Una Pizca De Mak'x 📖

23. Modo Ofensivo: Activado

Escucho música en el interior del departamento donde vive Makena. Imagino que está ocupada con el aseo y por eso la puso, aunque ya es algo tarde. No le tomo tanta importancia. Somos muchos los que trabajamos mientras escuchamos música.

Toco el timbre y espero a que abra.

—Es Sir Maximilian Slora —me anuncia el amigo de mi novia al abrir la puerta—. Pasa, hermano —me saluda de mano.

—¿Qué hay, Sir Christopher Pegasus? —bromeo al darle un leve apretón.

—¡Ey, entendiste la referencia!

—Por supuesto, bro, ¿con quién crees que tratas, eh? —sonrío y me brillan los ojos al ver el lindo bombón que se aproxima—. Hola, preciosa.

Mak me recibe con un beso en la mejilla.

—Hola, galán. Te marqué hace un rato para avisarte que tengo visitas.

—Lo lamento, corazón, estaba conduciendo —declaro antes de pasar a la sala.

—Hola, Max —Briana saluda con alegría.

—Buenas noches, Bri —le hablo con más propiedad, porque he notado que mi novia es algo celosita y no quiero hacerla enojar.

Desvío la mirada hacia el chico bien vestido que está sentado junto a ella. Es el mismo que vi esta mañana.

—Max, él es Jason Milán, un viejo amigo de la universidad —lo presenta Makena sin una pizca de emoción.

El chico se pone de pie mientras curva la boca en una sonrisa extraña. No estoy seguro de si es fingida o cínica, pero su mirada azulada me dice mucho más de lo que me gustaría saber.

—Jason, te presento al chef ejecutivo Maximiliano Slora —continúa mi novia y saludo como debe ser.

Su amigo se sorprende un poco al escuchar mi nivel jerárquico, sin embargo me da un firme apretón de mano.

—Mucho gusto —finjo una sonrisa.

—Igualmente, colega —noto una sutil postura orgullosa, misma que desparece al fijar la mirada en Makena.

—Jason también es chef —agrega Briana mientras tomo asiento frente a ellos.

—Que bien —rodeo con el brazo los hombros de mi novia—. Todos seremos colegas pronto —mantengo la sonrisa casual al mismo tiempo en que estudio, a discreción, al famosísimo Jason.

A simple vista parece un chico promedio. Siendo sincero, no le veo nada espectacular; yo era mucho más atractivo a su edad.

—Slora es un tipo increíble, Jay —Christopher me ofrece una lata de soda. Agradezco, a pesar de que no consumo con frecuencia—. Es todo un hombre de negocios. Sus tres restaurantes están de lujo y…

—Chris… —lo interrumpe Makena.

—¿Qué? ¿Qué dije? —pregunta su amigo abriendo su lata para beber.

—No hay problemas, princesa —interviene el ex novio de Mak—. Chris solo quiere incluir al señor Slora en la conversación.

Okay, la palabra “princesa”, queda totalmente fuera de mis motes para chicas.

—Jay se graduó hace dos años de la universidad y tiene un restaurante en Nueva York —Briana habla entusiasmada captando mi atención—. Ayer me dijo que volvió para invitarnos a trabajar con él, ¿puedes creerlo?

Su comentario me pone en alerta mientras el sujeto que usa "la gran manzana" como anzuelo, se encoge de hombros por un breve instante.

—Solo es para que generen experiencia y no se queden estancados aquí —explica mirando a Makena por segunda ocasión—. Nueva York es una ciudad fabulosa, hay muchos lugares para divertirse.