___(tn)
— ¿De verdad? Eso es genial, ambos pasamos entonces.
Asintió.
— Tsubakihara estuvo... Bien. El real problema es el siguiente. Inarizaki.
— ¿Ina... rizaki? Nunca oí hablar de esa preparatoria.
— Entrené con unos de ellos: Miya Atsumu.
— Mhm... Tampoco oí hablar de él —me encogí de hombros.
— Sobre él... Si te lo encuentras ten cuidado.
— ¿Por qué?
— No tiene buenas intenciones.
Reí.
— ¿Otra vez estas celoso, ternerito? Ni siquiera lo conozco.
Su cara cambió de color.
— ¡N-No es eso! ¡Trato de protegerte, i-idiota!
— De acuerdo, de acuerdo... Si me lo llego a cruzar tendré cuidado.
Apoyé mi cabeza en su hombro, puesto que nos encontrabamos sentados en una especie de maceta gigante.
— Lo siento por no haberte visto... Es que no tuve tiempo y... Pasaron cosas.
— Esta bien. Yo trataré de verte, quiero verte hacer llorar a los del otro equipo —confesó con una cara tenebrosa.
Dejé escapar un suspiro.
— Quiero estar más tiempo contigo... Pero debo irme y tú también —me levanté y besé rápido sus labios, despidiendome—. Que descanses y mucha suerte mañana.
— L-Lo mismo para ti.
(...)
— ¡Maldición!
Festejamos nuevamente mientras el equipo contrario maldecia. Sobrevivimos al segundo día.
— Ya puedes irte —rodó los ojos Anna.
Yo di un pequeño salto feliz y agradecí con la mirada largandome de ahí.
Al salir no me percaté a tiempo y choqué con una inmensa espalda. Por lo cual, caí al suelo y me quejé.
— Pero mira que tenemos aquí...
Elevé mi vista y vi a los de Nekoma.
— ¡Kuroo! —dije al verle feliz.
— ¿Estas bien? —Kenme ofreció su mano, la cual acepté.
— Gracias.
— ¿Vas a ver a Karasuno? —asentí— Vamos, nosotros ibamos a lo mismo.
— ¿Vinen de un partido? Se les nota cansados y todos mojados.
— Si... —Respondió desganado Yaku.
— ¿Ganaron?
— Claro que si conejito, ¿Por quien nos tomas?
《¿Conejito?》
Sacudi mi cabeza quitando esos pensamientos.
— Yo también, ganamos —comenté sonriente.
— ¿Y tu equipo? —dijo Kenma.
— Euh... Bueno... Creo que por ahí —respondí insegura, porque la verdad no tenia ni la más mínima idea.
— Oh, están en el segundo tiempo —Soltó Kuroo al entrar.
— Nekoma está aquí, Karasuno... —habló suave Kenma.
— Que intimidantes son los de inarizaki.
— Karasuno la tiene difícil con este equipo, son muy fuertes —dijo Kuroo.
Tragué saliva.
— ¿En serio? —elevé mi cabeza, viendo al de Nekoma.
Este me sonrió.
— Claro que sí. Pero tranquila, tu noviecito seguro gana.
Apoyé mis manos en mis caderas y lo miré con una ceja levantada.
— ¿Que? Es tu noviecito.
— No me agradó el tono.
Este rió.
— Tranquila conejito, miremos como se destrozan entre ellos.
— Karasuno ganará. Yo sé que sí.
— Mejor que lo hagan, ya ansío jugar contra ellos —sonrió arrogante el capitán.
— Ese Miya si da miedo...
— ¿Lo ves? Te lo dije.
— Callate, Kuroo. Voy a golpear tu cara.
— ¿Como? Si no llegas —rió.
— ¡Oye!
— Ya, ya dejen de pelear y vean el partido de Karasuno —intervino Kenma.
— Solo puedo ver unos minutos... Mi equipo me necesita de vuelta, quieren hacer no se que cosa... ¡Maldicion! ¡Terminen de una vez Karasuno!
— Que digas eso no significa que terminen antes.
— ¡Ya lo se, Yuka! —furfullé cruzandome de brazos. Los presentes rieron ante el gesto infantil.
— Hoo... Kageyama acaba de dar una mirada veloz hacia aquí... Y era de pocos amigos al verme contigo —rió seco— ¿Quizás debamos darle más motivación?
— ¿Ha?
Su brazo pasó por mis hombros, atrapandome y antes de que reaccione este gritó.
— ¡Oooi! ¡Kageyama! —llamó.
Este nos miró por un mili segundo y luego retiró la mirada furioso, casi que lo oigo rechistar.
Me separé rápida.
— ¡Kuroo!
— ¿Qué? Miralo —lo señaló— Está más activo, lo estoy ayudando. Quiero jugar contra ellos.
— ¿Ha...?
— ¿Que crees? Al verme contigo su furia aumenta y esta el doble de activo, ahora quiere destrozar al otro equipo. ¡Estrategias, __(tn)!
— Estas loco —dije extrañada por su forma de pensar pero al parecer funciona.
•••
¡hola y adios!
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La menor || Kageyama y tú
FanfictionPrimera vez que ella aparece. Primera vez que él se enamora. ••• Historia 100% mía. Prohibida la adaptación o copia. Todos los derechos reservados. ((Historia corta)) ¡gracias!