Me siento mareada, siento mi piel helada, también siento cómo mi sudor resbala por mi frente corriendo poco a poco mi maquillaje, camino nerviosa por la habitación intentando controlar las náuseas que siento, no quiero sentirme más así y menos un día tan importante como hoy.
- Aquí traje algunos medicamentos que te ayudaran a sentirte mejor. – entra Nina al cuarto con una enorme bolsa, ha esto corriendo esta ultima hora buscando como loca cualquier cosa que me haga sentir mejor.
- Gracias. – solo digo eso y le recibo el medicamento que me extiende.
- Creo que debería traer a Ezra para que te revise, no te ves nada bien, estás pálida y ya no creo que sean los nervios. – habla Zeynep entrando a la habitación.
Por un segundo me quedo mirándola sin comprender nada, pues se me había olvidado de la relación que tienen Zeynep y el doctor Ezra quien una vez me atendió en el hospital cuando casi muero envenenada.
- ¡No! – grito intentando impedir que lo haga. – son solo los nervios además si lo llamas Can vendrá corriendo y también se preocupará mucho y todo se echará a perder – las dos me miran un poco dudosa. - ¡joder! Me voy a casar, caminaré a el altar para convertirme en la esposa de Can y las personas que quisiera que estén aquí no lo están y...todo eso se acumula y me hace sentir así, solo estoy nerviosa y estresada. – las chicas se ven un poco más convencidas de lo que les he dicho.
- Me dijeron que ibas a tener un ataque si yo no venía a tu boda. – esa voz me hace sonreír, Nina y Zeynep se apartan para que podamos ver a una cambiada Anna recostada en el marco de la puerta, se hizo un cambio de look, se cortó el cabello y se lo aclaró un poco, se ve hermosa.
- Pero dijiste que...
- Sé lo que dije, pero no me perdería la boda de mi mejor amiga por mis problemas personales. – dice acercándose a mí.
- Gracias, te necesitaba mucho y sabía que no podía obligarte a venir acá sabiendo que ibas a volver a ver a Burak y sé lo que pasó entre ustedes y...
- No te preocupes – me interrumpe. – lo importante es arreglar este aspecto que tienes, te casas en menos de una hora y tu maquillaje está corrido y estás muy pálida. – dice inspeccionando mi apariencia.
Para el día de hoy he decidido colocarme un vestido color dorado con corte corazón apretado en la parte de arriba y suelto en la parte de abajo con una leve abertura en mi pierna izquierda, para mi maquillaje...bueno, está arruinado.
Cuando intento pasar por el lado de Anna su perfume me hace dar náuseas y con mis tacones altos puestos voy directo al baño a vomitar todo lo que ya no tengo en el estómago.
- No has considerado la pequeña posibilidad de que estés em..bara...zada – habla Nina cortando cada vez más su voz en la última frase cuando mira mi cara de asesina. – solo digo que es muy raro que estes así. – levanta las manos en son de paz.
- No lo sé, solo sé que me siento como la mierda y que necesito mejorarme como sea porque si sigo así me desmayaré antes de llegar al altar. – digo cansada mientras cepillo por tercera vez mis dientes.
- Es posible. – habla Zeynep desde el marco de la puerta del baño poniendo sus manos en alto repitiendo el mismo gesto de Nina al ver mi mirada.
- Por suerte para ti yo ya me lo sospechaba y conseguí estas. – Nina agita en el aire dos pruebas de embarazo. – ya sabes que con una no es suficiente y hay que estar seguras. – no puedo creer que esto me pase a mí, la situación es tan estresante e intensa para mí que lo único que hago es reírme como una loca y tomar las dos pruebas de embarazo para salir de las dudas de inmediato y poder casarme tranquilamente.
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Juego de dos
RomanceAlessia Salvatore una chica italiana y empresaria dueña de una cadena de hoteles y clubs a tan solo la edad de 25 años; se ve enfrentada a un magnate empresario dueño y señor del mundo Can Yaman quien hará la vida de Alessia un infierno, un hombre q...