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- Estás muy cariñoso hoy, ehh- me río fruto de las cosquillas que me hacía repartiendo besos por toda mi cara apoyándose a la encierra de la cocina, a la que yo estaba subida.

- Lo estuve pensando, y te voy a hacer caso- se separa y me mira directamente.

- ¿Ah si?- asiente.

- Mientras que no esté entrenando o jugando me voy a olvidar completamente del fútbol, y más ahora que tú estás aquí- me peina el pelo por detrás de la oreja- quiero desconectar al 100% ahora que te tengo conmigo- me abraza y yo solo puedo sonreír.

No le veía tan mal desde que eliminaron a atleti de la champions el año pasado, pero creo que lo de anoche me dolió más.

Y me hacía muy feliz que estuviese dispuesto a quitarse peso de encima, y a disfrutar más.

-¿Qué vamos a hacer hoy?- le pregunto aun estando abrazados.

- Podemos hacer lo que quieras, no hay entrenamiento hoy- sonrío complacida, dispuesta a unir nuestras bocas...

Nos miramos extrañados, ¿y ese ruido de la puerta?
No no.

No podía ser verdad. Los dos nos quedamos en shock, y puedo oír como Rodri susurra para sí mismo "joder, que oportuno"

- ¡Tu hermano favorito viene de visita por sorpresa!- puedo ver cómo arrastra su maleta por la entrada, sin siquiera habernos visto- Rodri bro...- alza su mirada y nos ve allí.

Yo sentada sobre la encimera de la cocina, y Rodri inclinado sobre mi. Apoyando sus codos sobre mis muslos.

Menuda sorpresita. Pienso

- Hombre Alicia, cuanto tiempo- me saluda como si nada acercándose a nosotros.

Ehh, momento incomodo.

- Pues aquí que he venido de visita, ¿no te habré molestado bro?- le golpea amistosamente, Rodri solo niega, pero puedo ver que se ha cabreado bastante con la sorpresa de su hermano, y eso me hace gracia. -¿no os he interrumpido nada, no?

- No para nada no te preocupes- le contesto agradable. Menuda situación más vergonzosa. - Yo me iba a duchar ya y preparábamos las comida Rodri y yo. - digo intentando escapar de esta escena.

Rodrigo
Nada más veo como Ali acaba desapareciendo por el pasillo, resoplo.
Conociéndola estará muerta de la vergüenza y con las mejillas algo coloradas.
Lo que tenemos entre los dos, es muy íntimo, ella no le dijo nada a su familia, y por mi parte solo le conté a mi hermano, pero solo aquella vez.

Para estas cosas ella es muy vergonzosa. Le costó un poco acostumbrarse a algunas cosas.

Es muy reservada para ella misma, pero sé que me quiere.

- ¿No habré interrumpido algo importante, no?- suelta una carcajada.

- ¿Tú que crees?- agacho la cabeza cansado. Seguía flipando con la situación.

- Menudo pilladón, de verdad que no era mi intención- vacila- Venga tío, ha sido graciosísimo - me golpea flojo en el hombro.

- Es que es más por ella, a mi me da igual y lo sabes- me rio- ¿tú disimula vale? Haz como que no has visto nada, porque decidimos ir poco a poco, pero como que no estamos yendo muy despacio- nos reímos.

- Sí es que en verdad sois la pareja perfecta Rodri. Bueno, que dejo aquí la maleta y me piro, no voy a estar de sujetavelas irrumpiendo el romántico reencuentro vuestro.

- ¿A dónde vas?

- He quedado para comer con los otros- se refiere a unos amigos de aquí de Manchester- No sé a qué hora vendré, más bien tarde, así que os dejo para que hagáis lo que queráis- por supuesto con segundas intenciones- no me esperéis despiertos- se dirige a la puerta para salir.

-¡No se nos iba a ocurrir hacerlo! - me rio.

Cuando ya veo que ha cerrado la puerta, me dirijo hacia el baño y toco a la puerta.

- Ali soy yo- alzo la voz y me apoyo en la pared

-¡Ya salgo!- y nada más contestarme sale con el pelo mojado y envuelta en una toalla- ¿y tú hermano?

- Se ha ido con unos amigos, a saber cuando viene.

- Rodri, que mal, ha sido incomodísimo- se queja y eso hace que me ría fuerte- ¡no te rías! Ahora me va a dar vergüenza mirarle a la cara. Y por reírte te aguantas- le abrazo fuerte por el pecho y le mojo un poco la sudadera que llevaba puesta.

- Ves, yo aunque estés mojada si me dejo abrazar- apoya su barbilla en mi cabeza- pero tú ni te atreves a tocarme después del gimnasio.- me rio.

- Yo te quiero todo el rato, salvo cuando estás sudado- me sonríe.

M A N C H E S T E RDonde viven las historias. Descúbrelo ahora