2º Juicio de Amor. Saga Hermosos Amores

CAPÍTULO 10

Tres días después...

—Luego de haber escuchado ambas partes, he decidido concederle la demanda a la parte demandada — anuncia el Juez — Eso es todo, caso cerrado — finaliza para luego azotar su martillo.

—Muchas gracias Licenciada Bianca — me agradece Elizabeth, mi cliente.

Conversamos un rato mientras salíamos de la sala donde fue el juicio, al estar fuera del juzgado nos despedimos y cada quien se va por su lado.

—Buen trabajo Brown — habla el licenciado Femad extendiendo su mano hacia mí. — Te deseo éxito en lo que te depare el futuro — estrechamos nuestras manos — Si llegas a necesitar otro trabajo, sabes dónde encontrarme — sonríe de lado.

—Gracias licenciado Femad — me limito a decir.

Sin nada más que hacer en ese lugar, camino hasta mi auto, dejo mis cosas en el asiento de copiloto, me subo al de piloto y voy rumbo a mi apartamento.

(****)

En cuanto llego a mi apartamento voy directo a mi habitación a terminar de preparar mis malatas. Son las 12 del mediodía, tengo dos horas para terminar de empacar mis cosas, mi hermano Ethan que nos veríamos en el aeropuerto de Nueva York a las 2 de la tarde, para que juntos tomáramos el vuelo a Canadá y pudiéramos llegar juntos a la casa de nuestros padres, eso quiere decir que tengo alrededor de hora y media para terminar lis últimos detalles del viaje.

—Bailey, ven mi bebé hermoso — llame a mi mascota luego de haber terminado una de mis maletas. Solo tarda unos segundos en llegar hasta donde estoy, mueve la cola con emoción mientras se termina de acercar a mí.

Tal vez no lo había mencionado antes, pero tengo una mascota, es un perro, cruce de bóxer americano, color miel, tiene una rayita blanca desde el inicio de su nariz hasta su cabeza, y para mí es el perro más hermoso de todos, llevo cerca de tres años con este compañero canino, lo adopte luego de mi ruptura con Joseph.

Verán, después de que Joseph y yo termináramos nuestra relación, me la pasaba dando paseos por algún parte al salir de la pasantía, y un día en uno de esos parques había una adopción de perros, y en cuanto lo vi, me enamoré de ese bello cachorro, y sin pensarlo dos veces lo adopte. Y desde entonces está conmigo, nunca se separamos el uno del otro, la mayor parte del tiempo se la pasa aquí en el apartamento, solo que de vez en cuando salimos a dar un paseo, es tranquilo la mayor parte del tiempo.

—Como extrañaba tu compañía, mi niño hermoso — le hablo con cariño y el solo mueve la cola con más emoción.

Las últimas semanas había estado actuando extraño, ya no quería comer, se la pasaba acostado en su cama, y ya no jugaba. Por eso, días antes de la boda de Allison tome la decisión de llevarlo al veterinario, y me dieron que estaba un poco desnutrido debido a que no había comido bien, y que su desánimo era porque estaba un poco deprimido, y fue necesario que se quedara unos días, 5 días para ser precisos, los primeros dos días lo fui a ver, pero los tres siguientes no puede por el trabajo y lo del viaje, hasta el día que pase por el, y lo encontré mucho mejor, el martes que paso, hace dos días para ser más exacta, habían dado de alta a este bebé.

El mismo día que había pasado a recogerlo, compre lo necesario para que pudiera viajar conmigo, claro que no sería la primera vez que vamos con mis padres, solo que al pasar del tiempo creció y la caja trasportadora que tenía ya no cabe, así que tuve que comparar otra.

Bailey se acuesta en mi cama mientras yo continuó empacando mi ropa, y todas mis cosas personales que considero ocupar para mi estancia en Canadá. El tiempo que tengo planeado quedarme con mis padres es de aproximadamente 2 o tal vez 3 meses, me gustaría disfrutar de mis padres, mi hermano y de mi estancia ahí, esperando que estando haya pueda sobre llevar la situación de mi situación sentimental con Brad, tal vez no logre olvidarlo en ese tiempo, pero por lo menos podré mantener mi firmeza para ya no volver a caer a sus pies.