❝ 𝒟 𝐸 𝒜 𝑅 𝐿 𝒪 𝒱 𝐸 ⚘ 𝒦 𝐼 𝐻 𝒴 𝒰 𝒦 ❞

Just a kiss

- Es por eso que Minnie está conmigo.

Finalizó Minhyuk, notando como a su amigo se le achicaban los ojos por tan agravada catástrofe; Una chica que Minhyuk recién conocía, a la cual no le quedaba nadie en el mundo, sin duda una tétrica e inusual situación, algo que nadie desearía vivir.

- Pero ella... ¿Cómo está? —La incógnita de WonHo, hizo a Minhyuk suspirar, llevándose las manos a los bolsillos por tan fría y escandalosa noche. — Ella va poco a poco, es una chica fuerte, pero en ocasiones se quiebra.

- Pero te tiene a tí, y eres de ayuda.

- ¿Tú crees?

Hoseok asintió en cuanto a esa pregunta, creando un silencio extenso a continuación, un silencio casi eterno esa noche, un silencio donde solo se escuchaban dos respiraciones y un viento desgarrador arrasar contra las ventanas.

El mayor miró un momento la luna encima de ellos, sonriente, sintiéndose cómodo mirando las estrellas siendo acompañado por nadie más que Minhyuk.

Recuerdos pronto vinieron a su cabeza: el día en que lo conoció, el día en que descubrió el amor, ese día en que también temió por su vida, cuando su madre encontró un dibujo "comprometedor" para Minhyuk, el día que pidió estar muerto, pero una sonrisa enorme lo arregló.

Lee Hoseok viajó al pasado en ese presente, sintiendo a su corazón latir como la primera vez, sintiendo que sus sentidos no eran suficientes para detenerse últimamente, y es que llevaba tantos años enamorado de él que estaba muriendo.

Aún recordaba cada aventura, cada salida, cada abrazo, risa y sonrisa, Hoseok recordaba cada momento vivido con Minhyuk como la primera vez, lo atesoraba tanto, lo amaba tanto, que ni Dios mismo podría jurar ver un amor tan inmenso como ese.

- Se... Se está haciendo algo tarde ¿No?

La cálida voz de Lee Minhyuk lo trajo de vuelta, moviendo la cabeza en un ligero asentir para luego girar su vista al chico que concentrado miraba las estrellas.

- ¿Deberíamos volver dentro?

Hoseok negó, mostrando una sonrisa cuando los ojos que miraban las estrellas fueron a él, sonriéndole con tanto amor que Lee Minhyuk no lo soportó, soltando una risa suya, estúpida y fugaz, extraña, como solía ser últimamente.

- ¿Te ries de mí?

- No, Hyung.

- ¿Entonces?

Minhyuk volvió a reír, acercándose un paso más a su mejor amigo sólo para poder mirarlo mejor, clavando esas canicas suyas, brillantes y únicas en el rostro del mayor.

- ¿Recuerdas a la chica que te gustaba en preescolar?

Hoseok asintió, recibiendo otra risa antes que una respuesta.

- Me miras como la mirabas a ella.

Helado, Lee Hoseok permaneció helado apenas oírlo, parpadeando un par de veces en lo que intentaba asimilar aquella información.

¿Entonces? ¿Minhyuk notaba sus miradas? ¿Y si lo hacía... por qué era tan difícil que captará sus sentimientos?

- Pero luego me dijiste que lo que te llamaba la atención de esa novia tuya en el prescolar, eran las tantas pequitas en su rostro, lo que me hace pensar... ¿Tendré yo algo en el rostro?

- ¿Qué?

Minhyuk carcajeo por tercera vez al notar tanta confusión en su colega, decidiendo suspirar mientras le obsequiaba un par de palmaditas en la espalda.