Los Merodeadores (Remus Lupin y tú) [COMPLETA]

Hombre lobo

Aunque me había permitido el ausentarme durante una semana, volví a Hogwarts al día siguiente y seguí con mi día a día como si no hubiese pasado nada, aunque durante las clases estuve despistada y Altaír me llamaba la atención.

Los días pasaron deprisa y por fin estamos a sábado. Adoro los fines de semana por muchos motivos, aunque el principal es dormir como una nutria agarrada a mi almohada.

-¿No tienes pensado levantarte? -pregunta Rowan-. ¿No crees que volviste demasiado pronto?

Me levanto, desperezo y, mientras me visto, hablo con mi amiga.

-Volví cuando tenía que volver. No quería estar lejos de mis amigos más tiempo del necesario.

-Pero esta semana no te acercaste a nadie... ni siquiera dejaste que nos acercáramos a ti.

-Solo estaba poniendo mi cabeza en orden -explico-. Bueno, más bien estuve pensando...

-¿En qué? -pregunta mi amiga.

-En algo que Pettigrew me dijo antes de irme.

Salimos de la habitación pero no nos molestamos en ir al Gran Comedor porque ya ha pasado la hora del desayuno.

-Podemos buscar a mi Pet -propone Rowan-. Supongo que Lunático está con él.

-¿Desde cuándo les llamas por sus apodos? -pregunto riendo-. Pasas demasiado tiempo con ellos.

-Tú también deberías pasar más tiempo en compañía. Deja de lado tus libros y no te mates tanto en estudiar.

¡JAJAJAJAJA, AY QUE CHISTE! A veces olvido que nadie sabe que Altaír me acompaña la mayor parte del tiempo. Por cierto, ¿dónde está?

Altaaaaaaír... ¿dónde estás?

Le veo sentado en un flotador en medio del lago con un bañador naranja y una camiseta hawaiana de flores amarillas, verdes y celestes.

¿No tienes frío?

-Los fantasmas no sentimos frío -responde.

¿Pero sí pueden emborracharse?

-Más bien puedo hacer y sentir lo que quiera con solo pensarlo. Si no quiero tener frío, no lo tengo; si quiero pillar una cogorza, la pillo; si quiero comer, como. Es así de simple.

-Mira, están ahí arriba -Rowan señala en dirección al sauce boxeador.

Caminamos hasta ahí dejando a Altaír atrás. Al llegar ella saluda con un "hola" y, como la mayoría de parejas, saluda a Pettigrew con un beso.

-Bienvenida al mundo -dice Black dándome unas palmaditas en el hombro.

-No seas pelma -dice Potter.

-¿Te quedas con nosotros o te vas de nuevo con tus personajes ficticios de los libros? -pregunta Black.

Potter le da un sopapo a su amigo y un codazo a Lupin.

-Quédate -dice el rubio con una sonrisa forzada.

Me siento a su lado apoyada en el muro y mientras la parejita se da cariñitos y Potter y Black juegan, nosotros nos quedamos en un silencio algo incómodo que se rompe en cuestión de segundos.

>>Necesito hacerte una pregunta.

-Soy todo oídos.

-¿Colagusano te dijo algo sobre mí? -pregunta casi en susurro.

-Sí -respondo.

-¿Y le crees?

-No me creo nada que venga de él. Y si es verdad lo que dijo, me parece un traidor -miro de reojo a Petrigrew haciéndole cariñitos a mi amiga-. Voy a potar -Lupin se ríe.

-Que sepas que es verdad -dice volviendo a estar serio.

-¿El qué? -pregunto confundida.

-Que soy un hombre lobo -me susurra al oído.

Me quedo callada asimilando esa afirmación. Sinceramente, no confiaba en que ese crío de Pettigrew dijera la verdad.

>>Entiendo que quieras alejarte de mí.

-No seas tonto -le cojo la mano.

-¿No tienes miedo?

-¿Del chico más dulce del planeta? -levanto una ceja sacándole una sonrisa.

-De lo que no puedes ver -responde.

-Si no puedo verlo, ¿para qué temerlo?

-La gente suele escapar de las personas de mi condición -dice apenado.

-Tengo cierta atracción a lo desconocido -digo.

-¡AHORA UN BESO! -escucho gritar a Altaír, que está subiendo por la colina con un gorro de paja, chancletas y un cóctel en la mano.

¿¡PERO CUÁNTO HAS ESCUCHADO!?

-De tu mente siempre escucho todo -responde-. Conque un hombre lobo... ¡eso mola! Cuando tengáis hijos será como tener mascotas con tu ADN.

No seas cruel, capullo descerebrado.

-Mira quién habla, lagarta culo gordo -dice Altaír riendo.

-No te dije nada de esto antes por miedo a perderte -dice Lupin.

-A mí nunca me perderás. Te lo prometo.

Se va acercando a mi rostro lentamente y con aparente duda, pero algo le detiene cuando está a punto de rozar mis labios. Cuando giramos la cabeza mirando al frente, vemos a Rowan, Potter, Pettigrew y Black viéndonos fijamente. Eso sin olvidar a Altaír que está detrás de ellos sujetando una pancarta que pone "Mil años más tarde...".

>>Mierda... -susurro.

-¡Ya casi estaba! -dice Potter.

-Os dije que nos teníamos que poner más lejos -dice Rowan.

-¿Podéis besaros ya? -pregunta Black.

-¿No tenéis nada mejor que hacer? -pregunto.

-La verdad es que no -responde Black.

-¿Ya sois novios? -pregunta Pettigrew.

-No -respondemos a la par.

-¿¿¿CÓMO QUE NO??? -grita Altaír.

Pues no. No creo que sea el mejor momento con tanto público.

Los cuatro se van riendo de la escena y de nuestras caras coloradas mientras que nosotros nos quedamos atrás.

-Cortarrollos -digo susurrando.

-La próxima vez hablaremos en un lugar lejos de ellos -dice Lupin levantándose-. ¿Vienes?

-Ve yendo. En seguida te alcanzo.

-¿Vais a quedar los dos solitos? -pregunta Altaír sentándose en frente mía.

La pregunta es dónde. No conozco ningún lugar en el que se pueda estar tranquilo.

-El bosque.

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He de decir que estoy gratamente sorprendida por lo mucho que está gustando este fanfic. 😊