Estaba sola en el pequeño despacho. Sentía su cuerpo pesado, sus ojos se cerraban solo por inercia. Además, su garganta picaba ligeramente. Aquella mañana había sido odiosa. El primer periodo largo de vacaciones entre clases se acercaba y los alumnos estaban alborotados. Hacían ruido en clase y no la dejaban cumplir bien con el tiempo de clase, ni la administración de esta. Su garganta había sufrido demasiado al tener que hablar por encima del murmullo de la clase para que los alumnos le prestaran atención. Llevo una de sus manos a su frente, masajeándola débilmente, mientras que comprobaba la hora. Pronto terminaría el periodo lectivo y podría retirarse a su casa. Su cuerpo le estaba pidiendo regresar a su cama y dormir. Descansar hasta sentirse mejor.
Chequeó los mensajes de su teléfono. Tenía varios mensajes de sus amigas. Habían estado hablando por su grupo privado. Desde que había hablado con Chaewon acerca del sueño, todas estaban buscando una fecha cercana en la que pudieran quedar. Como siempre, Ryujin era la que más problema tenía para encontrar un día libre. No quería distanciarse de sus amigas. Habían sido su gran apoyo y sabía que nunca querría a nadie como a esas tres. Pero si tenía que elegir entre su novia y su hija o sus amigas. La respuesta estaba clara, y ellas lo entendían y respetaban.
Aunque se notaba que todas necesitaban hablar.
- Te voy a llevar a tu casa hoy - habló Taemin asustándola.
Soojin miró hacia su antiguo profesor de inglés. No se había dado en qué momento había entrado por la puerta de su despacho y, de hecho, ni siquiera se había enterado bien de lo que este le había dicho.
- ¿Qué?
- Que hoy te llego en coche a tu casa.
Su gesto se deformo en una mueca agridulce, no quería que la llevase a su casa. No era ninguna niña. Además, su casa no quedaba lejos, y ella sentía que un pequeño paseo, sentir el viento en la cara, quizás la podría ayudar a sentirse mejor. A refrescarse.
- Pero...
- Soojin, estás enferma - se quejó Taemin -. Tienes una cara horrible, y ni siquiera te das cuenta de lo que pasa a tu alrededor. Parece que te vas a desmayar en cualquier momento.
- Eso no es verdad - aunque mentía. Lo era.
- ¿Segura? Sí que sois parecidos tu hermano y tú, malditos hermanos Seo - se quejó.
Sabía por qué lo decía. Recientemente, Kai había tenido que pasar la noche en casa de Taemin. No porque quisiera, sino porque se había hecho el fuerte, y había terminado desmayado allí. Él tuvo que llamar a la mujer de Kai para explicarle la situación. Ella agradeció que cuidase de él, ya que Kai cuando enfermaba era como un bebé grande, a veces quería mimitos pero era demasiado orgulloso. En su casa, ya la pequeña Yoojung estaba un poco enferma. Así que, ella, estando embarazada, no negaría ninguna ayuda posible que facilitase su situación.
- Estoy bien - habló de nuevo.
Su voz había sonado gangosa y débil. Taemin solo la miró en silencio, con una ceja arqueada. Incapaz de no comparar a ambos hermanos. Kai también había jurado y perjurado que se encontraba perfectamente antes de haberse desplomado sobre él. Literalmente. Taemin agradeció en ese momento, que ambos estuvieran cerca del sofá porque no, él no tenía la suficiente fuerza como para sostener el peso muerto de su amigo.
- Puedo avisar a alguna de tus amigas, para que vaya a cuidarte - le volvió a decir -. Creo que tengo el número de Chaewon por aquí - comentó mientras zarandeaba su teléfono.
- ¿Por qué tendrías su número? ¿Y por qué vendrían? Son personas ocupadas - se quejó -, y yo no necesito de nadie que me ayude. Puedo cuidarme solita.
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good, good woman [SooHua]
Fanfic------CANCELADA------ [ellas tenían un pasado en común, ahora, ella se había convertido en una buena mujer ahora, ella tenía alguien de quien cuidar, alguien por quien mejorar... ...