"No, en serio que no es así. No pasó nada, en serio por favor créeme" Pablo estaba desesperado por poder explicarle que todo había sido un error y que en verdad las cosas no eran como ella pensaba.
"No puedo. Me siento una idiota por pensar que me ibas a respetar y que me ibas a cuidar" Tragó en seco y lo interrumpió antes de que pudiera hablar. "Me abrí a vos, confié en vos, con lo insegura que soy en el fondo y lo sabes!" Sacudió la cabeza y miró al piso, atónita.
...
Cuatro meses antes...
"Estuvo buena" Marizza se levantó y fue y dejo el tazón en la mesada. Volvió y se acostó al lado de él y Pablo abrió los ojos. Vio un cuaderno en la mesa de luz de Marizza, al otro lado de la habitación. De él rebalsaban papeles y lo que parecía ser partituras. Era negro y un poco viejo. Era un libro de canciones, obviamente. Seria de Mia? Capaz lo había dejado por accidente ahí. Podía ser de cualquiera de las dos, ya que sus nombres empiezan con M y esa era la letra que se encontraba en el costado inferior derecho de la tapa. "Te estoy hablando Pablo"
La vio y tenía el ceño fruncido, enojada, no le gustaba que no la escucharan. Se fijó de nuevo en el cuaderno y volvió a la chica. "Vos escribís?" Señaló con la cabeza hacia el objeto y Marizza se dio vuelta. Al verlo, se incorporó rápidamente y lo guardó en su cajón.
"Eeh, no" Pablo se acercó y se paró. Abrió el cajón que había cerrado y sacó el cuaderno. Ella miraba para otro lado y decidió abrirlo. Comenzó a ojearlas y se le formó una sonrisa enorme.
"Me cantas alguna?"
"Ni loca" Le arrebató lo que tenía en las manos y se fue a la cama.
"Por qué? Cantas en frente de miles de personas y no queres delante mío?" Hizo puchero y ella no pudo evitar reír.
"Bueno, pero no es lo mismo. En los conciertos estamos los cuatro y... Está bien. Cuál?" Pablo le señaló y ella asintió. Buscó su guitarra y desparramó las partituras en el colchón, al frente de Pablo. Comenzó a tocar y tiempo después a cantar.
Me prendí fuego para despojarme
Para desvestirme, para desnudarme
Me encendí toda para no quedarme
Ni aún en el viento podrás encontrarme
Y fui luz, fui destello
Fui dolor, fui humana
Y cuando fuiste agua
Yo crecía en llamas
Y cuando fuiste llamas
Me cayeron lágrimas, lágrimas
Y cuando fuiste sueño
Yo estaba despierta
Y tu tan dormido
No te diste cuenta, ni cuenta...
"Después sigue, pero es más o menos así" Dijo ella al ver que Pablo no hablaba. "Te gusto o...?" Fue interrumpida por un beso de parte de él. Se tuvo que separar rápido porque la guitarra estaba en medio de los dos.
"Es hermosa, Tenes más?" Los dos miraron hacia la puerta y escucharon una conversación que provenía desde afuera, probablemente de la sala de estar. Eran Sonia, Franco y otra persona que no reconocían. "Qué está pasando?"
"No tengo idea" Ambos se levantaron y salieron juntos hacia el lugar de donde provenían los gritos. Se encontraron con las 3 personas. Su mamá, estaba levemente agarrada por Franco, atrás de ella, como deteniéndola de hacer algo y al frente suyo, un hombre de mediana edad, pero más joven que el papá de Mia. Al entrar, éste la vio y puso una cara de pena y alegría al mismo tiempo. "Qué son esos gritos, mamá?"
"Nada mi ciela bella, vuelvan al cuarto, ahí voy" Sonia parecía como nerviosa y asustada, lo que desconcertó más a la chica.
"Sos Marizza?" Ella asintió y el hombre se quiso acercar, pero Marizza dio un paso hacia tras por instinto, apegándose más a Pablo, que la agarraba de la mano. "Sos igual..."
"Marizza, vayan ahora les explicamos bien todo, en serio" Dijo Franco, que sostenía a su madre todavía del brazo, pero Sonia estaba llorando en silencio. Ella no se movió de su lugar y volvió a ver a ese hombre que le causaba algo raro en su interior.
"Marizza..." Le susurró Pablo, empujándola hacia atrás con sutileza. Ella seguía parada en el mismo sitio, sin dejar de mirar a la persona que se encontraba en frente de ella.
"No espera... No entiendo nada. No entiendo quien sos vos, que está pasando acá, no entiendo por qué vos lloras. Me pueden explicar?"
"Lo que pasa acá, es que yo soy tu papá, Marizza" Instantáneamente se abalanzó sobre ella y la abrazó contento.
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Pablizza: Asi soy
Teen FictionEs cuarto año, Elite Way, colegio pupilo y con sus alumnos rebeldes y sin causas. Todo lo que paso en la primera temporada, paso en esta historia. Solo que la segunda temporada es diferente. Una historia diferente, pero el mismo amor.