Scott.
Hoy he estado todo el día con una maldita sonrisa tonta en mi cara, y es que no lo puedo evitar. Anoche Alejandra me dijo que me amaba, pensé que no la escucharía decirlo otra vez pero me equivoqué y anoche fue la prueba.
La verdad es que había sido todo perfecto aunque un poco cliché para mi gusto pero perfecto al fin de al cabo.
Cuando nos despertamos nos dirigimos a una cafetería para desayunar algo rápido, luego pasamos por casa de Ale y después lleve a mi chica al bufete.
___Hay dios___dijo ella golpeándose la frente con una mano___no lo puedo creer.
___¿Que pasa?___pregunté divertido al ver las muecas que hacía.
___Olvide unos papeles importantísimos en la casa, que tonta___se mordió el labio enojada.
___Oye tranquila yo puedo ir a bucarlos___dije con las manos en los bolsillos___pero no te desquites con esos deliciosos labios___dije liberando su labio inferior con mi pulgar.
___¿En serio lo harías?___asenti sonriendo___ok está en mi habitación, encima del escritorio, es una carpeta roja, no tendrás problema en encontrarla___ asenti a sus indicaciones.
___Bueno iré a traerla___miré a los lados por si había alguien y le robé un beso para luego dirigirme al auto. Dejando una sonrojada Alejandra. Sonreí por lo que había hecho, me encanta ver como reacciona su cuerpo ante mi tacto.
Maneje hasta la mansión y sin perder tiempo me adentré en la habitación de mi chica, como me había dicho encima del escritorio se encontraba una carpeta roja la tomé y salí de la habitación.
Cuando estaba cerca de la puerta principal Samantha se me cruzó en el camino con semblante serio y los brazos cruzados sobre su pecho. Estaba claro que estaba cabreada.
___¿Esta todo bien?___dije con el ceño fruncido.
Sin decir ninguna palabra me hizo señas de que lo siguiera, no le llevé la contraria porque podía tratarse de algo serio pero espero que no demore, debo llevarle estos documentos a Alejandra.
Me llevó hasta el cuarto de cámaras y buscó algo en la computadora. Puso un vídeo y volteó a verme.
___¿Me puedes explicar qué es esto?___fijé mi vista en la pantalla con gesto de fastidio, en ella estábamos Ale y yo besándonos, se trataba de anoche cuando la estaba esperando para ir a nuestra cena romántica. Ufff que cursi estoy hoy.
___Samantha no quiero ser grosero pero ya te dije una vez que lo que yo haga con mi vida privada no es...___no me dejó terminar la frase.
___Y yo te dije que si ponías la operación en riesgo si me importaba___soltó enojada___ ¿qué hubiera pasado si en vez de yo ver esto lo hubiera visto otra persona?___bufé con fastidio.
___Es por eso que te encargas tu de las cámaras de seguridad ¿no?___dije sin ninguna expresión en mi rostro, ella se acercó a mí soltando un suspiro.
___Scott...tienes que tener cuidado, lo mejor sería que terminaras con esto que no sé ni como llamar___la miré como si se hubiera vuelto loca___pero como sé que no lo harás por lo menos eviten sus intimidades___dijo con una mueca___en lugares donde sabes que pueden ser vistos___ la miré por unos segundos.
___Samantha no es necesario que me digas nada de esto, tengo cuidado en cada paso que doy___ dije con cierto enojo, odio que se metan en mis cosas___así que si no tienes nada mejor que decirme me voy, tengo cosas que hacer___no dejé que me respondiera cuando ya estaba saliendo de ese lugar dando un portazo.
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Te encontré✔
RomanceAlejandra es una reconocida abogada con un vida perfecta, un novio perfecto, una familia perfecta y un trabajo perfecto. O al menos es lo que ella creía hasta que conoció a Scott, un agente de DEA. Scott, un hombre fuerte y frío, dedicado a su traba...