Pov Hiccup.-¡Hiccup! ¡A desayunar!
"Ahg necesito dormir"
"Maldita sea, solo quiero dormir"
-Veo que tú también no te despertaste con ánimos -sonreí inconscientemente mientras miraba hacia arriba.
Me alisté para poder bajar y notar a mi amigo sentado en la mesa listo para comer junto a mi madre. Realmente no me sorprendía, Jack se la vive más en mi casa que en la suya; hasta mi mamá lo considera más su hijo que amigo mío.
-¿Van a ir hoy a la preparatoria? -pregunto mi madre mientras seguía comiendo.
-Así es, tenemos entrenamiento. -respondió Jack devorando la comida de su plato.
-Me pondré demasiado triste cuando vuelvan a la escuela. Ya será su último año de preparatoria y mis dos tesoros se irán lejos, no tendré quienes me limpien la casa.
Minutos más tarde Jack y yo ya nos encontrábamos en la puerta mientras se despedía de mi madre diciendo que cuidaría de mi.
-¿Y que tienes en mente bobo? ¿Alguna buena universidad en mente? -dijo caminando por la acera de enfrente intentando no caer.
-Aún no, tal vez mande mi carta a Claramont o Hollyway. No estoy tan seguro. -suspiré.
-Oh vamos hermano, tu no necesitas mandar ninguna carta; las cartas de las mejores universidades de país te lloveran deseando que estés en su campus.
-¿Y que harás tú?
-Sabes, no mandaré ninguna carta. Todos sabemos que al fin de año viene un cazatalentos en busca de jugadores estrellas, y es ahí donde entro yo.
Toda mi vida he admirado a Jack; con tan sólo relajarse logra sus objetivos. Ojalá todo fuera así de fácil para mí hacerlo. Llegamos a la escuela para poder ir a los vestidores y después a la cancha e iniciar nuestra calentamiento.
-Hoy volví a escucharla en la mañana, es un ángel cuando despierta. -dije corriendo a lado de Jack.
-¿Un ángel? Siempre dices que maldice cada vez que despierta. En cambio la mía si es un ángel; pareciera que desayuna felicidad. Cada pensamiento que escucho de ella son algodones y azúcar.
-Bueno, tal vez tengas razón de que nunca despierta "amable" si se puede decir, pero estoy seguro de quién es.
-¿Sigues aferrado a la idea que es Astrid? Ya olvídala Hiccup, en ningún mundo paralelo ella te hará casó. -bufó.
Tal vez había estado enamorado de aquella rubia, toda mi vida realmente. Pero ¿eso estaba mal? Tal vez me haya rechazado hace algunos años pero nada cuesta soñar que ella es la indicada.
-¡Dejen de parlotear como señoras y corran jóvenes! -nos grito el entrenador.
-Solo vela, cada pensamiento que me llega la describen tal y como es. Estoy seguro que es ella, ¿Quien más podría ser? -mencioné decidido. Cuando terminamos de correr alrededor de todo el campo, mi mirada se perdió entre las porristas que se encontraban practicando junto a nosotros; pero únicamente tenía la mirada sobre una chica.
-Si, si, lo que digas, pero, ¿Astrid? Vamos hermano, si tú conciencia no es estúpida debe recordar cuando te rechazó. ¿Recuerdas? Tercer año de secundaria, canchas, baile de San Valentín. -dijo con un semblante obvio.
-Pero ahora todo será diferente, se muy bien que es mi alma gemela y lo que pasó hace tres años no quiere decir que no lo es. -empecé a caminar para que mi amigo comenzará a seguirme.
-Ni quiiri dicir qui ni li is -dijo de una manera infantil mientras movía sus brazos imitando mis movimientos-. Hermano, a veces pienso que esa cabeza tan inteligente que tienes no sirve para nada. -mencionó para revolver mi cabello y salir corriendo.
-Este año será distinto, ya lo verás.
Las horas pasaron y llegaron a ser ya un poco tarde, me encontraba en mi alcoba dejándome caer en mi cama después de ducharme.
-¿No quedaste con hambre después del entrenamiento, Hiccup? -preguntó mi madre asomándose desde la cocina.
-No mamá, gracias. -respondí para colocarme una almohada en mi cara.
"¿Que estarás haciendo justamente ahora?"
-Suena algo estúpido que piense eso, seguramente nunca lo sabré.
En eso veo que me llegó un mensaje de Jack, en el cual, preguntaba si sabía dónde había dejado alguno de sus papeles que necesitaba para la inscripción del día de mañana; éramos tan cercanos que, literal, la mayoría de sus papeles importantes los teníamos en la casa, así que decidí buscarlos. Busque en una caja que tenía debajo del escritorio con su nombre en el para buscar aquellos documentos, cuando me tope con ellos alcé mi cabeza dando con el mueble.
"Maldita sea"
Me sobe la parte de mi cabeza que fue estampada con aquel pedazo de madera para poder levantarme y mandarle mensaje a Jack que mañana pasará por ellos, me di cuenta que apenas habían dado las doce de la noche, ¿Estará dormida? Espero que sí, me vería muy estúpido que escuchará aquel pensamiento.
"Esto será un infierno"
Holaaa! Bueno hoy les traigo este nuevo capítulo de esta historia espero que les guste al igual que no olviden votar en ellos 💗 Muy pronto les traeré está y más actualizaciones en mis demás historias ❤️
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Nos leemos ❤️
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Mericcup: In My Thoughts
Novela Juvenil[TERMINADA] FRIENDS TO LOVERS Al cumplir los 16 años comienzas a oír los pensamientos de tu alma gemela, lo único malo es que no puedes llegar a interactuar con ella de alguna forma. Y lo único que p...