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Eren miraba el horno, en cuanto el temporizador sonó  sacó la segunda bandeja con pastelitos que estaba preparando, los metió al refrigerador para enfriarlos.

Cuando terminó con su trabajo sonrió feliz.

Eren: Bien bebé, vamos a visitar a papá.

Caminaba mirando todo a su alrededor, varios soldados lo miraban con curiosidad, cuando por fin distinguió la figura de su alfa apresuró su paso.

Levi veía sufrir a los cadetes, todos se quejaban por el castigo que el capitán les había puesto, todo gracias a uno de los cadetes que había mencionado que ahora el atractivo olor de su omega era más dulce.

El azabache planeaba seguir con su tortura hasta que el aroma a manzana, caramelo, canela y leche aparecieron en su radar, al girar vio a su dulce omega que se acercaba con una pequeña canasta en manos, no tardó nada en correr hacía su omega quien le sonrió encantado.

Levi: ¿Qué haces aquí cariño?

Eren: Quería verte.

Levi: ¿Caminaste hasta aquí?

Eren: Si.

Levi: Eren.

El castaño se preocupó al ver la expresión de su alfa, Levi de inmediato se  giro hacia los cadetes, cuando encontró a una de sus víctimas favoritas lo llamo.

Levi: ¡Cadete Folch un paso adelante!

El pobre chico acató la orden, cuando estuvo frente a Levi, el azabache estampó la canasta que llevaba el castaño contra el pobre chico.

Levi: Lleve eso a mi oficina inmediatamente, y al resto, si se mueven aunque sea un milímetro obtendrán un castigo.

Eren: Levi no seas tan duro, parece que se van a desmallar.

Levi miro a su omega, Eren lo miraba de esa manera, esa con la que el omega sabía que su alfa no podía decirle que no.

Levi: Bien, descansen cadetes, pero mañana será lo doble de duro.

Eren les sonrió a los cadetes, se despidió de ellos antes de que Levi lo tomará en brazos para llevarlo a su oficina.

Eren: Deberías ser menos exigente con ellos.

Levi: Se ganaron el castigo.

Eren: ¿Porque?

Levi: Mencionar lo dulce de tu aroma, me alegra que no capataran el olor a leche.

Eren: Celoso.

Levi: Lo soy, pero tu tienes la culpa, deberías mirarte al espejo, eres perfecto amor.

Eren: Cariño.

La pareja se abrazó, pasaron más de una hora entre mimos y besos, antes de que el castaño se fuera, le repartió a cada cadete un panquecito, los cadetes agradecieron al omega de su capitán.

Al día siguiente tuvieron todo un día para descansar, todos agradecieron al castaño, al parecer era el único que hablandaba al temido capitán Levi.

𝕿𝖆𝖓 𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊 𝖊𝖑 𝖆𝖒𝖔𝖗.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora