•𝓐𝓻𝓻𝓲𝓫𝓪 𝓭𝓮 𝓵𝓸𝓼 𝓮𝓼𝓬𝓮𝓷𝓪𝓻𝓲𝓸𝓼 • Wos

29

Octubre de 2018.

Valentín

El característico tono del celular de Mavi resonó en mi sala. Había ido al estudio ya que extrañaba la cotidianidad de su vida y a sus alumnos.

Creí que se había dado cuenta de que se lo olvidó y me llamaba desde donde estaba. Por lo que, atendí sin siquiera ver el número.

—Te lo olvidaste amor—avisé esperando a escuchar su voz.

—¿Amor?—pero la voz de mi novia no fue la que oí. Separé el aparato de mi oído y al leer "ma❤" en la pantalla una sensación de calor inundó mi cuerpo arrepintiendome totalmente de lo que acababa de decir.

—Eh... hola, Mavi no está—dije una vez que tomé coraje para volver a la llamada.

—¿Valentín?—la voz de mi suegra se hizo presente.

—Hola Marina, ¿todo bien?—mi tono avergonzado me delataba.

—Hola corazón, todo bien por aca, ¿está Mavi?—ella sonaba amigable.

—No, Mav no está, pensé que eras ella porque se olvidó el celular en mi casa—expliqué.

—Sonas raro Valen—comentó entre risas—¿Ya sos el novio?—me sacó la ficha.

—¿Fui muy obvio?—terminé de delatarme.

—¡Ay que felicidad! Yo sabía que tarde o temprano lo iban a ser—sonaba más feliz que antes—Se les notaba en las caras torombolos—dijo con ternura.

—De ahí Mav sacó ese apodo—hablé recordando que a veces me llama así.

—Mavi es mi torombolita, y ahora vos sos su torombolo, son mis torombolitos—ahora se la notaba emocionada.

—Si, dimos un paso. Un gusto volver a escucharla...—pensé en si llamarla Mari o Maru porque había uno que no le gustaba y Mav me había dicho que si la llamaba así me iba a linchar.

—Maru, ni se te ocurra decirme Mari o suegrita porque te doy un sopapo—amenazó haciéndome soltar una carcajada.

—Que gusto escucharla Maru, no nos vemos desde agosto—

—Podes tutearme Valen, no me molesta—acotó—Para mi también es lindo volver a saber de vos. Llamaba para algo especial y creo que vos le podes decir a Mav mi idea. No sé que te parece a vos, en un primer lugar era para decirle a Mavi porque no sabía de lo suyo, pero ahora que me decís que están juntos y que da la casualidad de que atendiste vos a mi llamado, quería saber si quieren y pueden venir a Gesell unos días, a mi me haría re feliz volver a verlos, hace ya unos meses no veo a mi hija y bueno, la extraño—una felicidad repentina apareció en mi pecho al saber que Marina tenía intensiones de conocerme más.

También me ponía re feliz que aceptara nuestra relación, Mavi decía constantemente que la extrañaba y que era su persona favorita en el mundo. Y lo decía con total argumento, en todo momento pensaba en su mamá, es algo tierno que me gusta de ella.

—A mi me encantaría Maru, gracias por la invitación. Por parte de Mav no creo que le moleste, de hecho, también hace unos días habla mucho más de usted, al parecer ambas se extrañan—