1 año y medio después:
Debo admitir que si extrañaré un poquito este lugar, a Jade y sus locuras, aunque pronto saldrá también, fue la única persona que me acogió en este lugar.
Como dijo mi idiota, se demostró que fue en defensa propia y me rebajaron la condena.
Las rejas se abren frente a mi y el aire golpea mi rostro, y revuelve mi cabello. Tomó una gran bocada de aire y luego la suelto. Cierro los ojos para sentir la brisa y sonrío.CR: Demonio!!! - siento el grito de mi hermano y abro los ojos. Lo veo correr hacia mi sonriente.
Me carga en el aire y siento que necesitaba esto ya.EL: Te extrañé. - beso su mejilla.
CR: Y yo!! - me suelta y revuelve mi cabello, mala costumbre de su parte. - Vamos a casa. - me toma de la mano y comenzamos a caminar.
Casa..... Mi casa.... Mi hogar, eso que anhelamos tanto volver a ver después de haber estado lejos de allí.
(....)
Quiero pensar que todo fue un mal sueño, pero al entrar a apartamento me vienen imágenes de ese momento.... En el que apuñalé a ese hombre que me hizo perder la inocencia de toda niña.
Trago en seco y suspiro, para que Carlos no lo note, sonrío.CR: Ha cambiado un poco, pero sigue siendo tu hogar. - si es cierto, cambió los colores y uno que otro mueble nuevo.
EL: Carlos.... Y.... Antonio? - bajé la cabeza, no quería, pero tenía que preguntar.
CR: Deberías haber preguntado antes. - dudó en si responderme o no. - Se fue. - mi pecho se apretó un poco al escuchar eso.
EL: ¿Qué? ¿A dónde fue? - me alteré un poco.
CR: Le llegó un contrato de trabajo en el exterior, hace ya varios meses. No quería irse, pero como le dijiste que no querías verlo, lo vio como una buena manera de despejar un poco, y no pensar tanto en ti. Así que se fue. - las lágrimas que contuve todo este tiempo abandonaron mis ojos y caí sentada en el sofá.
Se fue.... Se había ido, quien sabe a dónde.... ¿Quién sabe que estará haciendo ahora? Si conoció a alguien más..... Si ya es feliz.....
Eso era lo que tu querías.
Me repetía mi estúpida mente una y itra vez.... Si quería que fuera feliz pero ahora me cuesta aceptarlo.
Carlos se sentó a mi lado y puso su mano en mi hombro, yo me viré un poco para abrazarlo y llorar.
Llorar como nunca lo he hecho. Él solo pasaba su mano por mi cabello varias veces.EL: ¿Sabes dónde está? - dije e tre sollozos.
CR: Si, pero será mejor que no lo sepas. Él no sabe que saliste ya.
EL: Quiero darle la sorpresa, pedirle perdón por haberlo echado ese día en la cárcel. Por favor - me separé de él. - Dime dónde está.
CR: Elena. - suspiró y yo le hice ojitos. - Está en California. La dirección está en mi cuarto en la mesita, por favor no cometas una locura.
EL: Uy si, muchas locuras. - sequé mis lágrimas y corrí hasta el cuarto de Carlos a por la dirección, tomé el trozo de papel y volví.
CR: No quisiera que te llevaras una decepción, ¿por qué no esperas a que te llame?
EL: Porque quiero darle una sorpresa, y si lo llamo no es una sorpresa, porque ya sabrá que estoy libre. - le guiñé el ojo.
(......)
Recogí dos mudas de ropa en una mochila y saqué un boleto a California, son unas 2 horas de camino, pero todo lo vale por él. Estoy feliz porque lo volveré a ver.(.....)
Aquí estoy, a tan solo unos minutos de volver a verlo, jamás pensé que podría aguantar tanto tiempo sin él.
Bajé del autobús y la primera imagen que me llevé de este lugar fue Antonio..... pero no está solo.... ¿Quién es ella? La mirada se me perdió por un segundo y sentí mi corazón acelerarse, una sensación de molestia me recorrió y todo ese deseo que tenía de verlo se esfumó.
Como se sonreían mutuamente, ella es tan linda y tan normal, la típica chica perfecta, la que él se merece... Logró ser feliz sin mi.... Eso no me hace feliz, y debería, porque yo quería que lo fuera sin mi.....
Pero ahora me doy cuenta que yo dependo de él, que ya no soy nadie y no está a mi lado, es como si hubiera perdido mi esencia.....
Lo vi voltear hacia donde yo estaba, ya que iba a comprar algo, tal vez reaccioné tarde, pero por lo que me dio fue voltear y caminar tratando de alejarme lo más posible.... Si ya es feliz yo no pinto nada aquí.AN: Hey! Chica! - esa voz.... Al parecer me siguió - Se te calló la bufanda.
Puse una mano cubriendo ligeramente mi cara, el no es tan idiota, pero tenía la esperanza de que no me viera. Estiré mi mano para tomar la bufanda.
AN: ¿Está bien? No pareces de acá, más bien, pareces una vagabunda. - mi corazón palpitaba aceleradamente, lo que me llevó a quitar lentamente mi mano de la cara y encontrarme con esos hermosos ojos negros, y una sonrisa se posó en su boca. - Hola, vagabunda.
Hubo un silencio por mi parte, solo me limitaba a mirar esos ojos en los que me he perdido tantas veces.
AN: ¿Te comieron la lengua en la cárcel?
EL: Ho...hola. Me tengo que ir. - volteé para retirarme y me tomó del brazo para estrellarme contra su pecho en un abrazo, eso que tanto necesitaba, pero mi mente estaba tan bloqueada. - No quiero interrumpir tu buen momento. Me debo ir. - me separé.
AN: ¿De qué hablas? - miré a la chica quien estaba sentada de espalda a nosotros. - Ah ella, es Katie, una amiga, trabaja en el mismo centro que yo. Está casada y tiene 2 hermosos hijos, y es rubia, no es mi tipo, a mi me gustan las rebeldes con pintas de vagabunda que se cambian detrás de un arbusto y tienen unas bragas increíblementes sexys, ah y muy importante, el cabello morado, ah y también que derramen jugo encima de un costoso traje. - reí, no puedo negar que recordar todo eso hizo que me hiciera gracia. - Allí está.
EL: ¿Qué?
AN: Esa sonrisa que tanto me gusta. - nos sonreímos mutuamente para luego abrazarnos. Cerré los ojos en su pecho.
EL: Ahora si siento que estoy en casa. - suspiré.
AN: Te extrañé.
EL: Perdóname. No sabes cuanto me arrepentí de haberte echado, nada de lo que dije era verdad. - me separé para mirarlo. - Yo te amo. - sus ojos comenzaron a brillar y una expresión de sorpresa y alegría se veía en su rostro. Me envolvió en otro abrazo.
AN: ¿Sabes cuánto tiempo he esperado esto? Sabes cuanto extrañé tu todo.
EL: Pensé que estarías feliz con alguien más.
AN: Tu eres mi pasado, mi presente y mi futuro, no hay nada después de ti. Solo soy feliz a tu lado. Eres mi chica de los mil demonios y no te cambiaría por nada.
En ese momento sentí que no me faltaba nada más, mi vida tomó nuevamente su rumbo. Él volvió y yo no pienso irme jamás, ahora me toca a mi hacerlo feliz..
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La chica de los mil demonios.
Novela JuvenilElena, la chica de los mil demonios.... No diré que es una chica normal, a la vista de todos es lo peor, a pesar de que la vida de Elena nunca fue fácil, por eso llegó a ser quien es hoy. Pero es más fácil juzgar por lo primero que uno ve y no se at...