La menor || Kageyama y tú

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___(tn)

Bostecé.

— No me digas que tienes sueño...

— ¿Haa? Solo bostecé, Lia.

— Hay bastantes chicos —soltó Anna en un suspiro mirando a su alrededor.

— ¿Tu novio esta aquí?

Asentí hacia Mía.

— Debe estar por aquí, pero con tanta gente no logro verlo y no voy a separarme de ustedes.

— ¡Ow! —Mía me abrazo— ¡Ternurita!

Reí.

— ¿Oya?

Agudizé mi oído. Y me separé un poco de mi grupo.

— Oya, oya.

— Oya, oya.

— Oya, oya —me uní respondiendo a su "llamado".

— ¡__(tn)! —dijeron a coro.

— ¡Chicos! —los abracé— Quien diria que nos encontrariamos aquí.

Habiamos pegado muy buena amistad cuando fui a ver las prácticas de Karasuno.

— ¡Vaya! Te queda muy bien ese uniforme —Bokuto me miró de arriba abajo con una mano en su mentón.

Akaashi le pegó.

— Sé más respetuoso.

— ¡Akaashi! —se quejó este.

Reí.

— ¿Juegas? Nunca nos dijiste.

— Es que... Salió de la nada, pero bueno —expliqué tímida a Kuroo—. Que lindo es encontrarlos aquí. ¡Ah! ¡Iré a verlos! Si es que no jugamos al mismo tiempo...

— ¡Sí! ¡Nosotros haremos lo mismo, ¿Verdad, Akaashi?!

Este asintió atrapado entre el agarre de su amigo.

— Si quieres verme ganar, eres bienvenida. Yo espero lo mismo de ti —agregó el pelinegro.

— ¿Kenma anda por ahí?

— Jugando videojuegos...

— Me lo esperaba.

— Debes ser igual que yo para estar en las nacionales —habló Bokuto.

— ¿Yo? O... ¿Tú? —desafié.

Este sonrió altanero.

— ¡Eso lo veremos, mocosa!

— Akaashi, cuida a este imbécil —lo ignoré, este asintió y escuché como Bokuto se quejaba.

— ¡__(tn)! —miré a este.

— ¡Ho! ¡Hinata esta aquí! —Soltó Bokuto.

El peli anaranjado se aproximaba con la mayor parte de Karasuno detrás de él, animado.

Sonreí y estiré mi mano saludando.

— ¡Hinataaaa!

Se detuvo en seco al verme y su cara se tornó rojo intenso.

Frunci mi ceño.

— ¿Estas bien?

Al rato, cuando los demás jugadores llegaron sus rostros también se tornaron rojos y quedaron congelados. De sus narices un ligero hilo de sangre caía.

— T-T-Te queda bien ese uniforme —habló Nishinoya.

— ¡¿Verdad que si?! ¡Es por eso que ella será mi pareja! —Bokuto pasó su brazo por mis hombros.

Yo reí ante la acción del susodicho.

— Quita tus manos de mi novia —Kageyama apareció—. Y ustedes —miró a sus compañeros con odio—, dejen de verla malditos pervertidos.

— ¿Tu...

— ...Novia? —completó la frase Kuroo de Akaashi.

— ¡¿Haaa?! ¡¿Tú novia?! — repitió incrédulo Bokuto.

Kageyama asintió y se colocó a mi lado quitando el brazo del peligris y tomando con delicadeza mi muñeca. Asesinando con la mirada a los demás.

— ¡Ya-Ya lo sé, Kageyama! —reprochó Hinata— E-Es que el uniforme le queda bien...

Este me miró y luego se avergonzó quitando la vista.

— ¿Y-Y eso qué? —《¿Recién ahora se percata de mi vestimenta? Que descuidado...》.

— ¿Tú novia? —volvió a preguntar Kuroo.

Asentí.

Este negó divertido sin poder creerlo.

— Maldito Kageyama, te nos adelantaste.

— ¡Eso no es justo! —se quejó Bokuto— ¡Akaashi dile algo! ¡Es injusto!

— Ya, ya... Vámonos, nuestro equipo nos espera —Este se lo llevó a rastras mientras Bokuto seguía quejandose.

— Bien, yo también me iré. ¡Suerte, __(tn)! Espero verte en las gradas —me guiñó un ojo—. Bien jugado, Kageyama. Calculaste todo a tiempo, increíble.

— Tch.

— ¿Como se encuentran? —quité la vista del de Nekoma para ahora ver a los cuervos, estos ya se habian calmado.

— ¡Ge-Genial! ¡Hay muchos oponentes!

— ¿No te aterras?

Nishinoya negó.

— Estamos listos para lo que sea —Tanaka hizo un gesto de "fuerza".

— Oigan, dejen de hablarle a mi novia.

— Kageyama —advertí. Este rechistó.

Suele ser celoso... La mayoría del tiempo.

— Es que todos te miran demasiado... Creo que el uniforme llama mucho la atención —habló en voz baja mirando a todos.

Reí.

— Ya, calmate tonto. No tienes que preocuparte de nada, mis ojos te miran solo a ti —le sonreí.

— ¡Es- Es tan injusto, Kageyamaa! —Nishinoya se quejó mientras lloraba.

— ¡Yo tambien quiero alguien que me hable así! —se unió Tanaka.

— ¡Kageyama es tan serio que no se merece a alguien como __(tn)!

— ¡¿Haaaa?! ¡¿Que dijeron, idiotas?! —contestó enfurecido— ¡Tú, Hinata! ¡Repite lo que dijiste, idiota Hinata, idiota!

Reí. Karasuno es tan divertido y alegre... Me encanta.

•••
¡hola y adiós!