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Era una noche lluviosa, Eren terminaba de coser unos pequeños detalles en las frasadas de su  pequeña, faltaban algunas semanas para que el castaño y su alfa tuvieran a su cachorrita con ellos.

Levi a su lado leía varios informes, miro a su omega en cuanto el castaño se puso de pie soltando un jadeo.

Levi: ¿Estas bien?

Eren: Si, nuestra pequeña hoy no está tan inquieta.

Levi: Eso es bueno.

Eren: Supongo.

La pareja se miro por un instante, un relámpago se hizo presente junto a un trueno, en ese instante Eren se dio cuenta de algo.

Eren: Levi, rompí fuente.

𝕿𝖆𝖓 𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊 𝖊𝖑 𝖆𝖒𝖔𝖗.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora