call me baby » larry stylinson «

1.

-¡Vamos Daisy, vamos a llegar tarde! -Gritó Louis por el pasillo a su hermana menor. Phoebe estaba sentado en la escalera, su hermano se arrodilló frente a ella, atando sus zapatos. La gemela de cuatro años de edad, se precipitó por el pasillo, corriendo hasta detenerse delante de sus hermanos, dejando caer su mochila en el suelo. Louis hizo el nudo final en el zapato de Phoebe, antes de recoger a Daisy y ponerla en la escalera. Ella tarareaba alegremente.

-¿Lou?

-¿Si, amor?

-¿Nos gustará más nuestra nueva escuela, que a Lottie la de ella? -Louis frunció el ceño.

-Lottie solo tiene problemas de ajuste, preciosa. Ella va a estar bien, y ustedes van a amar su nueva escuela. Escuche que el maestro es muy, muy agradable.

Él le sonrió y le besó la nariz. Ella se rió antes de saltar y agarrar su bolso. Saltó hacia su hermana y le agarró la mano. Phoebe la miró y sonrió un poco, antes de que las dos saltaran por la puerta juntas. Louis sonrió con cierta tristeza a sus dos hermanas. Eran demasiado jóvenes para entender, por suerte.

Alice apenas lo hizo, como ella tenía sólo seis años, pero fue suficiente para que de vez en cuando fuera a la cama de Louis llorando por la noche. Pero Felicity y Lottie eran las peores. Fizzy tenía ocho años, así que sabía que mamá y papá no iban a volver, que no eran sólo en unas vacaciones muy largas. Lottie estaba pasando el peor momento de todos, sin embargo. Tal vez incluso peor que Louis, porque al menos tenía a las niñas para centrarse. Lottie tenía diez años, y ella estaba teniendo un tiempo terrible en la escuela. Volvio a casa todos los días de mal humor, se fue a su cuarto y no salió hasta la hora del té. Después de la cena, estaba de vuelta en su habitación, hasta que después de apagar las luces. Louis se había despertado en múltiples ocasiones por su llanto. Le devastó ver a su hermana pequeña tan herida. Había ido hacia ella, frotando su espalda y susurrando cosas reconfortantes en su oído hasta que se sumió en sueño de nuevo. Louis estaba casi a su punto de ruptura con toda la presión que viene con la crianza de cinco chicas jóvenes por su cuenta. En los cuatro meses transcurridos desde el accidente, se había mudado a un pequeño pueblo de Cheshire, llamado Holmes Chapel. Louis había necesitado un lugar tranquilo que podía llevar a sus hermanas, en algún lugar seguro, con buenas escuelas y puestos de trabajo. Lottie, Alice, y Fizzy habían estado en la escuela durante casi un mes, y hoy era el primer día de Daisy y Phoebe de preescolar.

Daisy salió corriendo hacia el coche, tirando de ella, a su gemela. Después de la mudanza, las personalidades Daisy y Phoebe habían llegado realmente. Daisy se volvió mucho más sociable, y muy sobreprotectora de su hermana gemela. Phoebe se volvió tímida, y siempre escondida detrás de Daisy, o la pierna de Louis. Pero, sobre todo, había traído que las dos niñas ya casi fueran inseparables. Ahora dormian en la misma cama, jugaban juntas, y siempre juntas a todas partes. No había forma que las separan.

Louis abrió la camioneta con la llave a distancia, la puerta se abrio automáticamente. Levantó la Daisy hacia arriba, colocandola en su asiento, antes de hacer lo mismo con Phoebe. Cerró la puerta y se metió en el asiento del conductor, siguiendo las instrucciones del GPS. Escuchaba distraídamente a Daisy y Phoebe charlando ociosamente en el asiento trasero, centrándose más en llegar a la escuela a tiempo.

Se detuvieron a un edificio ancho, de ladrillo rojo, que parecía que sólo tenía un nivel. Después de aparcar el coche, Louis extrajo a las gemelas de sus asientos del automóvil. Con cada una en una mano, se abrió camino hacia la zona de recepción. Phoebe miró a la mujer detrás del mostrador e inmediatamente comenzó a gemir, aferrándose desesperadamente a la mano de Louis. Él suspiró, inclinándose y recogiendo en sus brazos, lo que le permite acurrucarse contra él y ocultar el rostro en su camisa. Incluso Daisy parecía un poco nervioso cuando se acercaban a la dama sentada mirando frente al ordenador. Se aferró con fuerza a la pierna del pantalón, medio escondida de cualquier monstruosidad. Louis se inclinó un poco más cerca, inconscientemente apretando su agarre sobre Phoebe cuando la mujer levantó la vista.

-Hola, inscribí a mis hermanas aquí hace unos meses, Daisy y Phoebe Tomlinson. -La mujer miró, Sheila, segun su etiqueta, con severidad hacia él antes de hacer clic unas cuantas cosas en el equipo.

-¿Cuatro años de edad? -Preguntó.

-Así es.

-El Sr. Styles es su maestro. Gire a la izquierda en la puerta de allá, entonces es la primera puerta a la derecha. -Ella punta una uña larga y cuidada en una puerta azul detrás de él. Él asintió con la cabeza y le dio las gracias, corriendo a lo largo entando Daisy detrás de él. Al abrir la segunda puerta, vio a un hombre joven hablando con una niña pequeña. Él era el único que estaba allí, así que Louis decidió preguntarle si sabía dónde estaba el profesor. El cabello de la joven era rizado y castaño, y cuando miró a Louis, sus ojos eran de un verde sorprendentemente claro. Louis se aclaró la garganta nerviosamente.

-¿Sabes dónde está el señor Styles? -El hombre de ojos verdes sonrió.

-Se encuentra frente a él. Harry Styles.