Q¿ué haces descansando!? - salté del susto, ¿de dónde salió!?
EL: Te pondré una campanita!
NC: En aquella mesa te necesitan. - sonrió falsamente.
EL: Amargado! - dije tomando nuevamente mi bandeja y colocando los tragos para esa mesa.
Caminé lo más derecha hasta allí. Coloqué los tragos y me dispuse a retirarme, pero me tomaron del brazo.
?: Hola preciosa! - una voz realmente asquerosa y fea. Al igual que de donde provenía. Me solté lo más amable posible del cliente pero me volvió a agarrar.
EL: Señor, necesito continuar trabajando. - mi paciencia se está agotando.
?: Pero puedes trabajar conmigo nena! - se levantó, con su enorme barriga y se acercó aún agarrando mi mano. Iu iu iu!!
EL: Estoy perdiendo la paciencia, será mejor que me suelte ahora.
?: Y si mejor nos vamos a la habitación de arriba. - wakala, su aliento es horrible.
EL: Suélteme!! - el tipo ofreció resistencia. Y yo trataba de soltarme de su agarre. Si usaba toda mi fuerza, podría meterme en problemas y en serio necesito el trabajo.
?2: ¿Dijo que la soltaras idiota!? - el cliente recibió un puñetazo en su fea cara. Qué! ¿Pensaron que vendría algún príncipe azul a rescatarme? Pues no, pero es mi príncipe verde, mi idiota favorito al rescate. - ¿Estás bien demonio? - asentí y me abrazó. Ok, esto es raro. ¿Desde cuando me abraza tanto!? - Perdón ¿Ok?
EL: Ehm, se vale que me dejes respirar, quiero seguir viviendo. - se separó.
CR: Mierda! Eso lo vio todo el mundo! - hice una mueca de comprensión. El gordo feo había salido corriendo y todos nos miraban.
EL: Vale te perdono, pero promete que no me ocultarás nada nunca más! Ah, y que no harás algo que te pueda meter en problemas.
CR: Eso último no lo prometo, tú siempre te metes en problemas. - reímos. - Lo prometo demonio.
EL: Gracias por salvarme idiota, aunque no lo necesitaba.
NC: Hey! ¿Todo bien por acá? Escuché ruidos.
EL: Llegas tarde Nick, te perdiste la mejor parte.
CR: Aquí no pasó nada! Pueden volver a lo que estaban haciendo! - habló con el resto de las personas. Nos retiramos y nos sentamos en la barra. - Hey demonio. - llamó mi atención. - No tienes que trabajar.
EL: Pero yo quiero.
CR: Pero no lo necesitas.
EL: Quiero ayudarte!
CR: No lo hagas. Yo prometí que cuidaría de ti y te haría feliz.
EL: Y lo haz hecho perfectamente, no me quejo. Pero necesitas ayuda.
CR: Mejor reúne para tu universidad, que del resto me encargo yo. - eso me sorprendió demasiado, ¿cómo demonios lo sabe? - ¿Qué? ¿Crees que no he visto como ves a los chicos que pasan por la gasolinera y se dirigen a la universidad? ¿O cómo te detienes frente a la universidad a verla solamente? Anda, sé feliz demonio, lo mereces. Trabaja por eso y no para mí. - me sonrió.
EL: Gracias idiota. - me invadía un sentimiento raro, era... ¿Tristeza? Y felicidad a la vez. Puse mis manos sobre las de él. - Gracias en serio.
CR: Ya! Espanta al demonio de la tristeza! Ese no es tu tipo!. - reímos. Tengo al mejor hermano del mundo. - Ah, y.... No necesito a Sasha, ya tengo a Fast! - ¿what!? - sí, no eres la única que tiene moto.....
Fin de este capítulo!! Gracias por leer! Dejen en sus comentarios que tal les parece, porfis!!! Voten!!! Los quiero!
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La chica de los mil demonios.
Teen FictionElena, la chica de los mil demonios.... No diré que es una chica normal, a la vista de todos es lo peor, a pesar de que la vida de Elena nunca fue fácil, por eso llegó a ser quien es hoy. Pero es más fácil juzgar por lo primero que uno ve y no se at...