Pathetic. [Tsukishima Kei]. [Soulmates].

05.

La fémina metió sus manos en su bolsillo de la chaqueta mientras intentaba conectar miradas con Kōtarō, este solo desviaba la mirada con los brazos cruzados murmurando "traidora" en voz baja.

—Te juro por todos mis dulces que vendré tan rápido como el partido terminé. —Pero a pesar de sus insistencias el chico no respondía.

—No hablo con traidoras. —Fue lo único que contestó Bokuto antes de subir al autobús con dirección a Nekoma.

La albina hizo una mueca, normalmente solo ignoraba cuando el chico búho se podía así, pero ella también quería ir a Nekoma, algo le gritaba con todas sus fuerzas que no fuera al partido hoy y tomara el autobús con sus demás compañeros, masculló por lo bajo.

—Avísanos cuando ganen. —Yukie la abrazó a modo de despedida y subió al autobús.

—Demuéstrale que eres la mejor. —Konoha golpeó su hombro amistosamente y desapareció en la puerta de entrada.

—Suerte, yo hablaré con Bokuto-san.

Akaashi le sonrió antes de irse, ella se despidió del los demás desganada, solo observó el autobús irse. Arrepentida de su decisión empezó a caminar hasta la estación donde se reuniría con sus demás compañeras.

Por primera vez, no estaba feliz de parar los remates del equipo contrario.

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Los de Karasuno habían llegado a Tokio, después de instalarse se prepararon para jugar contra las demás escuelas llevándose la sorpresa de que:

¡Estas eran buenísimas jugando!

Los saques, los remates, todo su juego estaba a otro nivel, a un nivel completamente de las nacionales. Casi todos los juegos los habían perdido, su esperanza era que Kayegama y Hinata llegarán pronto.

—¡Odio aquí! —El grito de Bokuto llamó la atención de todos. —Primero; la traidora de [...] dice que tiene juego y ahora, los chicos primero del ataque raro no ha llegado.

—¿Traidora? ¿Ya no es tu queridísima y preciosa kōhai? —Yukie se burló de él.

Nishinoya alzó su oreja al escuchar el nombre de su crush ser mencionado, ¡lo había olvidado por completo! ¡Ella estudiaba ahí! Debían conocerla. Aprovechando el descanso de acercó hasta el equipo.

—¿Conocen a Suzuki [...]? ¿La segunda mejor líbero a nivel nacional? —Inquirió de manera brusca al estar cerca de ellos.

Se sobresaltaron.

—¿Conocerla? ¡Es mi mejor amiga!

—Pensé que la llamó traidora hace poco, Bokuto-san. —Observó Akaashi haciendo que el capitán se tensara.

—¡Traidora o no, sigue siendo mi mejor amiga! —Contraatacó el chico. —¿Por qué preguntas por ella? ¿La conoces o eres uno de sus fans? —Volvió a girarse al líbero de Karasuno.

—¡Estoy casi seguro de ser su perfecto soulmate!

La confesión de Yuu hizo que todos pusieran su atención en él, el chico teñido parecía muy seguro de sí mismo, Kōtarō solo rió haciendo extrañar a los demás, hasta el mismo Nishinoya le preguntó el motivo de su risa.

—¡Perdón, perdón! —A pesar de disculparse sus carcajadas no paraban. —Es imposible que seas su soulmate, ella tiene moretones en todo su cuerpo, la mayoría se los hizo por mi culpa. —La última parte la dijo con aires orgulloso.

Tsukishima miró a los demás curioso, ¿moretones en todo su cuerpo? Sabia de alguien así, por casualidad bajó la mirada hasta sus brazos, observó cómo algunos golpes ya empezaban a tonarse morados.

¿Y si...?

Nah, eso sería ridículo.

Los soulmate no existían.