Pétalos Rojo Sangre//Twisted Wonderland//Completa

Capítulo 16

Narra Hana

-Ace: Por cierto, líder de dormitorio - le llamó - ¿Hay alguna forma de... ya sabe... quitarme este collar? - preguntó poniendo su mejor cara de perrito mojado.

-Riddle: Lo haría si hubieras aprendido la lección, pero debido a la manera en cómo me llamaste eso solo demuestra que no lo has hecho en absoluto. A sí que te quedarás así por un tiempo más - sentenció.

-Hana: ¿No cree que eso será perjudicial para sus clases? - le pregunté lo más amablemente que pude.

-Riddle: No tiene de que preocuparse, dado que a los alumnos de primer año sólo aprenden los conceptos básicos, no le será necesario la magia. Así no podrá meterse en más líos ¿no lo crees? - cuestionó con una sonrisa socarrona, después volvió a su postura firme mientras extendía su brazo - ahora no pierdan el tiempo en charlas, terminen su almuerzo y diríjanse a su próxima clase. Regla número 271 de la reina de corazones: "Uno debe almorzar y dejar su asiento en quince minutos". Si rompes esas reglas... Estoy seguro de que ya lo sabes - dijo con una sonrisa maliciosa que hizo que un escalofrío recorriese mi espalda.

-Ace: Otra regla extraña - susurró cansado haciendo que la sonrisa de Riddle se esfumase.

-Riddle: La respuesta es "¡Sí líder de dormitorio!" - dijo fuertemente con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

-Ace/Deuce: ¡Sí líder de dormitorio! - exclamaron a la vez.

-Riddle: Muy bien - contestó orgulloso volviendo a sonreír.

Me fijé en el ambiente incómodo que se había formado a nuestro alrededor. Las caras de los estudiantes (especialmente las de Heartslabyul) estaban llenas de miedo y preocupación y entre ellos se susurraban preocupados.

-Trey: Descuida Riddle. Yo los cuidaré por ti - dijo con una sonrisa tranquilizadora.

-Riddle: Eres el sublíder, Trey, así que no me decepciones - le advirtió algo más calmado - Regla número 339 de la reina de corazones: "Después de una comida siempre se debe tomar té de limón con dos terrones de azúcar". Debo ir a comprar más terrones de azúcar a la tienda, así que seguiré mi camino - al decir eso se dio la vuelta para seguir su camino.

Pero en ese momento escuché un goteo que hizo que mi cuerpo se tensase, no era la primera vez que lo escuchaba y nunca fue un buen augurio, empecé a inspeccionar con la mirada toda la cafetería buscando el origen del sonido hasta que mis ojos se posaron en el joven de cabello rojizo, había algo raro en su aura, algo no estaba bien y tendría que hacer algo.

-Deuce: ¿Hana? - preguntó al ver la tensión de mi cuerpo, todos se giraron a verme con una ceja levantada.

-Riddle: ¿Tienes algún problema conmigo? - cuestionó en un tono frío al darse cuenta de que lo estaba mirando fijamente.

-Hana: Emm... - pensé alguna excusa para desviar la atención y llevé mi mano a mi ojo y comencé a frotar un poco - creo que se ha metido algo en el ojo, nada más - contesté con una pequeña sonrisa intentando desviar la atención, él estrechó su mirada, se giró y se fue - hace mucho que no sentía tanto miedo - susurré colocando mi mano en mi pecho.

-Cater: Eso estuvo cerca - suspiró aliviado rascándose el mentón.

-Grim: Ese tipo es muy desagradable - añadió molesto.

-Hana: Se más amable - le regañé dándole un golpecito en la nariz, por alguna razón Riddle me recordaba a mí cuando llegué a la base, obsesionada con la reglas hasta tal punto que era tóxico, en mi caso porque tenía miedo de recibir un castigo o peor ¿qué sería lo que le causaba tal adicción a seguir las reglas? Algo bueno no sería, seguro.