Estaban Sol y Lucia practicando sus rutinas de porristas cuando las interrumpió Adriana.
Adriana es una compañera de clase de Alex y Sol, pero con la capitana de las porristas no tiene buena relación debido a que está interesada en el chico de ojos verdes pero él sale con Lucia.
-Oye, Lucia. ¿Es cierto que terminaste con Alex anoche?.-pregunto la chica acercándose a las porristas.
-Eso que te importa a ti.-respondió la chica de ojos verdes.
-Me importa porque él me interesa.-dijo Adriana con la mirada fija en la capitana de las porristas.
-Si anoche terminamos, pero no te hagas ilusiones.-dijo sonriendo, manteniendo el contacto visual.
Para su mala o buena suerte de las chicas justo Alex estaba entrando en el campo, caminando directo hasta donde estás se encontraban discutiendo.
-Hola chicas.-saludó con una sonrisa mientras se acercaba a Lucia y le plantaba un beso en los labios.-¿Te veo después del entrenamiento, amor?.-pregunto el chico.
-Claro, bebé. Te esperare en las gradas, suerte.-se despidió con un beso y el chico se alejó para comenzar su entrenamiento a unos metros de distancia.
Adriana no entendía lo que acababa de suceder, si no estaban juntos porque actuaban como si lo estuviesen, eso era tonto ¿no?.
-Acabas de decir que terminaron anoche, ¿eso que fue?.-pregunto Adriana con molestia y confundida.
-Y no mentí, terminamos anoche pero volvimos esta mañana. La que se hizo ideas en su cabeza fuiste tú.-comentó.-Deberías dejar de esperar a mi novio, eso es de muy mal gusto.-añadió.
