Todo va a estar bien

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Primer día del castigo, Pablo estaba terminando de hacer unas tareas que le había pasado Tomás que le había pasado Pilar. Se ponía contento por su amigo, se lo veía feliz junto a ella. Y Guido, él seguía igual de pirata.

No podía decir lo mismo de él. No estaba de novio, pero tampoco como café, era algo... raro.

Guardo sus cosas en su locker y se dirigió a la entrada. Allí estarían Dunoff, para darles las indicaciones y Marizza para cumplirlas junto a él.

Esto es tan injusto pensó. No habían hecho nada malo, no había sido su culpa, fue coincidencia, No?

Bajo de su habitación y estaban Pablo y Dunoff esperándola. El chancho les dio las indicaciones y empezaron.

Tenían que primero barrer y luego encerar. Él comenzó barriendo y luego juntos encerarían.

"Listo, ya lo barrí, o algo parecido"

Marizza largo una risita y comenzaron a encerar el piso de la entrada.

"Así que... Tomás y Pilar están juntos" Dijo Pablo por romper el silencio.

"Si... los encontré cuando no estabas a punto de... besándose" Concluyó ella.

"Deberíamos hacer lo mismo"

"Qué?" Dijo ella con los ojos bien abiertos y nerviosa.

De verdad le estaba diciendo de hacerlo? Y tan tranquilo? Había escuchado bien? Se había imaginado a ellos así, pero nunca pensó en serio.

Pablo se rio ante la reacción de ella. Se acercó y le dio un beso en la mejilla. "Me refería a besarnos, tranquila"

Marizza suspiro aliviada, pero él no lo notó. "Ah, claro"

"Te pusiste nerviosa" Dijo después de un rato de limpiar.

"Nada que ver Pablo"

"Si, no lo niegues"

"Te digo que..." Se fue acercando y resbalo en el piso mojado. Pablo se rió fuerte y ella lo hizo trastabillar con los pies, cayendo él también, pero sobre ella y quedando muy cerca.

'Bravo Marizza' Le dijo su subconsciente.

"Ves, nerviosa" Le susurró.

"Querés ver que tan nerviosa?" Lo desafío ella y tomándolo de la cara lo beso. Él apoyo un brazo en el piso para no aplastarla con su peso y le devolvió el beso.

Se separaron por el aire y se volvieron a juntar, solo que esta vez diferente. Marizza con el pie, de un reflejo producto que él puso la mano en su cintura, al costado, pateó el balde con agua y espuma y éste los mojo todos.

Se levantaron con ayuda del otro y vieron su ropa mojada.

Fueron al baño a secarse con papel. Marizza se sentó en la mesada, ya que se había mojado el pantalón y en la parte inferior.

Pablo, por otro lado, se sacó la remera para estrujarla, quedando en cuero. No pudo evitar mirarlo, pero se obligó a dejar de hacerlo.

"Quede empapada" Se quejó ella. "Odio mojarme la remera"

"Sacatela" Dijo con toda tranquilidad.

"Si, y quedarme en bolas en frente tuyo" Ironizó.

Qué le pasaba? Ya eran dos los comentarios así y se estaba hartando de su actitud.

"Acá tenes una toalla" Le alcanzo. "Me doy vuelta" Dijo levantando los brazos en 'Zon de paz'.

Marizza aceptó y se la sacó y se enrolló en la toalla blanca. Como veía que le llegaba a los muslos, decidió sacarse el pantalón también.

Pablizza: Asi soyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora