La cena

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Ya eran las nueve, llamaron al timbre y Mina fue a abrir dejando a Kunzite con el delantal puesto cocinando.

- ¿Pero que veo aquí? Serena, ¡has llegado puntual!- Exclamó Mina.- Hey, Takumi, ¿que has hecho y como para que llegue puntual?¿Has usado magia, tendría que ser muy potente, por que para cambiar ese muy mal habito de Serena? ¿Un brujo?-

- ¡Hey! No es para tanto.- Justificó Serena.

- No, para nada. Una vez que quedamos me tuviste tres cuartos de hora esperando, ¡tres cuartos de hora! Te esperé por que era importante, por que si no...

- Ala, borde.- Respondió Serena

- Hola.- Dijo Takumi un tanto extrañado por la situación, aunque se sentía muy cómodo, como en casa.

- ¡Hola!- Dijo Kunzite asomado por la puerta de la cocina mientras que las dos rubias discutían

- Oye, no es por ofender, pero ¿esto es normal?- Preguntó Takumi a Kunzite acercándose a la cocina haciéndole referencia a la discusión de las dos rubias.

- Emm, si.- Dijo Kunzite con la cabeza bajada.- No hay otra, esa es su relació, se quieren como hermanas, aunque no lo sean. Ahora mismo lo son todo la una para la otra, se mudaron de Tokyo ellas dos solas hasta aquí.- Explicó Kunzite.

- Ey, pues es guapo.- Dijo Mina interrumpiendo la discusión.

- Pues si, es muy guapo, la verdad.- Dijo Serena sincera.

- Anda, vamos a la mesa, que esta puesta y empecemos a cenar.

Ya en la mesa...

- Toma.- Dijo Kunzite sirviendo con un cazo una sopa a todos los comensales.

- Y bueno Takumi, ¿cuanto tiempo llevas en Amsterdam?- Preguntó Minako, intentando dar comienzo al interrogatorio para conseguir información.

- Bueno, pues llevo aquí casi un mes, me he alquilado una casa en el centro y estoy tirando.

- Anda, desde hace un mes...- Dijo Minako.

- ¿Y, dónde vivías antes?- Preguntó Serena.

- Pues- Takumi hizo una pausa de la cual Mina y Kunzite se percataron.- Soy ruso, si. Vengo de Rusia pero desde que era pequeño vivía en Noruega, y luego vine aquí.-

- Lugares bastante frios, ¿no?- Añadió Kunzite.

- Si, supongo. Siempre he vivido en lugares con temperaturas de polos opuestos, mucho calor, o mucho frió jejeje.- Dijo con una risa nerviosa.

Mina y Kunzite decidieron con tan solo una mirada parar con el interrogatorio por que siguiendo con esas preguntas solo harían que Takumi se sintiera incomodo, y no les convenia.

- Pues nosotras vinimos desde Japón hasta aquí hace no mucho.- Dijo Mina para cambiar de tema.

- Si, llevamos aquí unos pocos meses. ¿Y tu Alex, cuanto tiempo llevas aquí en Amsterdam?

- Pues veras.- Con esas dos palabras Kunzite se apoderó de toda su imaginación para omitir el hecho de que murió, y revivió.- Yo tambien vivia en Japón, concretamente en Tokyo, me gustaba mucho esa ciudad, pero un día me dí cuenta que andaba con la gente equivocada. Tenía un grupo de amigos con los que no tenía una relación sana, y decidí que lo mejor era abandonar esa vida y empezar otra.- 

- Joe, que curioso que vengamos del mismo sitio.- Dijo Serena.

- Si, la verdad es que si.- Respondió Kunzite.

- Bueno anda comamos que se enfría esto.- Añadió Serena terminando esa conversación.

El resto de la cena transcurrió normal, Mina y Kunzite lograron sacar un poco más de información, pero nada relevante.

- Mina, ven.- Artemis la llamó teleparicamente para que fuera donde él.

- Dime.- 

- Creo que tengo que ir a Tokyo, creo que esta pasando algo que tengo que saber.-

- ¿Como?- Preguntó la rubia.- A ver, como vas a ir a Tokyo, consideraran que eres un traidor.- 

- No a menos de que me ayudes.-

- ¿Como te voy a ayudar a que vayas con esa panda de iluminados?

- Te necesito, necesito tu ayuda para volver. Ellos me pondrán al día y yo te informaré de todo.- Dijo el gato.- Sabes que a la única a la que no puedo mentir es a ti.-

- Ya... Pero...-

- Mina. Por favor.-

- Creo que... Vale, quizá es lo mejor, pero como me entere de que te pase algo malo les daré una paliza a todos.-

- Hecho.-

Así zanjaron el asunto el gato y Mina, ahora solo tenían que tramar un plan, hacer que las demás sailor inner vieran que Mina se quería deshacer del gato, y que lo acogieran por pena. Lo único, no sabían con certeza si funcionaría. Todo pendía de un hilo, el de que lo acogieran.

La cena terminó y Serena acompañó hasta casa a Takumi, quería pasar más tiempo con él a solas y esa era la única manera. Y eso les dio vía libre a Mina y a Artemis para contarle todo a Kunzite y tramar un plan entre los tres.

En el portal de la casa de Takumi

- Pues ya hemos llegado.- Dijo el hombre.

- Si... Se me ha hecho muy larg.-

- ¿Tan malo es venir conmigo?-

- Aish ¡no! Quería decir que se me ha pasado muy rápido la noche.- Aclaró Serena intentando arreglar la metida de pata.

- Si, ami también. La verdad es que tus amigos son muy majos.- 

- Tengo mucha suerte de tener a Mina al lado, es como una hermana para mi. Y Alex, pues es su novio, pero me cae muy bien, por eso somos amigos.- Explicó la rubia.

- Aquí hace un poco de frío, ¿quieres subir?- Preguntó Takumi.

- Si, porque no.- Serena quería tener algo con él, así de claro, pero el hombre no le daba la sensación de que quisiera algo con ella.

- ¿Un Martini?- Preguntó el chaval a lo que Serena asintió, necesitaba una excusa para quedarse más tiempo y así lanzarse.

- Toma.- Dijo Takumi extendiendo la copa.

- Gracias.- Serena se acercó al ventanal que tenía el muchacho en el salón que daba a una calle de la ciudad.- Tienes unas vistas espectaculares, desde aquí.

- La verdad es que si.- "Aunque yo creo que tengo mejores vistas enfrente mio"  pensó el hombre.

Serena se estaba hartando de su cobardía, se quería lanzar. Se bebió su Martini de un trago, se dio la vuelta y se lanzó encima de él.

La rubia se percató de la reacción estática que tuvo el hombre, por lo cual se disculpó, por un momento se sintió una mala mujer, porqué quizá hizo sentir mal a un pobre chaval.

- Porqué te disculpas.- Dijo Takumi.

Esas fueron las últimas palabras que se escucharon hasta que entraron a la habitación, y despertaron el siguiente día.


Cambio de vida | SailorMoon |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora