Nía y yo, nos acababamos de despertar, pero Anaju ya no estaba y ninguno de los dos se había dado cuenta de en qué momento había salido de la cama. Nos levantamos y salimos de la habitación para ir al salón, y allí estaba, con sus tostadas, sentada cerca de la ventana para que le llegasen esos rayitos de sol que tanto le gustaban. Su compañera de piso, no estaba, ya que tenía que entrar a currar pronto, por lo que estábamos solo nosotros tres. Anaju ya nos habia preparado el desayuno, sabía exactamente lo que nos gustaba a ambos. Nos sentamos junto a ella, y en ese momento me percaté de que no llevaba más ropa que mis calzoncillos, por lo que iba a ir a la habitación a ponerme algo.
-Voy a ponerme unos pantalones o algo. - dije riéndome y levantándome del sofá.
-Da igual Huguito. - me dijo anaju.
-No es algo que no hayamos visto ya mil veces, si en la academia en la habitación estabas así siempre. - dijo Nia riéndose.
Me volvi a sentar, ya que no les importaba, y empecé a desayunar.
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Narra Anaju
Iván nos había invitado a comer a su casa, y Cesc nos había dicho que si queríamos ir a su piscina a pasar la tarde.
Tenía muchísimas ganas de ver a Iván, había formado tanto junto a él, me daba consejos, me ayudaba, siempre estaba ahí para mí. El, Nia y Mai, fueron los tres que más me ayudaron en el confinamiento. Junto con Rafa, compartíamos situaciones, el con Eva y yo con Hugo, y eso hizo que nos apoyarámos mucho, por lo que Rafa me había comentado estos días, le iba a dar una oportunidad a Eva. Yo, por una vez en mi vida, me iba a tirar a la piscina también, pero ahora no, no era el momento, ahora tan solo quería disfrutar estos días con Nía y con el.
Estuvimos comiendo con Ivan, hablando, riendo, disfrutando, también estuvimos haciéndonos fotos...me lo pasé como una enana. Y en casa de Cesc más de lo mismo.
Narra Hugo
Cada día tengo más claro, que Anaju quiere matarme. Venga illo no me jodas, que se iba a poner ese bikini ¿rojo? Por dios esque, madre mía, verla así con un bikini ROJO, que le quedaba tan de puta madre. Como pretendía que no me afectase, más bien a mi parte baja, de hecho en un momento dado, tuve que tirarme a la piscina para que no notase el efecto que ella y su maldito cuerpazo, había tenido en mi.
Estuvimos hasta después de cenar en casa de Cesc, luego nos fuimos a el piso de Anaju, y directamente nos fuimos a dormir. Mañana teníamos que coger un tren para ir a la casa de sus padres. Salíamos de la estación a las 9:45 y llegaríamos alli sobre las 12:00.
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Al dia siguiente (9:46)
Narra Hugo
Nos acababamos de subir al tren que nos llevaría a Alcañiz. Sería un viaje un poco largo. Ibamos sentados en la parte de atrás del tren, ya que era la parte donde había más de dos asientos pegados, y al ser tres así podríamos ir juntos.
-Oye, ¿y si hacemos un directo en insta? - dijo Nia.
-Venga, así pasamos el rato. - dijo Anaju.
-Vale, prometo no decir nada, de lo que luego me arrepienta. - dije, provocando sus risas.
Hicimos el directo desde el móvil de Nia. Y estuvimos casi todo el viaje, hablando con la gente. Todos nos preguntaban que a donde íbamos, así que les dijimos que mañana era el cumpleaños de anaju y que íbamos a Zaragoza a celebrarlo, se iban a enterar igualmente asique preferimos decirlo nosotros.
Cuando acabamos el directo, entre a Twitter, para ver de qué hablaban, me metí en varias cuentas limonas de las que tengo apuntado los nombres en el bloc de notas de mi móvil, porque no voy a mentir las suelo ver muy a menudo. Todas estaban como locas diciendo si son, esque por favor si que son, es real. Y ojalá, no deseaba nada más en este planeta que gritar a todo el mundo que estábamos juntos, pero no era así, o no aún, porque pensaba decirle lo que sentía una vez estuviésemos en Madrid, estos días no quería hacer nada que lo pudiese joder, queria difrutar de ella y de Nía, pero bueno...mas de ella.
Aún seguía en Twitter cuando me vibro el móvil, era un was de Javy.
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Javy siempre me había dicho, que estaba claro lo que me pasaba, que me estaba enamorando de ella, y que a ella le pasaba igual. Y que razón tenía, enamorado hasta las trancas he acabado. Respondí girando un poco el móvil, para que Anaju, que estaba sentada a mi lado, si miraba hacia mi que no lo viese.
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Según envié ese mensaje, el tren paro. Ya habíamos llegado. Cogimos un taxi para ir a su casa, y este nos dejó justo en la puerta.
