Perdidos

367 55 20
                                    

A pesar de que Yu quería ir solo con su familia a pasar un rato juntos, Cheng y la doctora también los acompañaron. Se las ingeniaron para pedir el día libre e ir con sus amigos, además ambos se desvivian en tomarle fotos a Guang, para el álbum.
No querían perder ninguna nueva experiencia del niño más mimado por todos. Además sería la primera vez en que Guang saliera al exterior, desde su nacimiento ni siquiera tuvo que ir a la clínica ya que su tía se encargo de llevar a casa todo lo necesario para su cuidado ante algún malestar o enfermad.
Cheng a pesar de ser un médico generalista sobre todo para adultos, trato de especializarse en los niños, no pretendía quedarse atrás en la atención a su pequeño.
Cargaron todo en el automóvil y se dirigieron al parque, trataron de escoger un lugar tranquilo donde el sol no calentará demasiado pero que tampoco la sombra fuese tan fría, tuvieron cuidado en tender los manteles en el césped viendo que no hubiese ningún insecto o espinas, piedras y otras cosas.
Alistaron todo para el almuerzo, dulces y salados, bebidas, postres, etc. No olvidaron nada ni siquiera la pequeña cama plegable para recostar a Guang cuando tuviese sueño e hiciera la siesta acostumbrada.
Mientras hablaban de las cosas del hospital,  en la cual Yu permanecía en silencio y solo escuchaba pues solo entre los médicos se entendían, usando términos standard,  y riendo cuando supuestamente sonaba gracioso, se puso a pensar en que si no hubiese tomado la desición correcta nada de eso estaría pasando, no disfrutaría de esos momentos junto a las personas que le enseñaron a vivir sin seguir ni obedecer a ciegas las órdenes de su padre, que si hubiera aceptado su matrimonio impuesto sería el hombre más infeliz, y jamás hubiera sido el padre de ese niño tan bello.
Quizás se sentía demasiado feliz para ver verdad, esa felicidad nunca la experimentó  a pesar de tener hermanos a los cuales nunca pudo hablarles como lo que eran, ni compartir cosas, nada y una madre, que parecía solo jugar el papel de la mujer que le daba hijos al señor Chen. Lo que hubiese dado por poder aunque sea una caricia o palabra de aliento de parte de esas personas que según decían ser familiares. Ni hablar de su progenitor, solo adiestramiento para ser el mejor, y mantener el honor del apellido.
Wei se dio cuenta que se había sumergido en sus pensamientos y para traerlo de regreso le tomo de la mano preguntándole si se encontraba bien, si necesitaba algo, o estaba cansado.
Solo le sonrió y no dejo escapar su mano, pero ante las burlas de Cheng que los avergonzaron, poniéndose colorados se soltaron.
Llegado la tarde ya se alistaba para la vuelta a casa, los tres llevaron las cosas al coche mientras la doctora preparaba a Guang.
Desde que llegaron al parque habían sido observados a lo lejos por personas desconocidas que aprovechando el instante en que se quedaron solos, se acercaron a la doctora, la golpearon fuertemente en la cabeza para desmayarla y tomaron a Guang
Los tres volvían a ayudar cuando se percataron de que tanto la doctora como Guang habían desaparecido sin dejar rastros.
Wei se puso a gritar desesperado, dónde estaba su bebé y su amiga.
Yu no sabía que hacer a pesar de haber pasado miles de situaciones, pero está vez se trataba de su hijo.
Cheng corrió a preguntar a las personas que por allí pasaban si habían visto a alguna personas que llevaba un bebé sin lograr nada.
De un minuto a otro luego de pasar un hermoso día ocurría algo tan trágico.
Donde estaban, quién o quienes eran los responsables.
Solo el llanto de Wei se escuchó en todo el parque, su bebé estaba perdido.

O no pues, quién fue, el vejete o el Xue.
Pobre de Wei...
Y Yu que no hace nada....

Ahhhhhhhh me voy a pegar por escribir algo así.......
😔😔😔

Déjame amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora